"Tanto C¨¢rdenas como yo aceptamos unas primarias"
Vicente Fox, de 57 a?os, virtual candidato a la presidencia de M¨¦xico en las elecciones generales del 2000 por el opositor Partido de Acci¨®n Nacional (PAN), es un pol¨ªtico de declaraciones lapidarias, sobre todo contra el gobernante Partido Revolucionario Institucional (PRI). Fox, que viaja en julio a Espa?a al frente de una misi¨®n de hombres de negocios, afirma que los principales males de M¨¦xico, la corrupci¨®n o el narcotr¨¢fico, no los puede solucionar un presidente salido del PRI, en el poder desde hace siete decenios, al que acusa de haber empobrecido al pa¨ªs. Este empresario, gobernador del Estado de Guanajuato, acepta la posibilidad de que la oposici¨®n presente un candidato ¨²nico en las presidenciales y asegura que tanto ¨¦l como el candidato del Partido de la Revoluci¨®n Democr¨¢tica (PRD), centroizquierda, y alcalde de Ciudad de M¨¦xico, Cuauht¨¦moc C¨¢rdenas, aceptar¨ªan celebrar unas primarias y que "el que gane sea el candidato de la alianza y el otro se va para su casa".
Pregunta. ?Por qu¨¦ las primarias del PRI son una mascarada?
Respuesta. El candidato est¨¢ decidido de antemano. Es Francisco Labastida, el que eligi¨® el se?or Zedillo. Y va a ser el candidato del PRI el 7 de noviembre. Va ganar, entre comillas lo de ganar, con siete millones de votos, se lo anticipo. Todo est¨¢ predeterminado.
P. ?Modificar¨¢ Fox el rumbo econ¨®mico, el proceso de privatizaciones emprendido por el PRI?
R. Queremos crecer al 7% anual, necesitamos generar riqueza, pero a la vez distribuir riqueza. No creemos en el neoliberalismo aplicado bajo la gu¨ªa ciega del mercado. En Am¨¦rica Latina ha dejado demasiada marginaci¨®n y pobreza, ni tampoco creemos en el viejo estatismo.
P. ?Pero aprueba, por ejemplo, la privatizaci¨®n del sector el¨¦ctrico?
R. La palabra privatizaci¨®n es muy peligrosa en M¨¦xico, est¨¢ muy desacreditada. Se hicieron con las patas y falta de transparencia, con corrupci¨®n. Por eso no quiero hablar de privatizaciones, sino de apertura con protecci¨®n a los trabajadores, que podr¨¢n ser accionistas en las privatizaciones. Las empresas privatizadas tienen que bajar los precios de las gasolinas o de los energ¨¦ticos.
R. ?Acepta que los socios extranjeros puedan tener el cien por cien de las acciones de bancos mexicanos?
R. S¨ª. La banca s¨®lo se va a recuperar en M¨¦xico por la v¨ªa de mayor inversi¨®n desde el exterior, pero hay que incentivar la inversi¨®n privada y promover la creaci¨®n de cajas de ahorros, sociedades de inversi¨®n, sistemas de microcr¨¦dito y de ahorro populares, que no existen.
P. Parece reticente a las privatizaciones siendo el PAN, al menos as¨ª se dice, el partido de los empresarios.
R. No somos el partido de los empresarios. Se nos ha etiquetado de esa manera. Tampoco un partido de derecha, moralino, de cat¨®licos y extranjeros. Somos un partido humanista en el centro pol¨ªtico, con responsabilidad social. Yo dir¨ªa que es un centro izquierda ligero, un partido popular, como ser¨ªa el Partido Popular en Espa?a.
P. Le endosan ser el candidato de Estados Unidos
R. No es cierto. Me conozco muy bien a los americanos. He tenido una intensa relaci¨®n con ellos toda mi vida. S¨¦ lo que representa ese, entre comillas, abrazo de este oso gigantesco que nos rompe las costillas. Con Estados Unidos se puede tener una relaci¨®n digna, productiva, para beneficio mutuo dejando atr¨¢s los tab¨²es y los paradigmas y aprovechar esa situaci¨®n geogr¨¢fica privilegiada.
P. Usted implic¨® al PRI en su conjunto, como sistema, en el narcotr¨¢fico. Son imputaciones muy serias.
R. Son serias y las sostengo. S¨®lo en este pa¨ªs puede haber un gobernador de un Estado, como el de Quintana Roo (Mario Villanueva, con orden de busca y captura) que fuera gobernador y narcotraficante por seis a?os. S¨®lo en este pa¨ªs se hace acusaciones contra miembros del Ej¨¦rcito, que hoy est¨¢n en la c¨¢rcel, y s¨®lo en este pa¨ªs hay muchos funcionarios p¨²blicos que han tenido que ver con el narcotr¨¢fico. Es el gran c¨¢ncer de M¨¦xico que ya se extendi¨® a todo el cuerpo nacional.
