El presidente de la CDU reconoce que recibi¨® personalmente una donaci¨®n ilegal
La Uni¨®n Cristiana Democr¨¢tica (CDU), el poderoso partido de Helmut Kohl que ten¨ªa en sus manos el regreso al poder en Alemania despu¨¦s de un breve lapso socialdem¨®crata, sufri¨® ayer un nuevo y dur¨ªsimo rev¨¦s. Su presidente, Wolfgang Sch?uble, reconoci¨® que ¨¦l mismo recibi¨®, en 1994, una donaci¨®n ilegal por parte de un traficante de armas. Esta aportaci¨®n ha sido el origen del esc¨¢ndalo que est¨¢ acosando a Kohl y que ha cambiado en poco tiempo el panorama pol¨ªtico alem¨¢n. La derecha alemana se sumerge as¨ª, con un paso m¨¢s, en su vertiginosa crisis.
En una entrevista emitida anoche por la cadena de la televisi¨®n p¨²blica alemana ARD, Wolfgang Sch?uble reconoci¨® haber recibido personalmente los 100.000 marcos (8,5 millones de pesetas) en efectivo que don¨® el empresario germano-canadiense Karlheinz Schreiber, comerciante de armas, en 1994. El presidente del partido de la derecha alemana declar¨® que el dinero no apareci¨® en la contabilidad de la CDU como una donaci¨®n, sino que fue clasificado como "ingreso especial".La declaraci¨®n de Wolfgang Sch?uble puede convertirse en una bomba en la tormenta que est¨¢ sufriendo la CDU. El partido de Kohl, que ha volado durante dos d¨¦cadas con las alas de la popularidad del ex canciller, se ha mirado de pronto ante el espejo y se ha visto sin renovaci¨®n, sin l¨ªderes nuevos. Depend¨ªa demasiado de Kohl, que se fue en septiembre de 1998, despu¨¦s de su derrota frente al actual canciller, el socialdem¨®crata Gerhard Schr?der. Ahora que Kohl ha quedado en entredicho despu¨¦s de reconocer la contabilidad paralela del partido, los l¨ªderes m¨¢s j¨®venes est¨¢n provocando la ruptura.
Responsabilidad parcial
En la entrevista de ayer, Sch?uble acept¨® la "responsabilidad parcial" en las irregularidades en la financiaci¨®n de la CDU durante los 25 a?os en que su antecesor, el ex canciller Helmut Kohl, estuvo al frente de la misma. Schauble recibi¨® personalmente esos 100.000 marcos de Schreiber, que fue el que, con otra donaci¨®n diez veces m¨¢s grande que ¨¦sta, no apareci¨® en los informes de cuentas de la CDU, lo que desat¨® el esc¨¢ndalo actual sobre la financiaci¨®n del partido.
"Desde el punto de vista actual, hab¨ªamos debido preguntar si todas las donaciones estaban registradas como tales en los informes de cuentas del partido, y no lo hicimos", agreg¨® Sch?uble. Schreiber, sobre el que pesa una orden de detenci¨®n con cargo de evasi¨®n fiscal, actualmente est¨¢ en Canad¨¢ y la justicia alemana ha pedido su extradici¨®n.
A finales de noviembre, Schreiber afirm¨® que don¨® en 1991 un mill¨®n de marcos en efectivo al antiguo tesorero de la CDU, Walther Leisler Kiep, y al experto contable de la CDU, Horst Weyrauch, para que dieran la luz verde del Gobierno alem¨¢n a una venta de blindados a Arabia Saud¨ª.
El asunto est¨¢ en manos de la fiscal¨ªa, y tambi¨¦n de una comisi¨®n del Bundestag (Parlamento). El representante de la CDU en esta comisi¨®n acus¨® ayer a Los Verdes (que est¨¢n en la coalici¨®n de Gobierno junto a los socialdem¨®cratas) de haber vulnerado la ley, tambi¨¦n, por haber recibido donativos il¨ªcitos de sus propios diputados.
Financiaci¨®n verde
Seg¨²n el democristiano Andreas Schmidt, los ecologistas han prestado dinero a la central del partido procedente de sus sueldos de parlamentarios y de los complementos libres de impuestos que perciben en funci¨®n de sus cargos, lo que ser¨ªa ilegal, ya que este dinero debe estar destinado a apoyar el trabajo parlamentario.
El esc¨¢ndalo de la financiaci¨®n irregular de la CDU, que adem¨¢s de ocupar a la citada comisi¨®n parlamentaria ha decidido a la fiscal¨ªa de Bonn a abrir un sumario contra Kohl, se remite a los supuestos donativos an¨®nimos no declarados que fueron a parar a cuentas secretas. Paralelamente a este asunto, la CDU ha impulsado la investigaci¨®n de un supuesto caso de corrupci¨®n en el Partido Socialdem¨®crata Alem¨¢n (SPD) de Schr?der, al que se suma ahora la supuesta financiaci¨®n il¨ªcita de Los Verdes.
En lo que respecta al SPD, los cristianodem¨®cratas exigen el esclarecimiento de los vuelos privados a cuenta de un banco semiestatal, supuestamente realizados por varios ministros socialdem¨®cratas del Estado de Renania del Norte-Westfalia.
En medio de este esc¨¢ndalo, la CDU ha visto desvanecerse su ilusi¨®n de regresar al poder en las pr¨®ximas elecciones, previstas para 2002. Las sucesivas victorias en varias regionales en 1999 parec¨ªan garantiz¨¢rselo, pero el esc¨¢ndalo est¨¢ ah¨ª, y a¨²n no ha terminado.
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