Dentro del cuadro

Cuando la exposici¨®n antol¨®gica sobre el pintor Joaquim Ure?a (Lleida, 1946) se clausure el pr¨®ximo dia 20, lo har¨¢ con un cuadro de m¨¢s: el que estos d¨ªas est¨¢ pintando el autor sentado en su viejo taburete y en el que retrata su propia exposici¨®n. En una de sus grandes y caracter¨ªsticas acuarelas (1,95 por 1,95 cent¨ªmetros) quedar¨¢n inmortalizados con su estilo realista los visitantes de la exposici¨®n y los cuadros que cuelgan de las paredes del Museo Morera de Lleida. De esta forma, Ure?a, que en la ¨²ltima d¨¦cada ha visto reconocida su obra con m¨²ltiples premios, vuelve as¨ª a sus or¨ªgenes, cuando con su caballete, su taburete, su cantimplora y su caja de acuarelas, retrataba d¨ªa tras d¨ªa las calles y plazas de Lleida ante la mirada curiosa de los transe¨²ntes. Pero han sido las acuarelas que el artista empez¨® a pintar en 1986 las que le han dado prestigio y premios. Se trata de grandes cuadros que retratan hasta el m¨¢s m¨ªnimo detalle interiores dom¨¦sticos, de comercios, de oficinas o de restaurantes y que le han valido el calificativo de pintor mim¨¦tico de la cotidianidad, un calificativo que ¨¦l acepta. "El mimetismo de mis cuadros no es circense, no me interesa ser fiel a la realidad s¨®lo para exhibir mi t¨¦cnica; sencillamente pinto aquello que veo, pintar es una forma de mirar", explica. Un estudio abarrotado de libros y papeles, una silla con ropa amontonada para planchar, un ba?o antiguo y descascarillado, son algunos de los temas que se pueden contemplar en esta exposici¨®n antol¨®gica.-