El juez exculpa del asesinato del due?o del c¨¢mping de El Pont de Bar a la viuda de ¨¦ste
El Juzgado de La Seu d'Urgell (Alt Urgell) exculp¨® ayer a las cuatro personas que continuaban inculpadas del asesinato del hostelero Josep Campi, propietario de un restaurante y de un c¨¢mping en las afueras de la localidad de El Pont de Bar. De las seis personas detenidas por el caso, s¨®lo cuatro ingresaron en prisi¨®n, aunque en la actualidad todas est¨¢n en libertad bajo fianza. Una de las encartadas en la causa era Carmen Bad¨ªa, considerada inductora del asesinato de su marido. Sin embargo, en el auto de procesamiento emitido por el titular del Juzgado de La Seu, Eduardo Marquina, se exculpa a la viuda por considerar que no existen pruebas determinantes contra ella.Tambi¨¦n han quedado exonerados de culpa Josep Boll¨®, que supuestamente le facilit¨® los cinco millones de pesetas para pagar a los sicarios; Jos¨¦ Manuel Cant¨®, un vecino de Girona que en las primeras diligencias policiales figuraba como autor material del crimen, y Francisco Mesa, detenido como encubridor.
En el mismo auto se procesa a Jos¨¦ Antonio Garc¨ªa Justo como presunto autor material del crimen y a Iv¨¢n Hoyos como colaborador necesario. Asimismo el juez acord¨® abrir diligencias penales contra Bad¨ªa por usurpaci¨®n de personalidad, ya que se sospecha que fue la autora de una serie de cartas que aparecieron publicadas en la prensa local con la firma de otras personas domiciliadas en La Seu. En ellas se desacreditaba a la madre y a la hermana del difunto por haber cuestionado su paternidad.
Crimen perpetrado en 1997
El crimen se cometi¨® el 9 de octubre de 1997 por la noche, cuando dos encapuchados entraron en el restaurante de Campi y, tras exigirle el dinero de la recaudaci¨®n del d¨ªa, le dispararon seis tiros en la cabeza y lo remataron a pu?aladas en el suelo. Antes de huir, sin llevarse el dinero, los atracadores tambi¨¦n intentaron eliminar a su hermana, Carme Campi, que result¨® herida en la cara y en un hombro, y a su madre, Maria Jordana. Las dos mujeres lograron salvar la vida porque a los malhechores se les acab¨® la munici¨®n. ?stas identificaron a Garc¨ªa Justo y Hoyos como las personas que esa noche entraron en el local primero para tomar unas consumiciones y 10 minutos despu¨¦s regresaron con capuchas.
Por el modo de actuar, la Guardia Civil sospech¨® desde el primer momento que los criminales actuaron por encargo de alguien, por lo que todas las sospechas recayeron en Carmen Bad¨ªa, una mujer con antecedentes delictivos y que se acababa de separar de su marido. Los investigadores tardaron cinco meses en demostrar que la viuda plane¨® deshacerse de Campi para poder heredar, a trav¨¦s de una hija del matrimonio, la fortuna del difunto, valorada en m¨¢s de 100 millones de pesetas. El empresario muri¨® sin testar, por lo que su patrimonio pasar¨¢ a la menor.
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