Noche de estreno en urgencias
Instantes despu¨¦s de sonar las 12 campanadas que daban la bienvenida al a?o 1999 entraba por la puerta del servicio de urgencias del Hospital de Alzira, Jos¨¦ Miguel Nicol¨¢s, el primer paciente de este centro, acompa?ado de su mujer y aquejado de "mareo" y "dolores estomacales". El doctor Antonio Burgue?o, director asistencial de Adeslas y alma mater del primer hospital p¨²blico de la Comunidad gestionado por una empresa privada, abandon¨® precipitadamente las felicitaciones que a esa hora compart¨ªan sanitarios y directivos para atender a este paciente de Algemes¨ª. En sus primeras 24 horas de funcionamiento, el nuevo hospital atendi¨® a un centenar de pacientes, de los cuales cuatro quedaron internados. Un caso de enfermedad neurol¨®gica, dos infartos y una fractura de cadera obligaron a abrir la UVI y a estrenar los quir¨®fanos durante la primera jornada, en la que hubo momentos en que el servicio de urgencias se vio "desbordado", seg¨²n reconoci¨® ayer el gerente, Alberto de Rosa. A la media hora de abrir el hospital se escucharon en la primera planta los primeros sollozos procedentes de un beb¨¦; era Aar¨®n, vecino de Alzira, al que el pediatra le diagnostic¨® "infecci¨®n respiratoria acompa?ada de una erupci¨®n cut¨¢nea". Como tantos habitantes de la comarca, este peque?o hab¨ªa nacido en el Hospital La Fe de Valencia. Sus padres y abuelas apenas invirtieron cinco minutos en el desplazamiento al nuevo centro, por lo que valoraron muy especialmente la ventaja de tener tan cerca de su domicilio un hospital. "Hac¨ªa mucha falta un hospital" en la comarca, era la frase m¨¢s repetida por los primeros usuarios de urgencias. Vicente P¨¦rez, que aguardaba algo preocupado el resultado de la radiograf¨ªa practicada a su mujer, aquejada de un traumatismo en el rostro, se mostr¨® "satisfecho" porque en los ¨²ltimos tiempos "hab¨ªa realizado bastantes viajes a los hospitales de Valencia". Los primeros casos del hospital fueron diagnosticados como "leves" pero seg¨²n avanzaba la madrugada llegaron algunos m¨¢s graves: una mujer aquejada de una angina de pecho y otra que se fractur¨® la cadera en una ca¨ªda casual y que fue la paciente de la primera intervenci¨®n quir¨²rgica del hospital a media ma?ana de ayer. El director del servicio de urgencias confes¨® sentirme "emocionado" con este nuevo reto profesional. Jos¨¦ Hern¨¢ndez destac¨® "la ventaja impresionante" que a su juicio y al del resto de m¨¦dicos supone contar con la historia cl¨ªnica informatizada de los 230.000 vecinos de La Ribera. Antonio Burgue?o, que durante las primeras horas del hospital abandon¨® su tarea de directivo para recordar sus tiempos de especialista en Medicina Interna, se mostraba "tranquilo y sereno" tras asistir personalmente al reci¨¦n nacido centro hospitalario. Pasados los primeros nervios se coloc¨® de nuevo la bata de responsable de Adeslas para afirmar con cierto orgullo: "Le hemos dado un pellizco importante a La Fe". Al exterior de las instalaciones la improvisaci¨®n con la que se procedi¨® a la apertura fue patente. Los accesos est¨¢n a medias todav¨ªa, la se?alizaci¨®n es provisional y la ampl¨ªsima zona reservada a los aparcamientos se hallaba ayer embarrada. A escasos metros de la puerta principal permanec¨ªan utensilios de trabajo, m¨¢quinas y tuber¨ªas por enterrar. "Es una locura", dec¨ªa un empleado que se quejaba del fr¨ªo, ya que tanto en la cafeter¨ªa como en algunas dependencias auxiliares se notaba la ausencia de la calefacci¨®n. No en vano, los t¨¦cnicos del Ayuntamiento de Alzira a¨²n esperan la subsanaci¨®n de estas deficiencias para otorgar las licencias de apertura y de primera ocupaci¨®n.
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