Samaranch debe retirarse

El despido de media docena de los que aceptaron sobornos en las filas de los m¨¢s de cien miembros del Comit¨¦ Ol¨ªmpico Internacional debe servir para salvar las apariencias. La promesa de probar un sistema resistente a la corrupci¨®n a la hora de elegir la ciudad anfitriona de los juegos ol¨ªmpicos de invierno del a?o 2006, es bien acogida. Pero el alcance del esc¨¢ndalo indica que el presidente del Comit¨¦ Ol¨ªmpico Internacional, Juan Antonio Samaranch, deber¨ªa retirarse. (...) Ya que el soborno ha infectado la selecci¨®n de las sedes ol¨ªmpicas baj¨® su mandato, carece de credibilidad para supervisar que se haga con limpieza. Samaranch preferir¨ªa retirarse en el 2001. Pero todos aquellos que tienen intereses en los Juegos Ol¨ªmpicos, incluidos los grandes deportistas, las federaciones deportivas, los Gobiernos y las empresas que gastan decenas de millones en los Juegos para promocionar sus productos, deber¨ªan presionar para que se produjese su inmediata dimisi¨®n. El Comit¨¦ Ol¨ªmpico Internacional es antidemocr¨¢tico, secretista y no rinde cuentas a nadie. (...) Todav¨ªa juega un papel fundamental en la financiaci¨®n y comercializaci¨®n de los Juegos. Las ciudades invierten cientos de millones en construir servicios esperando obtener beneficios econ¨®micos posteriores a la celebraci¨®n de los Juegos Ol¨ªmpicos. Los presupuestos de televisi¨®n y publicidad llegan a ser enormes. Por estas razones, el pr¨®ximo presidente del Comit¨¦ Ol¨ªmpico Internacional deber¨ªa ser un ejecutivo que pueda manejar honradamente el lucrativo negocio de la puesta en escena de los Juegos Ol¨ªmpicos.

Nueva York, 27 de enero