Matx¨¤ i tropell

La muerte de la le?a es la vida del fuego y el fuego del invierno es un grito de vida. La llama es el vicario del Sol en la tierra y entre los hombres y del Sol proceden todos los poderes vivificantes. Apostando por el traspaso del fr¨ªo y el retorno de la primavera, al anochecer de hoy -fiesta del vecino y colega de sant Antoni, sant Pau, eremita-, al toque del Avemar¨ªa, en la Vilanova d"Alcolea (la Plana Alta), los majorals encienden una enorme foguera en las Eres, a las afueras del pueblo, con el fin de despertar la natura y estimular la fertilidad. La agraria y solsticial hoguera comunal, confeccionada, alrededor de un mayo, plantado en la tierra matriz, con ramas de hoja perenne que el mismo patriarca No¨¦ habr¨ªa talado por ahora para construir su salv¨ªfica arcabarca.La procesi¨®n de la matx¨¤, se inicia con un visca del majoral que la encabeza con el gui¨®n de su patr¨®n: Del dimoni, vencedor;/ dels animals, advocat;/ sigueu nostre protector,/ glori¨®s sant Antoni Abat. El sacerdote purifica con agua en la iglesia y, desde all¨ª, parte el cortejo para que el pueblo bautice con fuego. M¨²ltiples hogueras de parte a parte de la calle; se procura impedir el paso de las caballer¨ªas, adornadas, enjaezadas; intentan atravesar las llamas, el fuego. Tras estos singulares tombs, una carrera por el premio de un solar gallo, el tropell. Son d¨ªas de paseos, corregudes de joies y simulacros de la llaur¨¤ y sembr¨¤ -esta tarde en Forcall-, magia simp¨¢tica de cara a una buena cosecha de cereales, cuyo esp¨ªritu representan los matxos, s¨ªmbolos, a su vez, del Sol, por arrastrar su carro en la Antig¨¹edad, como el fuego, que los exorcisa al cruzarlo; los caballos romanos eran preservados, circulando alrededor de los templos en las fiestas Consualia, a su dios emparador y protector de trigos y campos.