Cinco escritores hablan de sus experiencias con el Premio Nadal

Los escritores Luc¨ªa Etxebarr¨ªa, Carlos Ca?eque, Pedro Maestre y Jos¨¦ ?ngel Ma?as hablaron el jueves de c¨®mo ha marcado sus vidas el Premio Nadal, el m¨¢s antiguo de Espa?a, con 56 a?os de existencia. Etxebarr¨ªa, valenciana de 33 a?os, que gan¨® el Nadal en 1998 por su novela Beatriz y los cuerpos celestes, dijo no tener gratos recuerdos del premio. "Recuerdo las ruedas de prensa, las cuales consist¨ªan en que te insultaran". Con la cr¨ªtica, a juicio de Etxebarr¨ªa, no le fue mejor. "Seg¨²n ¨¦sta, fue una verg¨¹enza que me lo hubieran dado". "La literatura en este pa¨ªs es sexista, y la cr¨ªtica mucho m¨¢s", a?adi¨® la autora, "si coges a cualquier cr¨ªtico de primera fila sucede que es un hombre", afirm¨® quejosa.

El escritor Jos¨¦ ?ngel Ma?as, finalista del Nadal en 1994 por Historias del Kronen, marc¨® el contrapunto al decir que "de no haber sido por el premio la gente no me hubiera le¨ªdo". Adem¨¢s, agreg¨®, "esto me ha permitido dedicarme exclusivamente a la literatura".

Para Pedro Maestre, que obtuvo el premio en 1996 por Matando dinosaurios, el galard¨®n supuso "entrar por la puerta grande, conocer escritores, tener buenas ventas, seguir escribiendo"; sin embargo, precis¨® Maestre, "tambi¨¦n signific¨® estar en la parrilla de la cr¨ªtica".

"Quiz¨¢ se podr¨ªa hacer una tesis doctoral sobre los trastornos psicol¨®gicos de los premiados", dijo el autor de Qui¨¦n, Carlos Ca?eque, obra premiada en 1997. Este barcelon¨¦s de 43 a?os afirm¨® que "al contrario que Etxebarr¨ªa, yo viv¨ª pocos d¨ªas el sue?o".

Por ¨²ltimo tom¨® la palabra Lorenzo Silva, ¨²ltimo galardonado con el Nadal. El escritor de El alquimista impaciente se?al¨® que su experiencia ha sido ligeramente diferente. "Por suerte ya ten¨ªa publicados ocho libros, por lo que la sensaci¨®n ha sido un poco m¨¢s controlada".

Silva, que dijo llevar los navajazos de la cr¨ªtica "con la mayor dignidad posible", subray¨® que al contrario que otros premios, el Nadal "suele bendecir agua profana", porque galardona, sobre todo, a escritores no conocidos. "En eso radica su virtud", afirm¨®.