En estado de gracia

Fiesta Viaje a los sue?os polares de Cadena 40 Principales. Los Planetas, Polar y Vacaciones. Akuarela Auditorium. Valencia, 12 de marzo de 1999.No les falta sentido del humor a Los Planetas: bautizaron su segundo elep¨¦ con el nombre de Pop y ahora, sin embargo, parecen querer reivindicar ciertas sonoridades que dif¨ªcilmente encajar¨ªan en los moldes del pop (alternativo o no) m¨¢s convencional. As¨ª, cuando sonaron algunos de sus nuevos temas -incluidos en un single que sale a la venta ma?ana lunes- m¨¢s de un aficionado se qued¨® petrificado y aturdido. No es de extra?ar. Prueba esto es un rock acorazado que juega a despistar con sus enrevesados trenzados de guitarra y La guerra de las galaxias subraya la faceta m¨¢s psicod¨¦lica y atmosf¨¦rica -a un paso del rock sinf¨®nico (otra de sus bromas)- de la banda. Para completar la jugada, J present¨® el aclamad¨ªsimo Cumplea?os total como "otro rock and roll". En cualquier caso, la formaci¨®n granadina demostr¨®, por fin, que adem¨¢s de enormes discos (el ¨²ltimo, Una semana en el motor de un autob¨²s, figura en lo alto de las listas de mejores ¨¢lbumes nacionales del 98 de las publicaciones musicales m¨¢s prestigiosas) son capaces de ofrecer conciertos apote¨®sicos y resolver sus puntos d¨¦biles -en directo, la voz, aunque ha mejorado notablemente, sigue siendo su particular tal¨®n de Aquiles- con una profesionalidad y solidez instrumental digna de encomio. Fue un placer comprobar que temas como David y Claudia han rejuvenecido con la edad y que, superan en contundencia y vitalidad a las lecturas previas registradas en estudio. Ante esta soberana lecci¨®n de inspiraci¨®n, intensidad y maestr¨ªa, ni siquiera la escasa duraci¨®n del espect¨¢culo (unos tres cuartos de hora) o su valiente decisi¨®n de pasar por alto el cap¨ªtulo de los bises se les puede reprochar. Los Planetas en estado de gracia. Sonido excelente Tambi¨¦n los valencianos Polar, ante una sala absolutamente abarrotada de espectadores, ofrecieron uno de esos pases mod¨¦licos en los que ni una sola pieza del conjunto parece desviarse ni un mil¨ªmetro del lugar que le corresponde. Gozaron de un sonido excelente -limpio, pero rotundo- y escogieron, para la ocasi¨®n, un muy apropiado repertorio (versi¨®n de The Velvet Underground incluida) que combin¨® su faceta m¨¢s enso?adora y melanc¨®lica con aquella otra m¨¢s pop y, por lo tanto, asequible para ese p¨²blico que ignora las debilidades (Luna, Felt, Spaceman 3...) del grupo. Los murcianos Vacaciones, en cambio, se manejan con desparpajo y hasta, en peque?as dosis, resultan simp¨¢ticos, pero sus enormes limitaciones instrumentales y el abundante batiburrillo de t¨®picos indies (secci¨®n infantiloide y na?f) con el que ali?an su discurso (tributo a Juan de Pablos y terrible versi¨®n castellanizada de Heavenly) les sit¨²an, sin contemplaciones, en el vag¨®n de cola del denominado acn¨¦-pop. A su lado, Los Fresones Rebeldes, Nosotr?sh o TCR parecen aut¨¦nticos virtuosos.