Silvia Comes y Lidia Pujol cantan los poemas de Cernuda y Ginsberg

Su repertorio est¨¢ bien definido. Cantan poemas de Luis Cernuda, Jaime Gil de Biedma y Allen Ginsberg: tres vidas intensas y complejas, ebrias de amor, muerte y verbo. Silvia Comes y Lidia Pujol cuentan y cantan historias ajenas desde que empezaron a asimilarlas como propias. Se han hecho muy conocidas en Catalu?a, pero con su primer disco, titulado s¨®lo con sus nombres, pretenden ampliar horizontes. Han colaborado con Llu¨ªs Llach, Pedro Guerra y Jackson Browne, y ahora preparan una gira que les llevar¨¢ por varias ciudades espa?olas.

Poner m¨²sica a la poes¨ªa no es una pr¨¢ctica inhabitual y hasta parece un recurso para algunos m¨²sicos que no se sienten capaces de escribir sus propias letras. Pero, si se decide lo primero, la calidad de las composiciones y el acierto al elegir los poemas resulta una tarea tan delicada como componer una canci¨®n desde la nada. Silvia Comes y Lidia Pujol han hilado con delicadeza y paciencia su primer disco con poemas de Luis Cernuda, Jaime Gil de Biedma y Allen Ginsberg.Estas dos cantantes han paseado exhaustivamente este repertorio por los escenarios catalanes, donde ya son bastante conocidas, antes de decidirse a grabarlos. "Hab¨ªamos pensado grabar un disco en directo y as¨ª lo preparamos durante los cuatro conciertos que ofrecimos en el teatro Lliure. Se llegaba a sentir el calor del p¨²blico durante el espect¨¢culo, pero ten¨ªa ciertos fallos t¨¦cnicos y decidimos entrar en el estudio. Quer¨ªamos que el disco fuera algo hecho para permanecer, y lo quer¨ªamos lo m¨¢s perfecto que nos fuera posible", explica Silvia Comes.

El m¨¦todo de trabajo dice mucho de la artesan¨ªa de este d¨²o. Se conocieron hace tres a?os en un espect¨¢culo teatral que ya inclu¨ªa algunos de estos poemas musicados. Pero ellas los hicieron suyos y los modelaron a su medida.

M¨²sica entre las letras

"Walter Garc¨ªa construy¨® las melod¨ªas y nosotras las retocamos para grabarlas", afirma Comes. "La mayor¨ªa de los poemas tiene su propia m¨²sica dentro y hay que saber extraerla. No todos la tienen, es cierto, algunos son bastante secos. Pero los de Cernuda y Gil de Biedma tienen mucha m¨²sica interior y los de los poetas beat tambi¨¦n".La elecci¨®n de estos poemas no es gratuita. "Nos interesa cada uno de ellos por s¨ª solo y no por la ¨¦poca que vivieron o lo que representan", dice Comes. "Hemos escogido estos poetas y estos poemas porque, de alguna manera, tuvimos un contacto directo con ellos. Hace unos a?os, cuando Allen Ginsberg vino a Barcelona, ¨¦l mismo cant¨® algunos poemas suyos y Lidia cant¨® con ¨¦l. Yo conoc¨ª a Jaime Gil de Biedma despu¨¦s de interpretar unos poemas de Cernuda. ?l se me acerc¨® luego y me habl¨® de la correspondencia que hab¨ªa sostenido con ¨¦l. Eso me hizo acercarme a la obra de Gil de Biedma con otra perspectiva, m¨¢s cercana", relata.

Ellas ven estos poemas como historias cantadas, como letras de canciones. "Nos interesan m¨¢s las letras que podamos sentir y evitamos los poemas cr¨ªpticos y dif¨ªciles de entender", a?ade Comes. "Son poetas que, al leerlos, te ponen las cosas en su sitio. Nos interesan precisamente ¨¦stos no porque tengan un aura de malditismo, sino porque conectan con la rareza de quienes son capaces de subirse a un escenario y ponerse en evidencia", admite.

No son pocos los m¨²sicos catalanes que han escogido, con mayor y menos fortuna, la f¨®rmula de poner m¨²sica a la poes¨ªa, pero ellas prefieren pensar que lo suyo se sostiene por s¨ª solo, en cuanto se escucha. "Muchos hemos conocido a Machado y Hern¨¢ndez gracias a las canciones de Serrat", dice. "Pero para nosotras no es un recurso. Lo hacemos porque sentimos un verdadero amor por esos poetas".