Miles de austriacos se manifiestan en Viena contra el racismo y la xenofobia

Decenas de miles de personas salieron en la tarde de ayer a la calle en Viena para protestar contra el racismo y la xenofobia, fen¨®menos cada vez m¨¢s preocupantes desde que el Partido Liberal (FP?) liderado por el ultraderechista J?rg Haider, tras una campa?a electoral xen¨®foba, conquist¨® el 27% de los votos y se convirti¨® en la segunda fuerza pol¨ªtica. La manifestaci¨®n, convocada por una plataforma independiente de intelectuales, obtuvo el apoyo de 200 organizaciones humanitarias, pol¨ªticas y religiosas. El diputado socialista suizo Jean Ziegler dijo en Viena que desear¨ªa tambi¨¦n en Suiza una protesta multitudinaria contra el triunfo electoral del derechista Christoph Blocher, y a?adi¨®: "Los racistas se infiltran en nuestras instituciones gracias a la indolencia de los partidos cl¨¢sicos". Su compatriota, el capell¨¢n cat¨®lico Cornelius Koch habl¨® del "racismo alpino", representado tambi¨¦n por Umberto Bossi, el l¨ªder de la Liga Norte en Italia, y por Jean Marie-Le Pen, jefe del Frente Nacional en Francia. Fode Sylla, presidente de SOS Racisme International, advirti¨®: "La campa?a xen¨®foba de Haider es insoportable. Nos inquieta lo que sucede en Francia, Austria y toda Europa".J?rg Haider inst¨® ayer a sus seguidores a oponer resistencia contra la "charlataner¨ªa seudointelectual sobre la xenofobia" y dijo que "no es ninguna verg¨¹enza dar prioridad a nuestra propia gente". Pronunci¨® estas palabras en un ambiguo discurso en el que se declar¨® "enteramente dem¨®crata", dijo que no aceptar¨¢ jam¨¢s "manchas pardas" a su alrededor y pidi¨® por primera vez disculpas a ciudadanos jud¨ªos y otras v¨ªctimas del nazismo por haber herido su sensibilidad con declaraciones referentes al pasado nazi, que dieron pie a malentendidos, en referencia a sus palabras a favor de la pol¨ªtica laboral del III Reich.

Se est¨¢ polarizando el clima pol¨ªtico en Austria , un pa¨ªs caracterizado por el bienestar econ¨®mico y social y un estable r¨¦gimen de consenso. "Muchos estamos d¨¢ndonos cuenta de que hemos pasado demasiado tiempo sin levantar la voz contra el racismo. Los xen¨®fobos no son m¨¢s numerosos que nosotros, pero se notan m¨¢s", resume una manifestante, una empresaria casada con un serbio.

Bajo el grito de "no a la coalici¨®n con el racismo", los manifestantes apelaron al Partido Socialdem¨®crata (SP?) y al Partido Popular (?VP) -que siguen gobernando de forma interina- a que no pacten con la ultraderecha.