La Audiencia de Bilbao suspende el juicio por delito ecol¨®gico a dos constructoras
La Audiencia de Bilbao suspendi¨® ayer el juicio contra tres directivos de las constructoras Ferrovial y Cadagua por un presunto delito ecol¨®gico en las obras de la depuradora de Gorliz. El aplazamiento de la vista en el juzgado de lo penal n¨²mero 6, cuya nueva fecha de celebraci¨®n no fue concretada, se debi¨® a la ausencia de uno de los principales testigos de la causa, que no pudo asistir debido a una enfermedad.La solicitud de la suspensi¨®n fue planteada por el fiscal, quien ha pedido un total de siete meses de prisi¨®n (dos a?os y cuatro meses en cada caso) para Javier L¨®pez-Ulloa, representante legal de Ferrovial; Luis Quintana, jefe de obra, y Jos¨¦ Luis Mugueta, gerente de la uni¨®n temporal formada por Ferrovial y Cadagua.
La t¨¦cnico del Departamento de Sanidad del Gobierno vasco que descubri¨® el vertido contaminante, citada como testigo, no acudi¨® a la vista por estar enferma. El Ministerio Fiscal consider¨® que su presencia era determinante para el esclarecimiento de lo ocurrido en abril de 1995.
El presunto delito ecol¨®gico se fundamenta en un vertido que, en aquellas fechas, caus¨® la muerte de miles de peces en un arroyo cercano en el momento en que desarrollaban las obras. En concreto, se rompi¨® una tuber¨ªa de aguas fecales, lo que provoc¨® "un aumento considerable del Ph del arroyo, debido a la presencia elevada de calcio y una disminuci¨®n del ox¨ªgeno disuelto", seg¨²n el escrito de acusaci¨®n del fiscal.
La t¨¦cnico de Sanidad que ayer no asisti¨® al juicio determin¨® la contaminaci¨®n y orden¨® el acotamiento de la zona de ba?o de la playa de Gorliz, al constatar la existencia de riesgo para la salud humana. En su informe, censur¨® la existencia de escorias de acero -utilizadas para rellenar los terrenos- en la zona y recomend¨® la retirada de este material a otro lugar m¨¢s adecuado.
La depuradora de Gorliz, inaugurada en 1997, tuvo otro episodio contaminante ese a?o por unos vertidos fecales.
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