El s¨ªndrome pospolio, la venganza de un virus que el mundo se dispone a erradicar Del 20% al 40% de los enfermos sufren ciertos trastornos 30 a?os despu¨¦s de la infecci¨®n

La polio es, afortunadamente, una especie en extinci¨®n. La Organizaci¨®n Mundial de la Salud (OMS) se ha fijado la meta de erradicarla en el mundo este mismo a?o, cuando ya s¨®lo 30 pa¨ªses notifican casos. Continentes enteros, como Europa y Am¨¦rica, han quedado libres de esta enfermedad. Sin embargo, cual postrera venganza, muchos de los que quedaron infectados en su ni?ez sufren ahora, 30 a?os m¨¢s tarde, un empeoramiento repentino poco estudiado. Se llama s¨ªndrome pospolio y los que lo padecen reclaman que, al menos, se identifique su dolencia.

La ¨²ltima epidemia de polio en Espa?a data de principios de los a?os sesenta. Despu¨¦s ha habido algunos casos; el ¨²ltimo, en 1989. Los que tuvieron el infortunio de quedar infectados por aquel entonces saben que con ellos se acabar¨¢ definitivamente una pesadilla que ataca en la ni?ez y que deja una secuela de por vida consistente en muchos casos en una m¨¢s o menos grave dificultad motora.La vida de una v¨ªctima de la polio suele convertirse en un constante y dif¨ªcil af¨¢n de superaci¨®n. Todos desconoc¨ªan que en la cuarentena quiz¨¢ les esperar¨ªa un cruel recordatorio llamado s¨ªndrome post-polio, que produce una gran fatiga, dolores musculares y articulares, debilidad muscular, intolerancia al fr¨ªo e incluso problemas respiratorios y para tragar. Son problemas que les est¨¢n obligando a reducir el nivel de actividad y, a algunos, a recurrir a algo que siempre rechazaron, como la silla de ruedas u otros aparatos para poder moverse.

"El empeoramiento es repentino", explica un enfermo de 42 a?os. "La sensaci¨®n que tienes es la de un cansancio infinito y un constante agotamiento y estado de somnolencia". Otro afectado, que siempre presumi¨® de desarrollar una actividad fren¨¦tica a pesar de sus dificultades motoras, confiesa que ahora pasa muchas horas en la cama, con el tel¨¦fono y el ordenador a mano, pero en la cama.

Un mal poco progresivo

Para Inmaculada Margallo, a la que el virus atac¨® en 1951, cuando s¨®lo ten¨ªa cuatro a?os, es importante que, al menos, los que sufren el s¨ªndrome sepan de su existencia. "Dado que enfermamos de peque?os, tenemos fama de ser los ni?os mimados de la casa y de ser un poco quejicas, a pesar de nuestro af¨¢n de superaci¨®n. De modo que cuando empiezas a quejarte de que est¨¢s muy cansada, de que no duermes bien, de que no aguantas como antes, pues nadie te hace mucho caso. Creen que eres obsesiva. Muchos m¨¦dicos ni siquiera saben que existe este s¨ªndrome".

La primera descripci¨®n del s¨ªndrome data de finales del siglo XIX. Estados Unidos, un pa¨ªs que sufri¨® grav¨ªsimas epidemias en los a?os cincuenta, lo ha estudiado, aunque todav¨ªa son muchas las inc¨®gnitas que se ciernen sobre sus causas y su tratamiento. De hecho, los criterios diagn¨®sticos se establecieron hace muy poco: en 1984. En Espa?a, donde los primeros casos se detectaron a partir de 1991, el conocimiento es a¨²n m¨¢s escaso que al otro lado del Atl¨¢ntico. "Los m¨¦dicos no tienen mucha idea. Algunos creen que lo mejor es multiplicar el ejercicio, pero otros opinan que es mejor el reposo", explica Ana ?guila Maturana, profesora de Medicina Rehabilitadora de la Universidad Juan Carlos I de Madrid. "Parece claro que los afectados por el s¨ªndrome deben reducir su nivel de actividad y recurrir a ayudas para la marcha si es necesario. Pero es importante que no cunda el p¨¢nico. Entre el 60% y el 80% de los enfermos de polio no van a sufrir el s¨ªndrome y si lo padecen deben saber que es poco progresivo. Hay un empeoramiento entre cada cinco y diez a?os".

