El apellido materno ser¨¢ el primero si as¨ª lo acuerdan los padres

Si los padres ya se pasan horas con la elecci¨®n del nombre de los hijos, a partir de ahora podr¨¢n hacer lo mismo con los apellidos. El Congreso aprob¨® ayer por unanimidad la ley que faculta a los progenitores para decidir el orden de los apellidos "de com¨²n acuerdo", lo que permitir¨¢ que los ni?os lleven el materno en primer lugar. Si no hay acuerdo, se antepondr¨¢ siempre el apellido del padre.

Cambiar el orden de los apellidos no es una novedad. Los espa?oles ya pod¨ªan hacerlo, pero tras cumplir los 18 a?os. Esta condici¨®n supon¨ªa, seg¨²n los legisladores, una discriminaci¨®n para la mujer. La reforma aprobada ayer a¨²n debe pasar por el Senado y, seg¨²n su promotora, Merc¨¨ Rivadulla, de Nueva Izquierda-Iniciativa per Catalunya-Els Verds (NI-IC-EV), entrar¨¢ en vigor en diciembre. Pero la gran novedad queda limitada por el deseo del padre. S¨®lo con su consentimiento podr¨¢n los hijos anteponer el apellido materno.?ste fue ayer el ¨²nico desacuerdo parlamentario. NI-IC-EV era partidaria de que un juez decida el orden de los apellidos si los padres no pueden antes resolver las diferencias. El pleno rechaz¨® esta enmienda, lo que no impidi¨® que los diputados de NI-IC apretaran el bot¨®n del s¨ª porque la medida "es un paso adelante", explic¨® Rivadulla. De hecho, s¨®lo Portugal entre los pa¨ªses europeos antepone el apellido materno, y en el Reino Unido la norma general es que ¨¦ste se pierda con la boda, al adoptar la mujer el apellido de su marido.

La elecci¨®n del orden de los apellidos, adem¨¢s de la posibilidad de imponer el deseo paterno, tiene otra restricci¨®n: todos los hermanos deber¨¢n tener sus apellidos en el mismo orden.

Los cambios relativos a los apellidos no son la ¨²nica novedad del texto aprobado, que modifica el C¨®digo Civil y la ley del Registro y unifica cinco iniciativas. A partir de ahora, los espa?oles tambi¨¦n podr¨¢n dirigirse al Registro Civil para modificar la forma en que se escriben sus nombres y apellidos, seg¨²n las respectivas lenguas oficiales. As¨ª, aquellos que fueron inscritos como Juan, por ejemplo, podr¨¢n cambiarlo por Joan (en catal¨¢n), Jon (en euskera) o Xoan (en gallego). Y las Nieves podr¨¢n ser Neus, Edurne o Neves, porque otro de los objetivos perseguidos por la ley es facilitar el uso de las diferentes lenguas del estado. Esta medida, impulsada por el Bloque Nacionalista Galego, fue aplaudida por los portavoces del PNV y CiU, Margarita Ur¨ªa y Jordi Jan¨¦, respectivamente, no s¨®lo por lo que tiene de protecci¨®n ling¨¹¨ªstica, sino porque permite que "no se pierdan apellidos singulares".

El texto tambi¨¦n impone restricciones. As¨ª, los espa?oles -que seguir¨¢n sin poder inscribir a sus hijos con nombres propios que sean diminutivos, despectivos, insultos o que no permitan identificar el sexo- deber¨¢n limitar el n¨²mero de nombres a dos por hijo.

PSOE y NI-IC han pedido al Gobierno una campa?a informativa sobre estas medidas. Los espa?oles que nazcan despu¨¦s de la entrada en vigor de la ley se acoger¨¢n de forma directa a ella. Los que hayan nacido antes deber¨¢n solicitarlo ante el Registro Civil.