Un diamante en bruto amenaza a Greene

Maurice Greene se encontrar¨¢ hoy con el nigeriano Francis Obikwelu en la final de 200 metros, que se presenta apasionante. La prueba hab¨ªa pasado medio inadvertida por la ausencia de Michael Johnson y Ato Boldon, los dos ¨²nicos que parec¨ªan en disposici¨®n de ganar a Greene, que comienza a explorar una distancia que no le resulta tan apropiada como los 100 metros. Greene ha bajado de 20 segundos durante las dos ¨²ltimas temporadas. Ese dato habla de un buen especialista. Sin embargo, no parece excesivamente c¨®modo en la distancia. Se le ve vulnerable, sin la autoridad que demuestra en los 100, donde act¨²a con la contundencia de los que se saben superiores. A pesar de su condici¨®n de aprendiz, nada hac¨ªa prever dificultades para el atleta estadounidense. Durante la temporada se hab¨ªan visto algunos detalles interesantes de Obedele Thompson y del nigeriano Obikwelu. Nada como para cuestionar la victoria de Greene. La regresi¨®n de Fredericks ayudaba a pensar en un c¨®modo tr¨¢mite para el norteamericano. Todo esto hasta que Obikwelu apareci¨® como un trueno en la semifinal.El velocista nigeriano es un diamante por pulir. Es un atleta que progresa en silencio. Naturalmente, las principales reuniones de verano se disputan su presencia, pero no tanto como para disparar su popularidad. Por ahora s¨®lo es un atleta que pretende ascender en el escalaf¨®n. Lo ha conseguido en los Mundiales. En la semifinal gan¨® con 19,84 segundos, la octava mejor marca de la historia. ?Qu¨¦ significa ese tiempo para Greene? Evidentemente, una amenaza. Greene jam¨¢s ha corrido tan r¨¢pido en los 200 metros. Por lo tanto deber¨¢ exigirse al m¨¢ximo. Y tendr¨¢ que hacerlo en una situaci¨®n dif¨ªcil. No ven¨ªa programado para encontrarse como semejante resistencia. Su plan pasaba por vencer en los 100, obtener el r¨¦cord del mundo en esa prueba si era posible y dedicarse con cierta tranquilidad a la prueba de 200. Ahora tiene que hacer la mejor carrera de su vida para imponerse a Obikwelu. El cambio de chip siempre resulta dificultoso despu¨¦s de ocho carreras.

Algo es seguro. Si el mejor Obikwelu exige lo mejor de Greene, estaremos ante una marca extraordinaria, por debajo de 19,80 y quiz¨¢ menos. Significar¨ªa el regreso al nivel previo a los Juegos de Atlanta. All¨ª se produjo un efecto desastroso para la carrera de 200 metros. Los 19,32 de Michael Johnson han sido demoledores. Nadie se atrev¨ªa a compararse con esa marca.