El personaje que mejor simboliza el car¨¢cter de un afectado por la polio es el que fue presidente de Estados Unidos Franklin D. Roosevelt. "Es gente luchadora, guerrera, acostumbrada a combatir las secuelas de la infecci¨®n", dice ?guila Maturana. Ahora, los m¨¦dicos ni siquiera est¨¢n tan seguros de que aquella terapia tendente a fortalecer en exceso los m¨²sculos da?ados fuera la apropiada. Lo cierto es que muchos afectados por el s¨ªndrome post-polio est¨¢n viviendo su segunda enfermedad como el definitivo ataque a su fortaleza psicol¨®gica.

Algunos han empezado a tener conflictos con las administraciones p¨²blicas cuando consideran que quiz¨¢ deban acogerse a la incapacidad permanente o solicitan de la sanidad p¨²blica una silla de ruedas el¨¦ctrica en vez de la manual que utilizaron hasta el momento.

Ahorro de vacunas

El poliovirus, que suele atacar a ni?os menores de tres a?os y se contagia por v¨ªa fecal-oral, se establece en el intestino, entra en el riego sangu¨ªneo e invade el sistema nervioso central y destruye en ocasiones las c¨¦lulas que activan los m¨²sculos. Los de las piernas suelen quedar m¨¢s afectados que los de los brazos. Las peores epidemias se produjeron en el mundo industrializado entre los a?os cuarenta y cincuenta. Pero gracias a dos vacunas que empezaron a introducirse a finales de los cincuenta, la polio est¨¢ hoy bajo control en casi todo el planeta.

Seg¨²n la Organizaci¨®n Mundial de la Salud (OMS), s¨®lo quedan reservorios del virus en el ?frica subsahariana y en el sur de Asia, y es factible su erradicaci¨®n gracias a la existencia de las vacunas, que inmunizan de por vida, y al hecho de que s¨®lo afecte a los humanos y no haya reservorios animales.

Un ambicioso programa de vacunaci¨®n hizo posible que ya en 1997 el 82% de los ni?os del planeta quedaran inmunizados. Hoy s¨®lo se registran 5.000 nuevas infecciones de polio anuales. Los pa¨ªses en los que a¨²n se dan casos son Angola, Afganist¨¢n, Bangladesh, Benin, Camer¨²n, Congo, Rep¨²blica Democr¨¢tica de Corea, Rep¨²blica Democr¨¢tica del Congo, Egipto, Etiop¨ªa, Ghana, Guinea, Guinea-Bissau, India, Ir¨¢n, Liberia, Mal¨ª, Myanmar, Nepal, N¨ªger, Nigeria, Pakist¨¢n, Senegal, Sud¨¢n, Togo, Irak, Gab¨®n, Sierra Leona, Burkina Faso, Chad y Eritrea.

Este a?o es la definitiva ofensiva contra la polio y la OMS ya acaricia el sue?o de ahorrar millones cuando la vacuna no sea necesaria. "Una vez que la polio quede erradicada, el ahorro en vacunas en todo el mundo alcanzar¨¢ cada a?o la cifra de 1.500 millones de d¨®lares ", dice esta organizaci¨®n.

Durante muchos a?os, sin embargo, el s¨ªndrome post-polio seguir¨¢ recordando al mundo que hubo una vez un virus que marc¨® a millones de personas en el pasado y cuyas secuelas siguen vivas. Para apoyarse mutuamente, ya se est¨¢n movilizando. En Madrid acaba de nacer la Asociaci¨®n de Afectados de Polio y S¨ªndrome Post-polio (tel¨¦fono: 686000171. Correo: inforpostpolio@wanadoo.es).