El aterramiento del marjal de La Safor en Tavernes contin¨²a a pesar del expediente judicial

La justicia investiga desde oto?o pasado el aterramiento del marjal de La Safor en Tavernes de la Valldigna, supuestamente realizado por la empresa de Gandia M¨¢rmoles Compac, SA. Los vertidos con lodos de m¨¢rmol se suceden desde hace una d¨¦cada y han supuesto el aterramiento de muchas lagunas de este humedal. Pese al auto de una juez de Sueca que decret¨® en noviembre de 1998 la paralizaci¨®n de toda transformaci¨®n, el Instituto de Defensa y Estudio Ambiental (Idea), vinculado a Esquerra Unida, ha constatado que los vertidos, esta vez de escombros, prosiguen.

Idea tiene intenci¨®n de informar de estos hechos a la magistrada Amparo Tur, titular del Juzgado de Instrucci¨®n n¨²mero 4 de Sueca, que encarg¨® el cumplimiento de su orden de paralizaci¨®n al Servicio de Protecci¨®n de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil, a la Guarder¨ªa Rural y a la Polic¨ªa Local de Tavernes de la Valldigna. Seg¨²n Jos¨¦ Luis Ramos, abogado de Idea, en este tiempo al menos ha desaparecido una balsa de unos 500 metros cuadrados que estaba junto al muro que existe a la entrada de la finca que M¨¢rmol Compac, SA, posee en Tavernes. Es decir, una transformaci¨®n muy visible que, a juicio de Ramos, los agentes deber¨ªan haber detectado inmediatamente y que supone al menos el movimiento de "100 camiones de tierra". Sin embargo, existe un escrito dirigido al juez por el Seprona en el que, bas¨¢ndose en una visita efectuada el 16 de febrero, se afirma: "Se han realizado gestiones para averiguar si efectivamente se han vertido nuevos escombros sobre la zona, con el resultado de que en dicho lugar no se ha llevado a efecto el vertido de escombros sobre la zona de marjal que no estaba aterrada". Pero ¨¦sa no es la ¨²nica mutaci¨®n que ha sufrido en estos meses este marjal, incluido en el Cat¨¢logo de Zonas H¨²medas elaborado por Medio Ambiente aunque todav¨ªa no ha sido aprobado por el Consell. A juicio de Idea, en una superficie superior a los 10.000 metros se ha procedido a la elevaci¨®n del terreno en m¨¢s de un metro. El fin de esta mutaci¨®n, adem¨¢s de deshacerse irregularmente de unos residuos inertes, es transformar el ¨¢rea en zona de cultivo. Como ha sido pr¨¢ctica tradicional en centenares de hect¨¢reas de albuferas y marjales valencianos, el limo f¨¦rtil que normalmente est¨¢ inundado se extrae con potentes excavadoras, el hueco se rellena con miles de toneladas de escombros y otros residuos a¨²n m¨¢s engorrosos hasta un nivel m¨¢s elevado y la superficie se vuelve a tapizar con el limo. Resultado: desaparece un terreno bald¨ªo, aunque con una biodiversidad valiosa, seg¨²n los expertos, y aparece una finca de regad¨ªo. La din¨¢mica de la destrucci¨®n del marjal hace que sea dif¨ªcil detectar el problema, los escombros quedan ocultos bajo una alfombra de naranjos o de lechugas y s¨®lo la memoria permite conocer que ah¨ª hab¨ªa una laguna. La memoria o la visi¨®n de centenares de camiones entrando en el amenazado humedal. Seg¨²n Idea, muchos ciudadanos han advertido este movimiento de veh¨ªculos pesados con escombros desde la v¨ªa del ferrocarril o desde la carretera colindante, por lo que Ramos ve "inexplicable" que la Guardia Civil no se haya percatado del asunto. Es m¨¢s, el abogado de Idea narra c¨®mo un conductor de uno de los camiones que volcaron los escombros le explic¨® que la Polic¨ªa Municipal le hab¨ªa dicho que lo ¨²nico que no pod¨ªan verter eran lodos de m¨¢rmol pero que s¨ª pod¨ªa llevar tierra. Por este motivo Idea ha solicitado que la juez cite a declarar al jefe de la Polic¨ªa Local de Tavernes. Tambi¨¦n ha pedido que se proh¨ªba la presencia de m¨¢quinaria pesada. La destrucci¨®n del marjal de La Safor, un humedal que ocupa 1.292,5 hect¨¢reas entre los t¨¦rminos de Xeresa, Xeraco, Gandia y Tavernes de la Valldigna, tiene muchos c¨®mplices: propietarios de fincas, agricultores, constructores, transportistas y hasta mun¨ªcipes. En 1998 salt¨® a la luz el aterramiento de centenares de hect¨¢reas con escombros. Los humedales, con muy mala imagen, s¨®lo han sido reivindicados por los ecologistas y por los cient¨ªficos que los han destacado como algunos de los h¨¢bitats m¨¢s valiosos por su enorme biodiversidad. En Xeresa, la desaparici¨®n de ullals se hac¨ªa con la supuesta complicidad del Consistorio, cuyo alcalde, Cipri¨¤ Fluix¨¤, est¨¢ siendo investigado por conceder centenares de licencias para "almacenar" escombros en las fincas. Una juez de Gandia investiga el caso. De la integridad del marjal nadie responde. Ni las autoridades ni la Consejer¨ªa de Medio Ambiente.