"Siva es tan divertido como Dionisio", afirma Roberto Calasso

El Rig Veda, los Upanishads, el Mahabharata... ?Qui¨¦n se atrever¨ªa a tomar los textos fundamentales del hinduismo y convertirlos en materia narrativa propia? Roberto Calasso, sin duda, el escritor que hizo lo mismo con los mitos griegos en Las bodas de Cadmo y Harmon¨ªa y con Talleyrand y todo lo dem¨¢s en La ruina de Kash. De Prajapati a Buda, Calasso invita en su ¨²ltimo libro, Ka (Anagrama), a un viaje fascinante por el imaginario, el pensamiento y la espiritualidad india, un periplo lleno de maravillas, de erotismo, de inteligencia y de literatura. El autor anim¨® a vencer la prevenci¨®n ante el universo de su nueva obra: "Las historias de Siva no son menos divertidas que las de Dionisio", dijo.

Al igual que hac¨ªa en Las bodas de Cadmo y Harmon¨ªa, en Ka Calasso explica los mitos, hind¨²es en este caso, no como una serie de bellas estampas dispersas, sino como una concatenaci¨®n de historias que muestran un sistema de conocimiento y "explican nuestra sustancia". Dice el escritor italiano, buen lector de Dum¨¦zil, que las historias griegas "son fascinantes, pero en sus sombras se perciben otras historias que son las indias. A diferencia de los mitos griegos, en los indios los dioses no aparecen al principio, sino casi al final, lo que hace las historias m¨¢s interesantes. Ka, que da t¨ªtulo al libro, es el nombre secreto de una figura que aparece antes que los dioses, Prajapati, sin equivalente griego: no es Zeus, no es omnipotente; es algo que tiene lo desconocido en s¨ª mismo. El modo de pensamiento que se manifiesta en los textos hind¨²es es totalmente diferente al nuestro, hay infinidad de complicaciones y todo se multiplica". Ello no debe asustar: "En el fondo se trata de una historia muy simple, un pensamiento que ata?e a hechos elementales de nuestra vida como la respiraci¨®n y el sexo".

El crol y los 'Upanishads'

Se trata, a?adi¨®, de textos susceptibles de aportar mucho al lector occidental: "Nosotros empleamos el crol, que no es una cosa nuestra, sino un estilo de nataci¨®n polin¨¦sico introducido en el siglo XIX; hemos aprendido ese estilo sin dar importancia a su origen, pero sirve para nadar m¨¢s r¨¢pido y m¨¢s lejos. Pues bien, si uno lee los Upanishads, va m¨¢s r¨¢pido y m¨¢s lejos. El choque que uno siente al leerlos es similar al de leer el Parm¨¦nides de Plat¨®n o los fragmentos de los presocr¨¢ticos. Entrar en esos mundos del pensamiento es el experimento m¨¢s audaz de la mente".Calasso puntualiz¨® que Ka, del que la sucesora de Mircea Eliade Wendy Doniger ha dicho que es el mejor libro sobre mitolog¨ªa hind¨² jam¨¢s escrito, "no es un libro sobre el pensamiento indio, sino un tejido literario narrativo fundado sobre estas infinitas historias; es una forma, no un estudio". Se?al¨® Calasso que ¨¦l no ha inventado nada, pero que, dado el enorme n¨²mero de variaciones, "la sola forma de combinar las historias ya arroja algo nuevo". Ante la humana prevenci¨®n que puede mostrar un lector de a pie ante 460 p¨¢ginas trufadas de t¨¦rminos como Brahmahatya o svayamvara, Calasso anim¨®: "No se asusten. La historia debe funcionar por s¨ª sola sin ning¨²n conocimiento previo, hay que lanzarse al agua; no creo que una novela cualquiera sea m¨¢s cercana al lector que esto. Giorgio Manganelli sent¨ªa p¨¢nico al partir hacia la India, "la casa madre del Absoluto", dec¨ªa. Ese miedo es normal, y no es diferente del que provoca el mismo hecho de estar vivos. Pero hay que atravesarlo".