Ben Sidran presenta en Espa?a su homenaje jazz¨ªstico a Garc¨ªa Lorca
El m¨²sico ofrece una serie de conciertos en Madrid
La relaci¨®n del norteamericano Ben Sidran con Espa?a es larga y estrecha. Ahora, este v¨ªnculo tiene otra prueba plausible en el disco-libro The concert for Garc¨ªa Lorca (Gojazz / Enfasis), que ayer present¨® en Granada, como homenaje al poeta. Se trata de la grabaci¨®n del concierto que el m¨²sico ofreci¨® en la Huerta de San Vicente el a?o pasado con motivo del centenario de Lorca, al piano del autor de Poeta en Nueva York. Sidran, que est¨¢ de gira por Espa?a, ofreci¨® el mi¨¦rcoles un concierto en Madrid y actuar¨¢ tambi¨¦n la pr¨®xima semana.
El jazz, como se sabe una m¨²sica individualizada y espont¨¢nea dif¨ªcil de llevar a los papeles y de ense?ar en las escuelas, ha generado una copiosa bibliograf¨ªa que incluye desde monstruosas enciclopedias a minuciosos ensayos sobre temas espec¨ªficos. Pese a este ingente esfuerzo, todav¨ªa se siguen echando en falta libros escritos desde dentro del jazz. Por eso tienen car¨¢cter casi excepcional los dos que hasta la fecha ha publicado Ben Sidran (Chicago, 1943) sin ¨¢nimo de desentra?ar misterios, pero firmemente orientados hacia lo que de verdad importa.Por aspecto y formaci¨®n, Sidran bien podr¨ªa pasar por un profesor universitario liberal y comprometido que escribe admirablemente, valga la paradoja, sobre lo no escrito. En su espl¨¦ndido Black talk subraya algunas ventajas exclusivas de la transmisi¨®n oral de la cultura (en este aspecto es lectura obligada el cap¨ªtulo inicial), mientras que en Talking jazz recoge reveladoras entrevistas con 43 grandes personajes, de Miles Davis y Bobby McFerrin a Dr. John y Don Cherry, que heredaron las m¨²ltiples verdades del jazz precisamente por el m¨¦todo del boca a boca.
Pero incluso la valiosa obra literaria de Sidran pasa a segundo plano cuando el antiguo miembro de la Steve Miller Band se sube a un escenario para reencontrarse con su piano. Entonces se despoja de toda complejidad te¨®rica y se centra en ofrecer una forma de jazz directa y di¨¢fana, basada en un swing ligero y fresco que se desliza no como sudor esforzado sino como un cristalino hilillo de agua de deshielo. Y lo mejor es que no hay rastro de frialdad en su pianismo conciso y humildemente sincero, jalonado de citas a melod¨ªas emblem¨¢ticas y referencias a los grandes del instrumento. Por el contrario, su m¨²sica se recibe envuelta en un aliento c¨¢lido que conforta de inmediato.
En la sala Clamores, de Madrid, Sidran se sent¨® en la banqueta de medio lado para contarle al p¨²blico, cara a cara, esas letras que suenan a apuntes de observador certero, a confidencias de buena fe y a resumen de una vida. Esta vez tra¨ªa entre manos un homenaje a Garc¨ªa Lorca, ya plasmado en disco, que supone un cap¨ªtulo muy especial dentro de su trayectoria. Mal entendida, la idea pod¨ªa haber desembocado en un infumable producto oportunista, pero Sidran ha tomado la poes¨ªa de Lorca como referente universal aplicable a cualquier est¨¦tica, lugar o espacio temporal. As¨ª emparent¨® los centenarios pr¨®ximos del poeta granadino y George Gershwin a trav¨¦s de It ain"t necessarily so y aludi¨® al duende como esencia com¨²n del flamenco y el blues, siempre cuid¨¢ndose mucho de no jugar con fuegos fatuos ni amores brujos. Sidran es un intelectual muy cauto con lo que no conoce a fondo.
Ofreci¨®, eso s¨ª, una generosa muestra de blues elegante, divertidos aires honky tonk y antiguos ritmos shuffle risue?amente despertados de su letargo. Tambi¨¦n busc¨® la complicidad del p¨²blico en las canciones cuyas letras invitaban a la participaci¨®n y dej¨® que su hijo Leo cantara y tocara la guitarra para expresar su pasi¨®n por las mujeres sevillanas. Todav¨ªa le dio tiempo a recordar que Billy Peterson, un bajista todo contenci¨®n, puede presumir de haber grabado con Bob Dylan y de agradecer al excelente saxofonista Bob Sands su estupenda contribuci¨®n como invitado. Sidran tiene previsto actuar en el ciclo Jazz en Galapagar el pr¨®ximo s¨¢bado, d¨ªa 27, y en el madrile?o Caf¨¦ Central del 29 de noviembre al 5 de diciembre.
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