Instituciones Penitenciarias ordena inspeccionar la seguridad en 70 c¨¢rceles
La Direcci¨®n General de Instituciones Penitenciarias ha iniciado una inspecci¨®n en 70 prisiones para comprobar las medidas de seguridad con que cuentan y si los funcionarios se atienen a la legalidad cuando aplican medidas coercitivas para reducir a los presos violentos. Tanto el director de Instituciones Penitenciarias como el de la Guardia Civil insisten en que la evasi¨®n de tres reclusos de Alcal¨¢-Meco se debi¨® a una cadena de errores humanos. Los j¨®venes escapados el s¨¢bado siguen, mientras tanto, sin ser localizados.
Desde el lunes ha comenzado, por orden del director general de Instituciones Penitenciarias, ?ngel Yuste, una inspecci¨®n para determinar la situaci¨®n de los sistemas de seguridad con que cuentan las 70 prisiones a su cargo. Seg¨²n fuentes del departamento, esta inspecci¨®n ya estaba prevista antes de que se produjera la rocambolesca evasi¨®n de tres internos del penal de Alcal¨¢-Meco. Adem¨¢s de revisar los sistemas t¨¦cnicos de alarma y otros dispositivos, los inspectores comprobar¨¢n si hay lugares vulnerables y si los funcionarios cumplen las normas encaminadas a impedir fugas. Fuentes penitenciarias recalcan que la experiencia demuestra que la mayor¨ªa de las escapadas se producen en verano y en los dos ¨²ltimos meses del a?o, aunque no se ha determinado por qu¨¦.La inspecci¨®n en los 70 penales tambi¨¦n se ocupar¨¢ de ver c¨®mo aplican los funcionarios las "medidas coercitivas" para reducir a los presos que se niegan a acatar las normas o que emplean la violencia contra otros reclusos o contra los funcionarios. El objetivo es comprobar que ¨¦stos se atienen a la legalidad y que no se producen "excesos" que posteriormente puedan originar denuncias por malos tratos. Yuste reiter¨® ayer que la fuga de Alcal¨¢-Meco no se debi¨® a un fallo en los sistemas t¨¦cnicos, sino a errores humanos. El director de la Guardia Civil, Santiago L¨®pez Valdivielso, que ha suspendido de funciones a un cabo y a un guardia, coincide en que la fuga fue propiciada por "una acumulaci¨®n de fallos humanos". Los represantes en Alcal¨¢-Meco de los sindicatos CSI-CSIF, CC OO, ACAIP, UGT, USO y USIAP han rubricado un comunicado conjunto en el que acusan a Yuste de "cinismo" y "deslealtad" hacia sus funcionarios, al imputar toda la responsabilidad a los cuatro expedientados. Piden la dimisi¨®n del director general.
B¨²squeda de los evadidos
La polic¨ªa y la Guardia Civil buscan en poblados chabolistas de Zaragoza y Madrid - en los barrios marginales de La Rosilla y el Cerro de la Mica- a los tres j¨®venes evadidos. Jos¨¦ Mar¨ªa Mu?oz Jim¨¦nez, de 21 a?os, de Zaragoza, es sobre el que pesan condenas m¨¢s largas, una de nueve a?os y otra de tres, por robos y tr¨¢fico de drogas. Seg¨²n fuentes policiales, su especialidad es el atraco de tiendas de frutos secos, a cuyas empleadas intimida con una jeringuilla que dice estar infectada de sida. Despu¨¦s, coge el dinero de la caja y sale corriendo. En uno de estos establecimientos le result¨® tan f¨¢cil el robo que decidi¨® repetir un segundo golpe. Mu?oz, que est¨¢ acusado tambi¨¦n de robar cobre y plomo en un almac¨¦n, no ha causado nunca heridas a sus v¨ªctimas. Policialmente no est¨¢ considerado un hombre peligroso. Sebasti¨¢n Utrera Fern¨¢ndez, de 20 a?os, de Madrid, est¨¢ condenado por robo a dos a?os de reclusi¨®n y a 16 d¨ªas m¨¢s por utilizaci¨®n ileg¨ªtima de veh¨ªculo de motor. Su especialidad son los tirones de bolsos contra las mujeres que esperan confiadamente en la cola del autob¨²s.El m¨¢s joven de los tres, Ra¨²l G. S., de 17 a?os, est¨¢ cumpliendo una condena de dos a?os y 12 d¨ªas por hechos similares: robos de bolsos por el procedimiento del tir¨®n desde un coche en marcha. No consta que ninguna de las v¨ªctimas haya sido lesionada, pese a que es frecuente que la mujer que sufre un tir¨®n de este tipo caiga violentamente al suelo.
Funcionarios de Alcal¨¢-Meco recuerdan que uno de los j¨®venes sol¨ªa tocar la guitarra para amenizar los muchos ratos de ocio en el patio. As¨ª lo hizo el s¨¢bado pasado. Despu¨¦s, como est¨¢ reglamentado, entreg¨® el instrumento a un funcionario para que lo guardara en el lugar adecuado. Fue su ¨²ltimo recital, minutos antes de saltar la alambrada y darse a la fuga.
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