Un proyecto del programa Biomed busca los genes de la artritis reumatoide

Desde los a?os setenta se conoce un ¨²nico gen implicado en la artritis reumatoide, una enfermedad autoinmune en la que el organismo reacciona contra s¨ª mismo activando un mecanismo inmunol¨®gico que afecta a las articulaciones. Se cree que padece esta enfermedad un 1% de la poblaci¨®n y que afecta tres veces m¨¢s a las mujeres que a los hombres. Se trata del gen HLA, localizado en el cromosa 6. Un reciente estudio patrocinado por la Uni¨®n Europea ha identificado tres regiones cromos¨®micas donde pueden estar otros genes involucrados en esta enfermedad.

En este trabajo, financiado por el programa Biomed de la Uni¨®n Europea, han participado B¨¦lgica, Espa?a, Francia, Grecia, Holanda, Italia y Portugal. En Espa?a, ha coordinado la investigaci¨®n el servicio de Reumatolog¨ªa del hospital La Paz de Madrid, pero seg¨²n advierte su responsable, Juan Gij¨®n Ba?os, en el proyecto han participado reumat¨®logos de todo el pa¨ªs. Gracias al apoyo de la Sociedad Espa?ola de Reumatolog¨ªa (SER), Espa?a es, despu¨¦s de Francia, el que m¨¢s familias ha reclutado: 129, de un total de 930."Sabemos que la artritis reumatoide es una enfermedad polig¨¦nica. Si hasta ahora s¨®lo hay uno identificado, el prop¨®sito de este trabajo es identificar otros genes", afirma Alejandro Balsa Criado, reumat¨®logo de La Paz y coordinador principal de este estudio en Espa?a. Seg¨²n Balsa, el desarrollo de esta investigaci¨®n "ha sido como ir a pescar, en el sentido de que no se ten¨ªa a priori ninguna hip¨®tesis veros¨ªmil sobre cu¨¢ntos genes pod¨ªan intervenir en esta enfermedad y d¨®nde, por lo que los resultados en gran medida depend¨ªan del azar".

El estudio se ha dividido en dos fases y se han establecido dos grupos. En la primera, ya realizada, se ha trabajado sobre un grupo de 430 familias en el que se incluyeron dos hermanos afectados por la artritis y, si era posible, un hermano m¨¢s, sano. En esta poblaci¨®n reclutada se hizo un rastreo en los 23 pares de cromosomas que posee el organismo humano para determinar unas zonas gen¨¦ticas que los dos hermanos con artritis comparten con una frecuencia superior a lo esperado, es decir, m¨¢s all¨¢ del 50%.

En la segunda fase, de inminente comienzo, se estudiar¨¢ un grupo de 500 familias, en las que se incluyen un enfermo, sus dos padres y, si es posible, un hermano sano. Una vez conocidas, gracias a la primera fase, las regiones gen¨¦ticas que se comparten con mayor frecuencia y los genes localizados pr¨®ximos a ellas, en el grupo segundo se pretende comprobar que un gen est¨¢ relacionado con la enfermedad si se demuestra mediante el test del desequilibrio de transmisi¨®n qu¨¦ alelos (distintas formas que puede tomar un gen) se transmiten de los padres al hijo enfermo con una frecuencia superior al hijo sano.

"Mediante complejas t¨¦cnicas de biolog¨ªa molecular y epidemiolog¨ªa gen¨¦tica", explica Balsa, "los an¨¢lisis nos han llevado en esta primera fase a identificar tres regiones, localizadas en los cromosomas 1, 3 y 18, donde seguramente est¨¢n los genes de la artritis. Es posible que haya otros locus con m¨¢s genes implicados, pero todo apunta a que esas tres zonas cromos¨®micas son las m¨¢s importantes, porque otros estudios desarrollados en Estados Unidos y Jap¨®n sugieren las mismas conclusiones. Los primeros resultados de la investigaci¨®n europea, desarrollada entre 1996 y 1999, fueron publicados en septiembre de 1998 en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences (PNAS), de Estados Unidos.

Seg¨²n el coordinador espa?ol, ahora empieza la segunda y m¨¢s importante fase del proyecto, encaminada a la identificaci¨®n en el segundo grupo de los genes hallados en los locus descubiertos. Esta parte ser¨¢ costeada por cada pa¨ªs, para lo que se est¨¢n buscando fuentes de financiaci¨®n p¨²blicas y privadas.

"Tenemos que saber", a?ade, "c¨®mo act¨²an esos genes que son comunes en las personas afectadas por la artritis y por qu¨¦ en ellos se comportan de forma patol¨®gica. Con la finalizaci¨®n del genoma humano este a?o, confiamos en que en un futuro muy pr¨®ximo desentra?aremos ese enigma".

Para Emilio Mart¨ªn Mola, jefe cl¨ªnico de Reumatolog¨ªa de La Paz y presidente electo de la SER, el objetivo principal de esta investigaci¨®n gen¨¦tica para determinar los genes de la artritis es "poder establecer un tratamiento etiol¨®gico". Seg¨²n explica, "hasta ahora lo ¨²nico que podemos hacer es paliar los s¨ªntomas. Cuando conozcamos el mecanismo etiopatog¨¦nico, es decir, la forma en que se produce la enfermedad, podremos empezar a aplicar terapias dirigidas a las causas".

Sobre esta fase gen¨¦tica intervienen los factores hormonales (la enfermedad afecta tres veces m¨¢s a la poblaci¨®n femenina) y los ambientales. Sobre estos ¨²ltimos cada vez es m¨¢s s¨®lida la hip¨®tesis que refrenda el origen infeccioso de la artritis, principalmente v¨ªrico.

Este reumatismo incide sobre todo, y de forma sim¨¦trica, en las articulaciones de las manos, mu?ecas, pies, rodillas y tobillos. Causa inflamaci¨®n y dolor y, si no se controla, va deformando la articulaci¨®n y conduci¨¦ndola a una p¨¦rdida de funci¨®n. Asimismo puede da?ar otras articulaciones y otros tejidos del organismo. A veces se acompa?a de fiebre, cansancio, malestar general y p¨¦rdida de peso. Un 10% de los pacientes pueden llegar a un grado de invalidez total.