Gibraltar, problema permanente
L os vecinos de la comarca del Campo de Gibraltar tienen esta semana una nueva oportunidad para reclamar un cambio en la pol¨ªtica que lleva a cabo en la zona el Gobierno espa?ol. La aplicaci¨®n de severos controles en la frontera con la colonia brit¨¢nica ha provocado un serio rev¨¦s econ¨®mico para los residentes en el Pe?¨®n, pero tambi¨¦n para los miles de andaluces que tienen all¨ª su empleo y su sustento econ¨®mico. Est¨¢ claro que no se ve por ning¨²n lado la bondad de esta medida, dictada por un Ejecutivo que sigue dando evidencias claras de una improvisaci¨®n permanente ante un conflicto que han dejado, ingenuamente, en manos del responsable de Asuntos Exteriores, Abel Matutes. El resultado inmediato de esta actuaci¨®n est¨¢ en la movilizaci¨®n de pasado ma?ana, as¨ª como en el claro debilitamiento del PP en la comarca y en el allanamiento del terreno que se est¨¢ produciendo para el aventurerismo pol¨ªtico que representa Jes¨²s Gil. Ni siquiera el anuncio de la creaci¨®n de una comisi¨®n interministerial para coordinar inversiones y otras iniciativas en este enclave ha servido para tranquilizar los ¨¢nimos. En medio de este panorama, se espera que en esta semana haya novedades en torno a la reforma del antiguo PER y la aplicaci¨®n a los jornaleros del campo del sistema contributivo de la Seguridad Social. Se re¨²ne la mesa de negociaci¨®n entre Gobierno central y sindicatos, un encuentro en el que por fin se espera se d¨¦ a conocer c¨®mo pretende Madrid introducir los cambios reclamados. En Andaluc¨ªa, se teme que esta medida suponga recortes por otro lado y est¨¢ claro que una nueva foto de los dirigentes sindicales con el ministro de turno, firmando un acuerdo sobre este significativo asunto para Andaluc¨ªa, como es el de los jornaleros del campo, sentar¨ªa desde luego muy mal a los socialistas. Pero lo que ya ha sentado realmente mal, a tenor de las respuestas surgidas, ha sido el planteamiento de Manuel Chaves en favor de la creaci¨®n de una caja ¨²nica en Andaluc¨ªa, fruto de la fusi¨®n de las seis entidades de ahorro existentes en la actualidad. El presidente de la Junta confiesa en corto que no ha ocurrido nada de lo que ya ¨¦l se esperaba. No se ha llevado sorpresas, pero tal vez no calcul¨® bien del todo c¨®mo se iban a tomar estos planes, no ya sus socios de gobierno, los andalucistas, sino tambi¨¦n los alcaldes y, sobre todo, los presidentes de las cajas, confortablemente instalados en sus puestos y convertidos en aut¨¦nticos gur¨²s de nuestra econom¨ªa. Algunos ya se posicionaron inmediatamente a la contra e incluso llegaron a acelerar, por su cuenta y riesgo, otras operaciones, con el claro fin de obstaculizar a¨²n m¨¢s los planes de Chaves. De todo ello parece haber tomado nota el jefe del Gobierno andaluz quien, ante el ruido formado, matiza ahora que no se har¨¢ nada sin el di¨¢logo previo con las partes implicadas. Y eso s¨ª, sin prisas, pero tampoco sin pausas, para precipitar el proceso despu¨¦s de las elecciones municipales. Con estas premisas, la consejera de Econom¨ªa y Hacienda, Magdalena ?lvarez, se re¨²ne el mi¨¦rcoles con los presidentes de las cajas, quienes por cierto dan la impresi¨®n de que han accedido al cargo por concurso-oposici¨®n, dada su val¨ªa y sus amplios y profundos conocimientos del complejo mundo de las finanzas. Por lo dem¨¢s, entramos en un mes de marzo en el que se debe celebrar, por fin, la reuni¨®n de la Comisi¨®n Mixta de Representantes del Gobierno central y del auton¨®mico, para comenzar a negociar nuevas transferencias para Andaluc¨ªa. ?se fue, al menos, el acuerdo al que lleg¨® en su d¨ªa el consejero de la Presidencia, Gaspar Zarr¨ªas, con representantes de la Administraci¨®n central. Las pol¨ªticas activas de empleo, las confederaciones hidrogr¨¢ficas y la revalorizaci¨®n de los servicios y dotaciones de Justicia aguardan, de una vez por todas, un acuerdo en el seno de una comisi¨®n que no se celebra desde hace dos a?os. ANTONIO Y?LAMO
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