La tarde ser¨¢ marchosa o no ser¨¢

?Alegr¨ªa, alegr¨ªa! Se acabaron las tardes amuermadas en las que unas cuantas amas de casa insatisfechas explican sus desgracias a una presentadora comprensiva. Ha llegado la nueva tarde, la tarde marchosa, la tarde alegre y divertida en la que todo el mundo, presentadores, concursantes y simples invitados, tiene el cuerpo de jota y una energ¨ªa que no se puede aguantar.El estilo Furor, sazonado por unas gotas de optimismo juvenil a lo Leticia Sabater, ha hecho mella en Ana Garc¨ªa Lozano y en Rody Arag¨®n, conductores de los nuevos programas cotidianos Qu¨¦ punto (Tele 5, a las 17.15) y Esto me suena (Antena 3, a las 19.45). Ana Garc¨ªa Lozano era una mujer tranquila en su anterior programa vespertino, pero ahora se mueve sin parar desde el comienzo de Qu¨¦ punto, cuando la vemos en un tejado cantando la sinton¨ªa del programa en un peculiar homenaje al famoso concierto al aire libre de los Beatles en Let it be. Rody Arag¨®n deja de ser un actor secundario en programas ajenos y se pone al frente de Esto me suena, lo cual, es indudable, ha reforzado su autoestima.

Ana Garc¨ªa Lozano y Rody Arag¨®n est¨¢n que se salen, e imprimen tal marcha a sus colaboradores e invitados que sus respectivos programas devienen sendos bailes de San Vito ante los que es imposible dormitar: o te los tragas o apagas el televisor a?orando esos documentales de la vida animal que tan bien van para hacer la siesta.

Si nos pusi¨¦ramos shakespearianos, podr¨ªamos decir que estamos ante dos programas llenos de ruido y de furia que no significan nada, pero es mejor mostrarse tolerantes, reconocer que no queda mucho que inventar en la televisi¨®n y asumir que, bajo su marchosa apariencia, Qu¨¦ punto y Esto me suena son, respectivamente, un magazine con reportajes y entrevistas y uno de esos concursos en los que la m¨²sica sirve para plantear una serie de pruebas a unos cuantos concursantes en busca de premio.

Como inventar f¨®rmulas nuevas no es nada f¨¢cil, se ha optado en ambos casos por pasar del fondo y echar el resto en la forma, confiando en que el entusiasmo de los presentadores se contagie a los invitados (lo que consigue especialmente Rody Arag¨®n). Si el entusiasmo llega tambi¨¦n al espectador es algo que est¨¢ por ver.

Alguien, en las alturas de Tele 5 y Antena 3, ha decidido que la programaci¨®n de tarde deb¨ªa perder su tono pausado y adoptar un tono m¨¢s propio de la noche o de la madrugada. Es una apuesta sobre la que se pronunciar¨¢ el p¨²blico: si nadie se pone a bailar en el sal¨®n de su casa, siempre se puede volver a las confidencias de sobremesa y a los concursos est¨¢ticos.

[En su emisi¨®n del lunes pasado, Qu¨¦ punto logr¨® una cuota de pantalla del 13%, con 895.000 espectadores, y Esto me suena, el 25,8%, con 1.479.000 seguidores.]