Schumacher se estrella

Michael Schumacher puede olvidarse pr¨¢cticamente de lograr su tercer t¨ªtulo mundial de F-1 esta temporada. Podr¨¢ volver a las carreras, posiblemente dentro de dos meses, pero el t¨ªtulo quedar¨¢ ya lejos de su alcance como consecuencia del grave accidente que sufri¨® ayer en el circuito de Silverstone. El piloto alem¨¢n sali¨® disparado de la pista cuando intentaba un adelantamiento interior a su compa?ero en Ferrari Eddie Irvine y empotr¨® su coche en un muro protegido por neum¨¢ticos. Se rompi¨® la tibia y el peron¨¦ de la pierna derecha y tuvo que ser operado. El GP de Gran Breta?a fue ganado por el piloto escoc¨¦s David Coulthard (McLaren-Mercedes), que cumpli¨® de esta forma uno de los sue?os de su carrera profesional. La segunda posici¨®n fue para Eddie Irvine (Ferrari), y la tercera para Ralf Schumacher (Williams). La situaci¨®n que se produjo en Silverstone ray¨® la idiotez. En la primera salida del gran premio, dos veh¨ªculos se quedaron encallados en el centro de la pista (los de Villeneuve y de Zanardi) y eso oblig¨® a la suspensi¨®n inmediata de la carrera. Sin embargo, los pilotos no se enteraron de esta circunstancia y siguieron luchando por mejorar sus posiciones en la vuelta inicial. Fue en esta situaci¨®n en la que se produjo el accidente de Schumacher. El alem¨¢n hab¨ªa realizado una mala salida y ocupaba la cuarta posici¨®n por detr¨¢s de los McLaren-Mercedes de Hakkinen y Coulthard y del Ferrari de Irvine. Intent¨® ganar una posici¨®n. Pero fue un intento vano, puesto que no le hubiera servido de nada. Y, en cambio, le cost¨® la temporada.

El incidente se produjo en el viraje Stowe. Schumacher se coloc¨® detr¨¢s de Irvine y en la frenada gan¨® la posici¨®n e inici¨® el trazado de la curva, pero la direcci¨®n de su Ferrari no obedeci¨®. El alem¨¢n se dio cuenta r¨¢pidamente y fren¨® a fondo, bloqueando las ruedas. El coche se convirti¨® en un aut¨¦ntico misil sin control, pas¨® por delante de Irvine -a punto estuvieron de chocar- y sigui¨® recto hacia la gravilla, que no logr¨® detener el coche, para acabar chocando frontalmente con los neum¨¢ticos que proteg¨ªan el muro de contenci¨®n. Pocos metros antes del impacto el coche de Schumacher cruz¨® la parte m¨¢s r¨¢pida del circuito a 313 kil¨®metros por hora. Michael se mantuvo cogido al volante, pero sin ninguna posibilidad de reacci¨®n. Fue un accidente similar al que cost¨® la vida a Ayrton Senna en el circuito de Imola en 1994. Esta vez, las pruebas de choque que realizan las escuder¨ªas para mejorar la seguridad de los pilotos salvaron a Schumacher. Pero el piloto se perder¨¢, probablemente, las pr¨®ximas cuatro carreras y no regresar¨¢ hasta el GP de Italia, el 12 de septiembre. En Ferrari se especula con la posibilidad de que su coche sea utilizado por el franc¨¦s Jean Alesi.

Problema de direcci¨®n

"A la vista del accidente, supongo que fue un problema de direcci¨®n", especul¨® Gustav Brunner, ingeniero de Minardi y ex miembro del equipo Ferrari. "Hay algunas piezas en determinados monoplazas que est¨¢n dise?adas de una forma muy peligrosa para aligerar peso", agreg¨®. La ¨²nica declaraci¨®n oficial de la escuder¨ªa Ferrari la hizo Jean Todt, director t¨¦cnico, que se refiri¨® a un problema con los frenos traseros. La carrera se inici¨® por segunda vez 40 minutos m¨¢s tarde. Hakkinen tom¨® el mando de nuevo, seguido de Irvine y Coulthard. Sin embargo, el finland¨¦s sufri¨® un percance cuando entr¨® en boxes a cambiar neum¨¢ticos y repostar: la rueda trasera izquierda no le qued¨® bien fijada. Volvi¨® a entrar en boxes, pero no resolvi¨® el problema. Y s¨®lo tres vueltas m¨¢s tarde (en la 29?) la rueda se le desprendi¨® y abandon¨®. Irvine qued¨® l¨ªder, pero perdi¨® esta posici¨®n en el repostaje y permiti¨® a Coulthard ganar la quinta carrera de su vida en F-1.