"De aqu¨ª a Hollywood"

"Lo siento, ha sido un fallo". El patio de butacas del Casino l"Alian?a de Poblenou estall¨® en aplausos el viernes por la tarde cuando uno de los actores reconoci¨® un peque?o lapsus de todo el cuerpo esc¨¦nico. Ocurri¨® durante una funci¨®n muy especial en la que participaron 46 j¨®venes disminuidos ps¨ªquicos o aquejados por alguna enfermedad mental. Todos ellos hab¨ªan preparado durante tres meses sus papeles en Les quatre estacions, un montaje ideado y dirigido por la actriz Gloria Rognoni. Pese al peque?o traspi¨¦, provocado por los nervios, los int¨¦rpretes disfrutaron de la representaci¨®n. "De aqu¨ª a Hollywood", sentenciaba con entusiasmo una de las actrices cuando se baj¨® el tel¨®n. Atr¨¢s hab¨ªa quedado una hora intensa en la que, a trav¨¦s de la expresi¨®n pl¨¢stica y corporal, reforzada por una narraci¨®n construida mediante refranes, juegos de palabras y canciones, los actores explicaron al p¨²blico la sucesi¨®n de estaciones que conforman un a?o. Lo hicieron a partir de las habilidades de cada uno de los int¨¦rpretes: hubo canciones en directo, breack dance y bailes diversos, desarrollados ante una escenograf¨ªa construida por ellos mismos bajo la supervisi¨®n de un equipo encabezado por Teresa Calafell, y con un vestuario igualmente confeccionado con sus propias manos. Integraci¨®n cultural Los esforzados actores est¨¢n vinculados a la Femarec, una fundaci¨®n especializada en iniciativas sociales que, entre otras l¨ªneas de trabajo, contribuye a la integraci¨®n laboral de los enfermos ps¨ªquicos. Para muchos de los participantes, la del viernes fue la primera oportunidad de pisar un escenario. Otros ya hab¨ªan experimentado esa sensaci¨®n el pasado a?o, cuando Gloria Rognoni les dirigi¨® en la escenificaci¨®n del poema Hivern, de Miquel Mart¨ª i Pol: "Yo ya me conozco un poco este mundo, aunque sigo sin dominar el factor nervios", comentaba uno de los reincidentes. Tanto para ne¨®fitos como para repetidores fue una experiencia singular, con efectos muy beneficiosos para su autoestima, que les permiti¨® tambi¨¦n trabajar aspectos como la dicci¨®n y la habilidad manual. "Muchas veces pensamos que la integraci¨®n de los chicos y chicas con problemas consiste en darles un puesto de trabajo. ?se es un gran paso, pero tambi¨¦n hay que procurarles la integraci¨®n cultural, que normalmente se reserva a la gente culta", se?al¨® Amelia Clara, presidenta de la Femarec. La experiencia ha sido tambi¨¦n enriquecedora para la directora del espect¨¢culo, que coordin¨® las ceremonias de inauguraci¨®n y clausura de los Juegos Paral¨ªmpicos en Barcelona. "He aprendido la enorme generosidad que existe entre ellos. A veces, cuando trabajas con actores profesionales te das cuenta de que el buen trabajo de uno puede provocar recelos en los otros. Pero a estos chicos les gusta que el compa?ero quede bien, lo cual es toda una lecci¨®n de vida y humanidad". Rognoni, que debe utilizar una silla de ruedas desde que sufri¨® un accidente durante una representaci¨®n de Els Joglars -compa?¨ªa a la que pertenec¨ªa-, manifest¨®: "Yo tengo la disminuci¨®n f¨ªsica y ellos la ps¨ªquica, pero las personas con disminuci¨®n disponen de un nivel de recursos diferente al de quienes no las padecen". La directora asegur¨® que la clave de su trabajo con los chicos consiste en que los ha tratado con normalidad, con la misma actitud con la que se presenta ante actores profesionales. "Creo que ¨¦sta es una de las razones por las que ellos se esfuerzan al m¨¢ximo", concluy¨®.