Prodi renuncia a controlar el ¨¢rea de Exteriores de la Comisi¨®n en favor del brit¨¢nico Patten

Los italianos Romano Prodi y Mario Monti se vieron ayer obligados a refrenar sus ansias de acaparar m¨¢s competencias en la pr¨®xima Comisi¨®n Europea, que presidir¨¢ Prodi. Esa primera escaramuza ocurri¨® en el primer seminario informal del nuevo colegio. El brit¨¢nico Chris Patten afianz¨® sus poderes como responsable de Exteriores, encargado de coordinar a sus cuatro colegas con tareas en este ¨¢mbito, frente a la pretensi¨®n de Prodi de presidir este grupo. Y Loyola de Palacio mantuvo sus competencias sobre ayudas p¨²blicas en Energ¨ªa y Transporte, contra la pretensi¨®n de Monti, futuro comisario de la Competencia.

Sonrientes y relajados, los 20 miembros de la futura Comisi¨®n Europea se hicieron la foto de familia en el c¨¦sped de un pl¨¢cido hotel comarcal, entre un¨¢nimes alabanzas al "buen clima" de las discusiones, en las que sobre todo se adoptaron medidas para afianzar el presidencialismo del Ejecutivo. Los temas pol¨¦micos fueron relegados al futuro o al pacto entre bambalinas, porque, como dijo el propio Prodi, "este equipo est¨¢ cohesionado; si no lo estuviese, ser¨ªa muy vulnerable", sobre todo ante el Parlamento Europeo.

As¨ª, la discusi¨®n sobre las competencias que los italianos Prodi y Monti pretend¨ªan reba?ar a sus colegas se mantuvo en sordina o se cerr¨® poco antes del plenario, en detrimento de los italianos. Es lo que sucedi¨® con los poderes del comisario de Relaciones Exteriores, el brillante conservador brit¨¢nico Chris Patten.

Patten se ha impuesto. Ser¨¢ ¨¦l quien presida, y no Prodi, el subgrupo de comisarios dedicados a las relaciones exteriores (el franc¨¦s Pascal Lamy, de Comercio; el alem¨¢n G¨¹nter Verheugen, de Ampliaci¨®n; el dan¨¦s Poul Nielson, de Cooperaci¨®n y Ayuda Humanitaria, y el espa?ol Pedro Solbes, de Asuntos Econ¨®micos y Monetarios). El hecho resulta significativo porque el professore ha reservado la cabeza de los otros subgrupos (Crecimiento y Empleo, Igualdad de Oportunidades) para s¨ª mismo o para sus vicepresidentes, Neil Kinnock (Reforma Interna) y Loyola de Palacio (Relaciones Interinstitucionales).

Eso s¨ª, en la pasi¨®n presidencialista actual, qued¨® claro que Prodi puede cambiar a placer las presidencias, modificar la composici¨®n de los subgrupos, cambiar su mandato o disolverlos. Pero Patten se ha consolidado. El presidente resalt¨® su voluntad de "cooperar y no competir" con el Consejo de Ministros, es decir, con Javier Solana, quien encarnar¨¢ desde oto?o la figura de se?or PESC (responsable de la Pol¨ªtica Exterior y de Seguridad Com¨²n): "No empezaremos como antagonistas", declar¨®.

"Conozco a Solana desde hace muchos a?os, ha sido un extraordinario secretario general de la OTAN y no me cabe la menor duda de que trabajaremos muy bien juntos, suscitando sinergias", apostill¨® el exgobernador de Hong Kong. Patten pretende "no interferir" en el trabajo de sus colegas, sino "garantizar una visi¨®n estrat¨¦gica com¨²n" y "evitar contradicciones", de forma que "la mano derecha sepa lo que hace la izquierda".

La otra manzana de la discordia era establecer d¨®nde reca¨ªan los poderes sobre las ayudas p¨²blicas sectoriales, a compa?¨ªas energ¨¦ticas, agr¨ªcolas, pesqueras o de transportes. Monti reclamaba a?adirlas a su cartera. De Palacio (Transportes y Energ¨ªa) y Franz Fischler (Agricultura y Pesca) se negaban al pellizco de sus poderes. No lo discutieron p¨²blicamente, sino entre l¨ªneas. Resultado: las cosas quedan como est¨¢n, a la espera del esquema de reforma interna previsto para el a?o pr¨®ximo, lo que de momento afianza las carteras amenazadas por el segundo comisario italiano.

P¨²blicamente, cada rival mantuvo sus reivindicaciones. Es l¨®gico que la capacidad de dictaminar sobre las ayudas p¨²blicas sectoriales se mantengan en las carteras sectoriales "porque las ayudas p¨²blicas forman parte del desarrollo de una pol¨ªtica com¨²n", argument¨® De Palacio.

Si un Gobierno, por ejemplo, subvenciona a una compa?¨ªa a¨¦rea, eso debe examinarse en relaci¨®n a las contraprestaciones de la beneficiada (apertura de l¨ªneas y reservas de turnos de despegue y aterrizaje a la competencia). "Lo importante es que haya un enfoque unitario y coherente de todas las ayudas p¨²blicas, independientemente de cu¨¢l sea el sector en el que se conceden", replic¨® Monti, fiando la decisi¨®n final al presidente, "que ser¨¢ quien dirima la cuesti¨®n".

Pero para tomar esa decisi¨®n, Prodi deber¨¢ basarse en el proyecto de reforma que debe elaborar el vicepresidente Kinnock, actual comisario de Transportes. "Tengo una clara idea de c¨®mo resolver este asunto", declar¨® a este diario, "pero de momento me la reservo, aunque le aseguro que yo no me olvido de mi experiencia como comisario de Transportes". Esta per¨ªfrasis sugiere que Kinnock, consciente de que la autorizaci¨®n o prohibici¨®n de ayudas de Estado es crucial para la pol¨ªtica de Transportes, se alinear¨¢ con Fischler y Loyola de Palacio.

Otro elemento de inquietud en la reuni¨®n fue la inc¨®gnita sobre la actitud que adoptar¨¢ el Parlamento Europeo en la investidura de este colegio. El franc¨¦s Lamy consider¨® que el pacto entre populares y liberales para elegir al presidente de la C¨¢mara "supone una importante inflexi¨®n del sistema", aludiendo a que el reciente enfrentamiento institucional puede doblarse ahora con una batalla entre derechas (primer grupo del hemiciclo) e izquierdas (mayoritarias en la Comisi¨®n). Pero Prodi se manifest¨® "completamente confiado" en que obtendr¨¢ la investidura.