Zilhao defiende la existencia de h¨ªbridos de neandertal y croma?¨®n El descubridor del 'ni?o de Lapedo' presenta el f¨®sil en Barcelona

Muri¨® a los cuatro a?os hace 24.500 y fue enterrado con un elaborado ritual. Hasta aqu¨ª, todos de acuerdo. Ahora bien, ?era un croma?¨®n fornido o deforme o una mezcla de hombre moderno y neandertal? La pol¨¦mica sobre el ni?o de Lapedo (Portugal) ha alcanzado niveles ins¨®litos de visceralidad. Ayer, en Barcelona, uno de los responsables del descubrimiento, Jo?o Zilhao, defendi¨® la hip¨®tesis del h¨ªbrido.

El f¨®sil fue hallado en el abrigo de Lagar Velho, en el valle de Lapedo, a unos 140 kil¨®metros al norte de Lisboa, en 1998, y la posterior difusi¨®n, el a?o pasado, de la hip¨®tesis de que se trata de un h¨ªbrido de hombre moderno y neandertal -lo que contradir¨ªa la teor¨ªa de que el neandertal no est¨¢ emparentado con el hombre actual- inici¨® una agria pol¨¦mica entre los paleont¨®logos responsables del hallazgo, entre ellos Jo?o Zilhao, y los especialistas norteamericanos en neandertales Ian Tatersall y Jeffrey H. Schwartz. Zilhao, que dio ayer una conferencia en el Museo de la Ciencia de la Fundaci¨®n La Caixa, reconoci¨® a este diario que la reacci¨®n de su equipo, v¨ªa Internet, fue un tanto "salvaje" y que algunos adjetivos lanzados contra sus detractores, como el de "deshonestos", estuvieron de m¨¢s. "Reaccionamos en caliente, pero ellos fueron los responsables al aprovechar un comentario que les pidi¨® Proceedings para apoyar nuestro art¨ªculo sobre el f¨®sil para cargarse, con argumentos falsos, nuestra teor¨ªa". En fin, Zilhao, que cree que se va a discutir mucho en los pr¨®ximos a?os sobre el ni?o de Lapedo, subraya que su interpretaci¨®n sigue siendo v¨¢lida. "Es lo m¨¢s razonable, y de sentido com¨²n, a la luz de las evidencias", dice. El paleont¨®logo considera que es importante resaltar que la hip¨®tesis de hibridaci¨®n no significa que el ni?o fuera hijo de neandertal y hombre moderno, sino resultado de una mezcla producida tres mil a?os antes.

En el ni?o, dice, predomin¨® la contribuci¨®n biol¨®gica moderna, pero hay testimonios anat¨®micos de una aportaci¨®n neandertalense. "El ni?o es moderno, pero con trazos morfol¨®gicos neandertales gen¨¦ticamente transmitibles", recalca el cient¨ªfico que se?ala como el m¨¢s caracter¨ªstico de estos rasgos la proporci¨®n anat¨®mica, de tipo ¨¢rtico, es decir, extremidades cortas, frente a las proporciones tropicales -largas- propias del hombre moderno.

Se ha argumentado que el ni?o podr¨ªa ser anormalmente robusto o quiz¨¢ sufrir alguna clase de enanismo. "El ni?o era normal; alg¨²n problema tuvo, pues muri¨®, pero no sufr¨ªa ninguna patolog¨ªa de desarrollo". Zilhao se?ala como otros rasgos neandertalienses la forma de los incisivos, los agujeros auditivos, las ¨®rbitas y algunas inserciones musculares. Sobre el an¨¢lisis de ADN efectuado en restos de neandertal que ha indicado que ¨¦ste no es antepesado del hombre actual, Zilhao matiza que la prueba se ha hecho en un solo f¨®sil y que la comparaci¨®n deber¨ªa hacerse con hombres modernos de hace 30.000 a?os.

El ni?o fue enterrado siguiendo un rito funerario: el ocre rojo encima y debajo del esqueleto revela que fue envuelto en una piel te?ida; portaba una concha en el cuello y un tocado del que se conservan tres dientes de ciervo. En mayo se seguir¨¢ excavando en el abrigo, que evidencia una ocupaci¨®n m¨¢s antigua.