Chile denuncia el tratado con Espa?a en el que bas¨® el arbitraje para Pinochet
Chile anunci¨® ayer que deja sin efecto el Convenio sobre Arbitraje firmado con Espa?a en 1927 en protesta por la actitud del Gobierno espa?ol de no aceptar resolver el caso Pinochet al margen de las instancias judiciales. Las autoridades chilenas hab¨ªan planteado en mayo a las espa?olas la conveniencia de recurrir a un arbitraje entre ambos pa¨ªses para resolver si era procedente la extradici¨®n del exdictador antes de recurrir al Tribunal Internacional de La Haya.
"Queremos despejar las apariencias en la relaci¨®n que tenemos con el Gobierno espa?ol", dijo en Santiago el viceministro de Asuntos Exteriores, Mariano Fern¨¢ndez, que entreg¨® una nota formal al embajador espa?ol, Juan Manuel Egea. "Es un tratado inservible y a nosotros no nos interesa mantener cuestiones inservibles en las relaciones con otros pa¨ªses", a?adi¨® el n¨²mero dos de la Canciller¨ªa chilena. El anterior ministro de Exteriores, Jos¨¦ Miguel Insulza, recurri¨® y se apoy¨® en dicho convenio el pasado mayo para plantear una salida extrajudicial a la situaci¨®n del exdictador detenido en Londres. Ayer, el viceministro Fern¨¢ndez calific¨® dicho texto de "instrumento est¨¦ril" si no puede utilizarse frente a la controversia de la petici¨®n de extradici¨®n de Pinochet presentada por el juez Baltasar Garz¨®n.
La decisi¨®n de las autoridades chilenas, difundida en ausencia del presidente Eduardo Frei y del ministro de Exteriores Juan Gabriel Vald¨¦s, expresa el malestar hacia Espa?a por el caso Pinochet y por la falta de respuesta a la petici¨®n de un arbitraje. S¨®lo el Partido Popular y el ministro Abel Matutes mantuvieron en alg¨²n momento cierta disposici¨®n a considerar el planteamiento chileno, pero el rechazo un¨¢nime del resto de fuerzas pol¨ªticas dej¨® claro que era un camino que no conducir¨ªa a ninguna parte. Abel Matutes declar¨® el s¨¢bado pasado: "Por el momento no veo c¨®mo podemos atender esta petici¨®n". La frase colm¨® la paciencia del Gobierno chileno, que ha esperado a una fecha simb¨®lica para denunciar el Convenio sobre Arbitraje. Hacerlo la v¨ªspera del 26 aniversario del golpe y del primer 11 de septiembre sin la presencia de Pinochet en Chile es un mensaje a los militares, que no dejan de pedir algo m¨¢s que gestos de apoyo a su excomandante en jefe.
La de ayer es la acci¨®n diplom¨¢tica chilena de mayor relieve contra Espa?a tras la retirada moment¨¢nea del embajador en Madrid, el a?o pasado, despu¨¦s de que el Consejo de Ministros tramitara sin apenas discusi¨®n la solicitud de extradici¨®n de Pinochet presentada por Garz¨®n. En marzo, el Gobierno chileno suspendi¨® los vuelos a las islas Malvinas que sal¨ªan de Punta Arenas, en un gesto diplom¨¢tico contra el Reino Unido, donde est¨¢ detenido Pinochet.
El mismo d¨ªa que el Gobierno chileno daba este paso, el general designaba desde Londres a un abogado para que lo defienda en Chile en los casos que investiga el juez Juan Guzm¨¢n. Es la primera vez, desde que se present¨® hace 20 meses la primera de las 40 querellas criminales en su contra, que el exdictador se da por enterado de que la Justicia de su pa¨ªs tambi¨¦n tiene cuentas pendientes con ¨¦l.
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