Villalba y Piles se medir¨¢n en la asamblea de UV a trav¨¦s de candidaturas interpuestas

Enrique Ram¨®n, o H¨¦ctor Villalba, y Jos¨¦ Mar¨ªa Chiquillo, o T¨¢rsilo Piles, rivalizan por el control de Uni¨®n Valenciana. Ambos se medir¨¢n, a trav¨¦s de candidaturas interpuestas, en la asamblea que la formaci¨®n regionalista celebra el pr¨®ximo d¨ªa 19. La distancia ideol¨®gica es m¨ªnima, pero el calado del choque puede ser definitivo para el partido despu¨¦s del descalabro electoral del pasado 13 de junio. Los herederos de Ferm¨ªn Artagoitia, cuya cabeza visible es Antonio Bascu?¨¢n, sugieren, entretanto, aplazar la asamblea para abrir un periodo de reflexi¨®n.

Villalba, Artagoita y Piles destronaron al fallecido Vicente Gonz¨¢lez Lizondo y se convirtieron respectivamente en presidente nacional, secretario general y presidente provincial de Valencia cuando asumieron las riendas de la formaci¨®n regionalista. El asalto al padre fundador deriv¨® en una escisi¨®n, Iniciativa de Progreso de la Comunidad Valenciana, a la que se sumaron varios cargos p¨²blicos de relevancia. La presencia institucional de UV derivada del pacto de gobierno con el Partido Popular mantuvo una cohesi¨®n ficticia en el seno del partido. Entre buenas palabras, las candidaturas que compiten por la presidencia nacional de UV demuestran la desconfianza mutua que reinaba entre los dirigentes regionalistas. Villalba asegura mantenerse neutral. Ha vuelto a su puesto de maestro y conduce con supuesto desapego institucional los compases previos a la asamblea. Pero la candidatura que Enrique Ram¨®n present¨® en el registro del partido a ¨²ltima hora de la tarde de ayer incluye a los m¨¢s ¨ªntimos colaboradores del presidente nacional. Piles ha expresado p¨²blicamente su apoyo a la candidatura que Chiquillo formaliz¨® el jueves y present¨® ayer empe?ado en una aut¨¦ntica precampa?a para sustentar su oferta. Representantes de ambas opciones apuraron hasta el ¨²ltimo momento la posibilidad de llegar a un acuerdo que result¨® imposible. Pero est¨¢n de acuerdo en el mecanismo de elecci¨®n de delegados para la asamblea de acuerdo con los estatutos vigentes antes del congreso de Gandia, celebrado a finales de 1998. La cuesti¨®n de procedimiento ha sido muy protestada desde una tercera opci¨®n, que encabeza Pepa Villanueva, y cuya candidatura ser¨¢ debatida en el Consell Nacional convocado para hoy. De acuerdo con el reglamento utilizado para elegir a los delegados, 400 compromisarios con derecho a voto en la asamblea son natos. El problema es que el nuevo reglamento todav¨ªa no se ha desarrollado. Los responsables del proceso previo al congreso invocan, adem¨¢s, los acuerdos un¨¢nimes del Consell Nacional en torno a la preparaci¨®n del c¨®nclave. Los herederos de Artagoitia, aglutinados en torno a la plataforma Gandia Foro de Opini¨®n Siglo XXI, proponen que se aplace el choque entre las dos opciones convencidos de que el pr¨®ximo presidente s¨®lo podr¨¢ administrar la progresiva ruina del partido. Despu¨¦s del fracaso electoral, los denominados centristas apuestan por abrir un proceso de reflexi¨®n interno para convertir el partido en un instrumento ¨²til en lugar de anclarse en una especie de reserva espiritual del valencianismo sin capacidad de influencia. Los centristas sugieren desarrollar el nuevo reglamento, revisar postulados en torno a la cuesti¨®n ling¨¹¨ªstica, por ejemplo, y analizar los errores internos antes de que Villalba y Piles midan sus fuerzas ante la asamblea.