El Consell paraliza cualquier iniciativa para evitar pol¨¦micas en la precampa?a electoral

Eduardo Zaplana lament¨® durante una larga legislatura no haber alcanzado la mayor¨ªa absoluta y arrastrar el lastre de unos socios minoritarios que frenaron la aplicaci¨®n estricta de su proyecto pol¨ªtico para la Comunidad Valenciana. Pero desde que el Consell cuenta con el respaldo de una amplia mayor¨ªa absoluta en las Cortes, el presidente de la Generalitat ha congelado todas las iniciativas. El PP intenta evitar pol¨¦micas en la precampa?a de las elecciones generales para conservar intacto su caudal de votos y cumplir los objetivos trazados desde la sede nacional.

Los m¨¢s ¨ªntimos colaboradores de Zaplana dise?aron varios modelos administrativos para dotar la segunda legislatura al frente de la Generalitat de un impulso pol¨ªtico decisivo que permitiera dejar impronta. La apuesta consist¨ªa en introducir una reforma audaz en los m¨¦todos de gesti¨®n para convertir la administraci¨®n valenciana en un modelo adaptado al siglo XXI.La estructura del nuevo Consell, sin embargo, es r¨¦plica del anterior. La instituci¨®n de dos vicepresidencias y la ampliaci¨®n del n¨²mero de consejer¨ªas responde a la necesidad de cumplir compromisos personales m¨¢s que a la voluntad de impulsar un nuevo estilo de gesti¨®n.

De hecho, hasta la fecha, la decisi¨®n ejecutiva de mayor calado adoptada por el Consell ha sido un recorte de presupuestos. El pleno del 16 de agosto, el segundo del nuevo gobierno, facult¨® al consejero de Econom¨ªa y Hacienda, Vicente Rambla, para introducir todas las modificaciones de cr¨¦dito que considerara pertinentes en el cap¨ªtulo de inversiones con el objetivo de cubrir obligaciones presupuestarias arrastradas desde ejercicios anteriores.

El Plan de Desarrollo Regional fue presentado varias veces durante el verano, pero hab¨ªa sido elaborado durante dos largos a?os. Los datos de empleo acompa?an, pero no son atribuibles a la gesti¨®n del Consell.

Entre bambalinas, los responsables del Consell han dejado caer que se trabaja mucho en el campo de la Investigaci¨®n y el Desarrollo, pero sin frutos hasta la fecha.

En el ¨¢mbito legislativo, el nuevo Consell ha remitido a las Cortes dos proyectos legislativos. La creaci¨®n de la nueva Universidad privada Cardenal Herrera Oria, que depende del CEU, y que ya hab¨ªa sido elaborado durante la pasada legislatura. La disoluci¨®n por la v¨ªa de urgencia del Consell Metropolit¨¤ de L"Horta prueba la capacidad de maniobra del PP sin las ataduras de Uni¨®n Valenciana y es la ¨²nica iniciativa de cierto riesgo pol¨ªtico que ha asumido el Consell hasta la fecha.

Tambi¨¦n se han elaborado los presupuestos del a?o 2000 y la correspondiente ley de acompa?amiento, pero s¨®lo por exigencias del calendario y sin novedades de calado.

Altos cargos de la Generalitat claman de forma recurrente ante la necesidad de elaborar una nueva Ley de Hacienda. Jos¨¦ Luis Olivas asumi¨® ese compromiso ante las Cortes hace cuatro a?os, pero la redacci¨®n del nuevo texto sigue aparcada.

Una de las grandes iniciativas de Zaplana en su ¨²ltimo debate sobre pol¨ªtica general, en septiembre de 1998, fue el compromiso de una inmediata elaboraci¨®n de una Ley de Ordenaci¨®n del Territorio. Durante los ¨²ltimos meses de la pasada legislatura circul¨® un denso borrador al respecto, pero la direcci¨®n general correspondiente sigue vacante, hecho que demuestra una cierta desidia al respecto de parte de Jos¨¦ Ram¨®n Garc¨ªa Ant¨®n, consejero de Obras P¨²blicas.

Las obras de los grandes proyectos que Zaplana denomina emblem¨¢ticos siguen su curso, pero las negociaciones sobre el futuro de la Acad¨¨mia Valenciana de la Llengua o sobre la posible reforma del Estatuto de Autonom¨ªa duermen el sue?o de los justos.

La iniciativa pol¨ªtica est¨¢ congelada, al menos hasta las pr¨®ximas elecciones generales. Y es que Zaplana nunca ha ocultado que forma parte de "un gran proyecto nacional".