Filtraciones y grietas en pisos del Incasol
Lo que en un principio fue la culminaci¨®n de un sue?o ha acabado siendo una aut¨¦ntica pesadilla. Se trataba de los primeros bloques de viviendas de promoci¨®n p¨²blica que se constru¨ªan en L'Hospitalet, una ciudad aquejada precisamente de falta de suelo para edificar, despu¨¦s de 20 a?os. Unos pisos que, adem¨¢s, llevaban la firma de un reconocido arquitecto como Ricardo Bofill. En poco m¨¢s de dos a?os, la lista de agravios acumulados por las 176 familias de los bloques promovidos por el Incasol, organismo dependiente de la Generalitat, y dise?ados por Bofill es tan larga que la indemnizaci¨®n que reclaman por da?os y perjuicios asciende a 400 millones de pesetas.Los bloques de dise?o de Can Trias, ideados por Bofill, paternidad que en su momento fue aireada a bombo y platillo, tienen apenas dos a?os y medio de vida, pero no hizo falta casi tiempo para que los vecinos que los compraron por unos 11 millones de media se dieran cuenta de las imperfecciones que ten¨ªan. "Chapuzas", las llaman los afectados.
Una lista de desperfectos interminables, como si en alg¨²n momento de la construcci¨®n de las viviendas hubiesen participado los inefables Pepe Gotera y Otilio: las fachadas son de aluminio y deber¨ªan ser cambiadas cada cinco a?os; en los planos originales aparec¨ªan moqueta en el suelo del comedor y gres en el del cuarto de ba?o. En realidad se instalaron tanto en uno como en otro placas de PVC; las paredes son de pladur, sin ning¨²n aislante t¨¦rmico entre los tabiques de las viviendas; en muchos pisos han aparecido grietas en las paredes; se rompen los cristales de las galer¨ªas y el pavimento tambi¨¦n se ha agrietado; grifos que no funcionan; las persianas se desencajan cuando hace viento; las escaleras de incendios y las que llevan a los aparcamientos estaban todav¨ªa sin acabar...
A principios de 1999, el Incasol empez¨® a reparar los da?os. Comenz¨® por los desperfectos m¨¢s peque?os, que requirieron un gasto total de 20 millones, y despu¨¦s sigui¨® la sustituci¨®n del pavimento, que al Incasol le supuso una inversi¨®n extra por vivienda entre 400.000 y 500.000 pesetas. Pero los arreglos no acallaron las protestas vecinales porque los tabiques exteriores de pladur segu¨ªan sin aislar del fr¨ªo y por las persianas continuaban las filtraciones del aire y la lluvia. Algunos aparcamientos subterr¨¢neos segu¨ªan tambi¨¦n con filtraciones de lluvia despu¨¦s de tres reparaciones.
Este invierno, inusualmente crudo en relaci¨®n con a?os anteriores, los vecinos se han acordado especialmente del Incasol, del taller de arquitectura de Bofill y de Necso, la empresa constructora. Las fachadas est¨¢n revestidas por placas de aluminio superpuestas sin que las juntas est¨¦n selladas. Tres cent¨ªmetros por los que se colar¨ªa hasta Pap¨¢ No?l.
Hace incluso m¨¢s fr¨ªo en el interior de las viviendas que en la calle. Pero el aire g¨¦lido y la lluvia tienen donde escoger para penetrar en el interior de los pisos: las ventanas, las cajas de las persianas...
Muchas familias han tenido que mantener la calefacci¨®n encendida incluso para dormir. "A veces est¨¢s durmiendo y de repente llega hasta la almohada una corriente de aire fr¨ªo que te quita el sue?o", asegura uno de los afectados. En estas condiciones los vecinos se han echado a las espaldas ya tres inviernos.
Despu¨¦s de dos a?os y medio de quejarse en vano, los vecinos est¨¢n persuadidos de que la ¨²nica salida es interponer una demanda por da?os y perjuicios. Calculan unos 400 millones en concepto de indemnizaci¨®n. Los afectados pretenden tambi¨¦n que el Ayuntamiento se persone en la demanda y asuma los gastos que se deriven de su interposici¨®n. Adem¨¢s, los vecinos han anunciado movilizaciones a partir de ma?ana.
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