Un presidente de talante autoritario

La desaparici¨®n de Franjo Tudjman abre la posibilidad de que la actual Croacia, la surgida de la desintegraci¨®n de la antigua Yugoslavia, adquiera la mayor¨ªa de edad. Liberada de la figura paternocastradora, que con su autoritarismo marc¨® las pautas de actuaci¨®n del vigente r¨¦gimen, ahora Croacia podr¨ªa intentar construir una sociedad basada de verdad en la libertad y la democracia, ensayar una aproximaci¨®n a la Europa occidental y liberarse de los fantasmas balc¨¢nicos.Todos los entrevistados estos d¨ªas en Zagreb, gentes de oposici¨®n, porque los representantes del r¨¦gimen se hab¨ªan encerrado en el silencio, temerosos tal vez de una resurrecci¨®n del l¨ªder, coincid¨ªan en que la muerte de Tudjman tendr¨¢ un efecto beneficioso para Croacia. Con frecuencia se establec¨ªan paralelismos con la Espa?a de Franco, personaje por el que Tudjman no se recataba en manifestar su simpat¨ªa. Tanto, que hasta le imit¨® en su penosa enfermedad final.

El pasado 18 de octubre Tudjman convoc¨® a una conferencia de prensa a periodistas extranjeros y en ella no se recat¨® en dar rienda suelta a su verdadero pensamiento. En lo que se puede considerar como su testamento pol¨ªtico, en su ¨²ltima aparici¨®n ante los medios independientes, Tudjman dej¨® de manifiesto, una vez m¨¢s y de forma palpable, su talante autoritario y antidemocr¨¢tico.

Se puede resumir aquella actuaci¨®n en tres puntos esenciales:

1) Tudjman no aceptaba en el fondo el acuerdo de Dayton y estaba convencido de que en Bosnia-Herzegovina deber¨ªan existir tres entidades (serbios. croatas y bosniacos). El fallecido constitu¨ªa un obst¨¢culo para las pocas esperanzas de desarrollar un estado multi¨¦tnico en Bosnia-Herzegovina.

2) Se opon¨ªa Tudjman a entregar a sus generales a la justicia del tribunal contra los cr¨ªmenes de guerra de La Haya y asegur¨® que ninguno de los que participaron en 1995 en la victoriosa reconquista de la Krajina ser¨ªa extraditado. Con ello Tudjman no hac¨ªa m¨¢s que protegerse a s¨ª mismo. Abundan los que piensan que su nombre no puede faltar en las listas secretas de presuntos criminales de guerra que maneja La Haya.

3) Tres veces insistieron con preguntas los periodistas presentes y ni una sola vez fue Tudjman capaz de responder de forma inequ¨ªvoca que reconocer¨ªa el resultado de las pr¨®ximas elecciones legislativas, si ganase la oposici¨®n. Tudjman se limit¨® a decir que eso era una cuesti¨®n hipot¨¦tica, pero ni siquiera se permiti¨® una afirmaci¨®n de la evidencia de que en una democracia se acepta el veredicto de las urnas.

Deja Tudjman una dif¨ªcil herencia para su partido, m¨¢s bien movimiento, la Uni¨®n Democr¨¢tica Croata (HDZ), que se encuentra dividida en tres tendencias, hasta ahora aglutinadas en torno a la figura del caudillo muerto. Sin Tudjman, resulta dif¨ªcil aventurar un pron¨®stico sobre la evoluci¨®n de la HDZ. Se encuentra la HDZ dividida entre un sector ultranacionalista y antieuropeo, un segundo en torno al aparato del partido y un tercero representado por el ministro de Asuntos Exteriores, Mate Granic, que puede considerarse homologable con los partidos populares o democristianos de Europa occidental.

La competencia entre estos tres sectores de la HDZ puede estallar en cualquier momento a partir de la desaparici¨®n de Tudjman. No faltan incluso algunos analistas que afirmar que no llegar¨¢n juntos ni hasta las inminentes elecciones legislativas. Intentar¨¢ la HDZ explotar ante las pr¨®ximas elecciones, presidenciales y legislativas, el efecto compasi¨®n que pueda producir la muerte de Tudjman, sobre todo en los sectores m¨¢s retardatarios. Un soci¨®logo hablaba estos d¨ªas del s¨ªndrome del Cid, o sea el intento de que Tudjman gane, incluso despu¨¦s de muerto, una batalla m¨¢s.

Con Tudjman desaparece un personaje contradictorio, capaz de evolucionar de general m¨¢s joven del Ej¨¦rcito de Yugoslavia y presidente del club de f¨²tbol serbio por antonomasia, el Partizan, a feroz nacionalista croata. Se jactaba de que su mujeres no era "ni serbia ni jud¨ªa", pero sus nietos son serbios y hasta su tumba privada se encontraba en el lado serbio del cementerio.