LOS LAMENTOS DE ENRIQUE DE DINAMARCA

El pr¨ªncipe Enrique, esposo de origen franc¨¦s de la reina Margarita de Dinamarca, festej¨® ayer en la intimidad su 65? cumplea?os. Y para celebrarlo opt¨® por sincerarse con la revista Billed Bladet. "Todo el mundo tiene la costumbre de considerar al pr¨ªncipe Enrique como... un perrito faldero a quien se da un caramelo de vez en cuando", se lamenta. Obligado siempre a caminar tres pasos por detr¨¢s de la soberana, considera que "es dif¨ªcil para todo hombre estar siempre a la sombra de su esposa"; aunque intentando desdramatizar su papel de consorte, a?ade: "No me quejo, pero reconozco que nuestra uni¨®n es desigual, ya que me he casado con una reina. Soy y ser¨¦ siempre el pr¨ªncipe Enrique. Ser¨ªa diferente si el monarca fuera un rey, como en el caso de mi difunto suegro, Federico IX. Mi suegra conserva el t¨ªtulo de reina Ingrid y recibe el mismo tratamiento". El pr¨ªncipe sue?a con jubilarse "con la reina , sentarnos bajo una higuera en Francia y gozar del sol. Pero, desgraciadamente, acepto que es una utop¨ªa. Por mucho que lo desee, es imposible", reconoce. "La reina naci¨® para reinar, y no puede decir que ya no quiere ser monarca y marcharse. No puede renunciar a su deber. Debe seguir hasta la muerte". El pr¨ªncipe Enrique, nacido Henri de Laborde de Monpezat, se cas¨® en 1967 con la princesa heredera Margarita, que subi¨® al trono en 1972.- ,