P. El PRI afirma estar comprometido en su saneamiento interno.
R. Es muy ingenuo, y este concepto es muy importante, que gentes en el exterior o dentro del pa¨ªs, o medios de comunicaci¨®n, pudieran pensar que este c¨¢ncer [el narcotr¨¢fico y la corrupci¨®n], lo puede resolver un presidente de la rep¨²blica emanado del PRI. Eso nunca va suceder.
P. ?Por qu¨¦?
R. Surgen de lo mismo. Tienen mucha contaminaci¨®n y sexenios van y sexenios vienen. Un presidente habl¨® de la moralidad, el otro de la limpieza, otro de terminar con la criminalidad y no ha pasado nada en 30 a?os. El pa¨ªs va de mal en peor en esta materia y ya no es un problema de criminalidad. Ya no es un problema de corrupci¨®n o deshonestidad. Es un problema que ha permeado hacia la sociedad. S¨®lo en este pa¨ªs se toleran dos millones y medio de veh¨ªculos que transitan ilegalmente en el pa¨ªs, y se acepta que el 45% de la econom¨ªa sea informal, fuera de todo control fiscal, y que las privatizaciones hayan sido arreglos entre cuates [amigos]. Es indispensable regresar a un Estado de derecho, es el reto m¨¢s grande que tenemos como gobernantes.
P. Las cifras macreocon¨®micas no parecen malas.
R. Son una fantas¨ªa. Son supuestamente exitosas. Treinta a?os llevamos los mexicanos de perder cada a?o poder adquisitivo. Se ha deteriorado un 70% en los ¨²ltimos 30 a?os. El pa¨ªs est¨¢ peor que cuando lo tom¨® Zedillo.
P. Usted dijo que resolv¨ªa Chiapas en 15 minutos si ve¨ªa en Marcos voluntad.
R. S¨ª, siempre y cuando Marcos realmente estuviera por la dignificaci¨®n de los ind¨ªgenas y por un proceso de desarrollo econ¨®mico y humano.
P. ?Le ve esa disposici¨®n?
R. Muy dif¨ªcil. Lo menos que le puedo conceder es el beneficio de la duda de que vaya en serio. ?l le hizo una declaraci¨®n de guerra al gobierno imperial, y particularmente a Salinas y despu¨¦s a Zedillo, no a todos los mexicanos, ni a Fox. Ser¨¢ interesante saber cu¨¢l va a ser su postura cuando est¨¦ en el gobierno un Gobierno democr¨¢tico.
P. ?Es probable un candidato ¨²nico de oposici¨®n contra el PRI?
R. La alianza total la veo muy dif¨ªcil por falta de tiempo.
P. ?El personalismo suyo o de C¨¢rdenas dificulta esa alianza?
R. No. Tanto C¨¢rdenas como yo hemos dicho "h¨¢ganse las primarias, y el que gane ser¨¢ el candidato de la alianza y el otro se va para su casa". Si mi partido dice que hay primarias me inscribir¨¦ para ganarlas.
P. El Gobierno recibir¨¢ 23.000 millones de d¨®lares en cr¨¦ditos para blindar el relevo de Gobierno y evitar sobresaltos financieros.
R. No hay tal blindaje. Estamos hablando de renegociaci¨®n de la deuda, de aprobaciones del Banco Mundial para l¨ªneas de cr¨¦dito para atender el campo o la ecolog¨ªa. Simplemente se est¨¢ tomando m¨¢s cr¨¦dito. Es un enga?o como se present¨®.
P. ?Por qu¨¦?
R. Ante la incertidumbre de los procesos electorales, porque no son democr¨¢ticos, la gente protege su dinero, saca su dinero en el ¨²ltimo a?o de gobierno y lo tiene fuera por dos a?os, y despu¨¦s lo regresa poco a poco si hay confianza en el Gobierno. Es un asunto de pura desconfianza. Y la otra salida grande de dinero, la que provoca los problemas de inestabilidad, es lo que se roban los pol¨ªticos en el sexenio, que los van acumulando y lo sacan a final del sexenio cuando ya se van.
P. La explicaci¨®n presidencial no va por ah¨ª.
R. A otro cristiano con este cuento del blindaje. Zedillo compra d¨®lares, pidiendo l¨ªneas de cr¨¦ditos para que los especuladores, los que desconf¨ªan, saquen su dinero, y lo que se robaron puedan sacar tambi¨¦n su dinero. En bandeja de plata les trae Zedillo la soluci¨®n a estas gentes. Yo no tengo necesariamente que pensar que por tener esas l¨ªneas de cr¨¦dito no se va a dar esa desbandada general. El blindaje real es tener un proceso democr¨¢tico en el que todos crey¨¦ramos.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.