Renfe

Quiero aprovechar la oportunidad que generosamente nos brinda a los lectores de ese peri¨®dico la secci¨®n de Cartas al Director para denunciar el comportamiento de Renfe en relaci¨®n con los hechos que brevemente paso a relatar:El pasado d¨ªa 22 de diciembre, mi madre, de 82 a?os de edad, sufri¨® una ca¨ªda con rotura de cadera cuando viajaba en el tren Intercity de las 11.15 de Madrid a Valencia, al tropezar en un malet¨ªn que, mal colocado debajo de un asiento, sobresal¨ªa ampliamente ocupando parte del pasillo. Esto ocurri¨® a la media hora escasa de iniciarse el viaje de cuatro horas de duraci¨®n, durante las cuales mi madre -que viajaba sola- qued¨® inmovilizada en su asiento, sin que, por parte del personal de Renfe, se le prestara la atenci¨®n que merece una persona en ese estado. Incluso se dio la circunstancia de que el citado malet¨ªn, causante del accidente, permaneci¨® en el mismo lugar durante el resto del viaje sin que se adoptara ninguna medida para retirarlo, a pesar de haberlo pedido la persona accidentada. A tal extremo lleg¨® la falta de atenci¨®n, que, aun en esa situaci¨®n, tuvo que abonar el importe de un vaso de leche que le sirvieron de la cafeter¨ªa del tren.

Acabo resaltando que, una vez m¨¢s, la solidaridad humana tuvo que suplir tan lamentable actuaci¨®n de los responsables de un servicio p¨²blico, ya que fueron dos personas que viajaban en el tren las que le prestaron la ayuda necesaria hasta llegar a la estaci¨®n de Valencia, encarg¨¢ndose incluso de bajarla, con muchas dificultades, para su traslado en silla de ruedas, que fue la ¨²nica atenci¨®n recibida por parte de Renfe.

Confiando en que los continuos y agobiantes mensajes publicitarios de nuestra red de ferrocarriles se vean acompa?ados de una verdadera mejora en la prestaci¨®n del servicio.-