El canguro ingl¨¦s y los delfines de Serg¨¦i Bubka
Jonathan Edwards se aproxima al crep¨²sculo de su carrera con la condici¨®n de favorito en la prueba de triple salto. Este atleta ligero como una pluma revolucion¨® su especialidad en el a?o 1995, y m¨¢s concretamente en los Mundiales de Gotemburgo. Super¨® la barrera de los 18 metros, bati¨® r¨¦cord del mundo con 18,29 y dej¨® pregunt¨¢ndose a la gente por las razones de una progresi¨®n tan tard¨ªa. Contaba entonces 29 a?os. En gran parte, la explicaci¨®n resid¨ªa en las horas de entrenamiento que le quitaba su trabajo en un hospital de Newcastle y a su estricta observancia de la Biblia. Por ese motivo no compiti¨® durante a?os cuando la prueba se disputaba en domingo. Luego dijo que si Dios le hab¨ªa dado alg¨²n talento ser¨ªa un desagradecido por no aprovecharlo. Desde entonces salta los domingos y domina con bastante frecuencia la prueba de triple. En el caso de Serg¨¦i Bubka, ausente en Sevilla, su dominio fue total en los Mundiales desde 1983. Gan¨® todos. Sus delfines, el ruso Tarasov, el alem¨¢n Lobinger, el franc¨¦s Galfione, tendr¨¢n por fin la oportunidad de saltar liberados de la sombra del gran Bubka.
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