PSOE-IU, coalici¨®n preferida para gobernar La mayor¨ªa desea a la izquierda en el poder antes que un pacto de Aznar y los nacionalistas

Entre un Gobierno de coalici¨®n del Partido Popular con los nacionalistas catalanes o vascos y un Gobierno del PSOE e Izquierda Unida, los espa?oles prefieren que les gobierne la izquierda. Los ciudadanos que se decantan abiertamente por una y otra opci¨®n no suman porcentajes muy abultados, pero la decantaci¨®n por la alianza promovida por Joaqu¨ªn Almunia es clara.En caso de que los resultados de las elecciones del 12 de marzo requieran del partido mayoritario una coalici¨®n con otra fuerza, el 24% prefiere un Gobierno del PSOE y de Izquierda Unida que un Ejecutivo del Partido Popular reforzado con representantes de la coalici¨®n liderada por Jordi Pujol (CiU) o del Partido Nacionalista Vasco. En este momento prefieren esa opci¨®n el 17% de los espa?oles consultados. La tercera opci¨®n en la jerarqu¨ªa de preferencias (15%) consiste en que el partido m¨¢s votado gobierne en solitario y pacte con unos y con otros seg¨²n los asuntos de los que se trate.

Adem¨¢s de que al 42% le parece bien o muy bien el pacto firmado por Joaqu¨ªn Almunia (PSOE) y Francisco Frutos (IU), frente a un 30% que le parece mal o muy mal, el n¨²mero de espa?oles que creen que con ese acuerdo sale favorecido sobre todo el PSOE duplica a quienes sostienen lo contrario. La opini¨®n se encuentra m¨¢s dividida en el electorado socialista, si bien predomina la impresi¨®n de que al final el PSOE saldr¨¢ m¨¢s beneficiado electoralmente. Pero, a la vez, las opiniones vertidas por los ciudadanos apuntan un riesgo para el partido socialista en relaci¨®n con su electorado m¨¢s moderado. Un 6% de quienes respaldaron a los socialistas en 1996 acepta ahora la posibilidad de dar su voto al Partido Popular, mientras que s¨®lo un 2% de quienes dieron su confianza al PP dudan ahora en d¨¢rsela al PSOE.

En todo caso, es ampliamente mayoritaria (53%) la creencia de que el pacto acrecienta las posibilidades de una victoria electoral de la izquierda en comparaci¨®n con quienes estiman que esas posibilidades han disminuido (13%). Entre los votantes del PSOE y de Izquierda Unida, esa proporci¨®n pasa a ser de siete a uno.

Ese conjunto de datos induce a pensar que el pacto, sellado en el momento en que se estaban realizando las entrevistas de esta encuesta, puede llegar a convertirse en un factor de dinamizaci¨®n de la campa?a electoral. Algunos de los datos aportados por las respuestas de los ciudadanos consultados indican que el acuerdo todav¨ªa no ha calado del todo en la poblaci¨®n a la que est¨¢ dirigido.

Al margen de esa circunstancia, los socialistas registran un fuerte d¨¦ficit de atractivo para los votantes m¨¢s j¨®venes, que prefieren claramente al Partido Popular. El 26% de los espa?oles que votar¨¢n por primera vez en estas elecciones se inclina por apoyar a Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar, mientras que el 20% se decanta por Joaqu¨ªn Almunia.

El sondeo indica, por otra parte, que no es muy alto el n¨²mero de personas que se encuentran verdaderamente indecisas sobre a qu¨¦ fuerza votar el 12 de marzo. Antes incluso de haber comenzado la campa?a electoral, un alto porcentaje de la ciudadan¨ªa muestra que ya est¨¢ decantada, aunque algunos elementos formales aparentemente indiquen que la indecisi¨®n es m¨¢s alta. Entre un 60% -referido a las personas que declaran abiertamente su intenci¨®n de voto- y m¨¢s de un 77% -si se a?ade a los anteriores la cifra de quienes no expresan su intenci¨®n de voto pero s¨ª sus simpat¨ªas pol¨ªticas- expresan su preferencia por alg¨²n partido.

Aunque la dimensi¨®n de la consulta realizada en las comunidades aut¨®nomas donde se presentan partidos nacionalistas con representaci¨®n parlamentaria no basta para establecer estimaciones estad¨ªsticas rotundas, los datos recabados apuntan a una mayor estabilidad en las expectativas de esos partidos en comparaci¨®n con la registrada un mes antes de los comicios de 1996.

En t¨¦rminos globales, el clima de opini¨®n muestra una intensa competencia entre los dos principales rivales, PP y PSOE, con distancias que no son insalvables, si bien Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar parte claramente como favorito.