El Celta busca su I¨ªmite

V¨ªctor Fern¨¢ndez no conoce el l¨ªmite del Celta y su hinchada tampoco. El equipo de los elogios, el que monopoliza la ilusi¨®n en un campeonato sin due?o, demostr¨® ayer que todav¨ªa le resta margen para crecer. Sin Mostovoi, su jugador m¨¢s desequilibrante, y ante un rival que le pretend¨ªa dar caza en la tabla, se les taparon los de Vigo con un f¨²tbol sencillamente fabuloso; un f¨²tbol que quiere dar la raz¨®n a quienes aventuran que estamos ante uno de los mejores conjuntos de Europa. No estaba Mostvoi, pero s¨ª Revivo, que estuvo inmenso; y Mazinho, una exageraci¨®n de centrocampista. No se puede detener al Celta porque funciona como un grupo y siempre habr¨¢ alguien dispuesto a amargar la tarde al rival.Al Celta le bast¨® con esperar para volver a encontrarse con lo mejor de s¨ª mismo. Tard¨® exactanente 22 minutos en diagnosticar al Oviedo, demasiado atrevido, y encontrar sus debilidades para desde ese momento, explotarlas con contundencia. En ese minuto se produjo una jugada impresionante que inici¨® Michel Salgado en el lateral del ¨¢rea de Dutruel y en un suspiro culmin¨® Revivo con un fuerte balonazo en la escuadra. Fue uno de esos lances que anuncian los mejores momentos del equipo de V¨ªctor Fern¨¢ndez, que tardar¨ªa ya pocos segundos en adelantarse. Lo hizo aprovechando una de las pocas artima?as del Oviedo, que lleg¨® a Vigo con la intenci¨®n de emplear el mismo f¨²tbol de toque y b¨²squeda de espacios que se usa en Bala¨ªdos.

Para enfriar los primeros destellos del rival, Esteban cedi¨® un saque de puerta a Onopko, Gan¨® unos segundos, pero el saque lleg¨® a los pies de Makelele antes de que el central ruso tuviese tiempo de adelantar la l¨ªnea de fuera de juego, y Mazinho aprovech¨® ese espacio con un pase en profundidad que Revivo control¨® con el pecho y convirti¨® en gol. Los hombres de Fernando V¨¢zquez pagaron un precio muy alto por su ¨²nica frivolidad, porque el conjunto del Carlos Tartiere, pese al resultado tuvo en Vigo la apariencia de un grupo cohesionado y con patr¨®n. No hubo ni rastro de aquellos equipos apocados y de corte defensivo que tanto da?o le sol¨ªan hacer al Celta cuando el entrenador gallego dirig¨ªa al Compostela. El equipo asturiano crey¨® que podr¨ªa discutir el bal¨®n y todo el peso del Celta cay¨® sobre ¨¦l.

No supo el Oviedo jugar con desventaja en el marcador porque no hay muchos equipos en Europa capacitados para reaccionar cuando el Celta juega como ayer. Su f¨²tbol no admite adjetivos en esas ocasiones porque es cuesti¨®n de grado, por momentos el del Celta fue sencillamente perfecto.