Los creadores de la veterana serie de dibujos 'Los Simpson' 'asesinan' a un personaje

Por si faltaba una prueba de que Los Simpson rompen todas las barreras del g¨¦nero, sus creadores han decidido matar a uno de los personajes de esta serie, la comedia m¨¢s veterana de la televisi¨®n actual. El mundo de la animaci¨®n siempre se ha otorgado la licencia de que las desgracias nunca sean mortales, lo que hist¨®ricamente ha permitido al Coyote resucitar cada vez que se cae al despe?adero por perseguir al Correcaminos. Ahora Los Simpson demuestran que nadie es inmortal, a pesar de que suele incluir una parodia de la violencia de los dibujos en la que se ridiculiza esa eterna resurrecci¨®n de los personajes. Es la serie favorita de Bart y Lisa, una versi¨®n salvaje de Tom y Jerry: el rat¨®n Itchy somete al gato Scratchy a las torturas m¨¢s despiadadas. Ahora la serie quiere analizar el desarrollo de los personajes frente a la muerte, pura y dura. El productor ejecutivo, Mike Scully, asegura que la decisi¨®n de asesinar a un personaje se debe en parte a la necesidad de marcar nuevas fronteras en una serie tan longeva: "Estamos en la temporada n¨²mero 11, as¨ª que tenemos que buscar nuevas ideas que agiten un poco la serie y nos abran nuevas posibilidades", asegura Scully.

Ahora viene la inc¨®gnita: ?A qui¨¦n eliminan? Los seguidores de la serie han bombardeado miles de p¨¢ginas de Internet con teor¨ªas y con pistas que pueden apuntar hacia el nombre de la pobre v¨ªctima. Hay tres posibilidades: que el finado sea Seymour Skinner (el director del colegio), Moe (el encargado del bar) o Maude Flanders, la esposa del repelente y santurr¨®n Ned, vecinos de los Simpson.Aunque el secreto se guarda celosamente hasta que la Fox emita en Estados Unidos el pr¨®ximo domingo el episodio con el ¨®bito, parece claro que la muerte de Maude Flanders es la que abrir¨ªa m¨¢s v¨ªas creativas por cuanto permite desarrollar el futuro sentimental de su marido. Se mezclar¨ªan as¨ª dos de los temas favoritos de los guionistas: la religi¨®n y el sexo, una combinaci¨®n que proporciona los m¨ªnimos de irreverencia exigidos.