Los nadadores se tapan
Los trajes completos suponen una revoluci¨®n
Mientras las jugadoras de voleibol, las atletas o las tenistas se destapan, los nadadores se tapan. Los caminos del deporte parecen inescrutables, pero no es as¨ª. Buscan su inter¨¦s y su promoci¨®n. El voleibol quiso sacar partido desde hace m¨¢s de un a?o de los cuerpos esbeltos de sus jugadoras y aunque la decisi¨®n de la Federaci¨®n Internacional fue tachada de machista no estuvo en contradicci¨®n con la mejor¨ªa del deporte. Unos trajes ajustados que favorecen la agilidad y la mayor libertad de movimientos son mejores para los remates, los bloqueos o las recepciones. En atletismo, el dos piezas es ya habitual, pero no se extendi¨® el modelo completo de Florence Griffith en los a?os 80. El aire no es el agua. En nataci¨®n, aunque sus practicantes pod¨ªan tender f¨¢cilmente a ense?ar cent¨ªmetros de piel para hacerla m¨¢s atractiva, hasta los hombres se dirigen cada vez m¨¢s a los ba?adores completos con los nuevos tejidos de lycra, teflon y derivados. Se trata de que el deslizamiento del agua por el cuerpo (adem¨¢s de que el tejido, al comprimirlo y calentarlo, retrase la fatiga muscular), llegue a ser mayor que por la piel misma. Sin despejarse a¨²n las sospechas de que puede quedarse en una simple moda y negocio, algunos ensayos indican que las marcas podr¨ªan mejorar hasta un segundo por cada 100 metros. Mientras otros deportes se acercan al siglo XXI con modelos futuristas, la nataci¨®n parece hacerlo con trajes del XIX. La revoluci¨®n tapada.La Federaci¨®n Internacional de Nataci¨®n (FINA) permiti¨® el pasado mes de octubre los trajes integrales puestos en circulaci¨®n especialmente por dos de las grandes marcas, Speedo y Adidas "al no detectar ninguna infracci¨®n a las reglas, con la ¨²nica restricci¨®n de que los modelos deben dejar al descubierto la cabeza, las manos y los pies". La nataci¨®n, un deporte que ha tardado much¨ªsimo m¨¢s que su hermano mayor ol¨ªmpico, el atletismo, en incorporarse al profesionalismo y a los nuevos tiempos comerciales, se encuentra en medio de la pol¨¦mica. John Coates, el presidente del Comit¨¦ Ol¨ªmpico Australiano, ya se ha dirigido a la FINA advirtiendo de las protestas que podr¨ªan producirse por parte de nadadores perjudicados al no usar los nuevos ba?adores. Le han contestado que est¨¢ poniendo el carro antes que los bueyes, pero los australianos no quieren problemas en sus Juegos Ol¨ªmpicos de Sydney y Coates dice que devolver¨ªan las medallas de los denunciados.
Con el modelo Aquablade (cuchilla de agua) sacado por Speedo en 1996, los ensayos hechos por uno de los mejores velocistas actuales, el australiano Michael Klim, junto a su entrenador ex sovi¨¦tico Guennadi Turetski, demostraron que los tiempos podr¨ªan mejorarse entre 70 cent¨¦simas y un segundo por cada 100 metros. Con el nuevo Fastskin (piel r¨¢pida), que acaba de presentarse en Atenas y Sydney, el fabricante habla de un 7,5% de mejor¨ªa en el deslizamiento, y m¨¢s del 3% en el tiempo total. Durante el desarrollo del Aquablade, los fabricantes estudiaron dos puntos claves: la resistencia al agua y el deslizamiento en dos momentos decisivos, la salida (entrada en el agua) y en los virajes, que representan s¨®lo el 15% de las carreras, pero cuya influencia es porcentualmente muy alta al aumentar la velocidad del nadador en esos momentos hasta el 200% sobre la media.
Bandas y escamas
Dado que la resistencia al agua es, sobre todo, por la forma de los tejidos de los ba?adores (90%, frente al 10% por la fricci¨®n), se han buscado variantes. El Aquablade ten¨ªa unas bandas de resina, de forma que quedaran dos tipos, lisas las que sobresal¨ªan y rugosas las interiores. As¨ª, se produc¨ªan dos corrientes de agua, una m¨¢s r¨¢pida y otra m¨¢s lenta. Cuando la r¨¢pida flu¨ªa en la lenta se creaban espirales m¨¢s cerca del cuerpo antes de separarse, lo que permitia al nadador cortar el agua. Seg¨²n unos estudios hechos en la Universidad alemana de Ruhr, este tejido ofrec¨ªa un 8% de resistencia menos que el anterior sin las bandas y un 23% menos que el de lycra convencional. En cuanto a las salidas y los virajes, la rapidez se aument¨® un 19% respecto a los otros nadadores. En el Fastskin de ahora se han sustituido las bandas por escamas, que son las que facilitan el hidrodinamismo. El modelo es la adaptaci¨®n al hombre de un traje tibur¨®n. Con respecto al Aquablade, tiene m¨¢s largas las mangas y las perneras y parece m¨¢s ex¨®tico a¨²n.
Nina Jivanevskaia, la espa?ola de origen ruso nacionalizada, ha probado tambi¨¦n un modelo de la marca Diana de dos piezas de silicona. El Mach 1 tambi¨¦n repele el agua y por su textura la nadadora necesita incluso ayuda para pon¨¦rselo como una torera. La cintura queda descubierta para evitar una tensi¨®n mayor a¨²n. A Nina, por los resultados, tanto la ha favorecido como la ha perjudicado.
Pero los problemas, aparte de los t¨¦cnicos, tambi¨¦n son comerciales. Arena, la tercera gran marca, que se hab¨ªa negado hasta ahora "por antiest¨¦tico" a fabricar estos modelos, ya se ha metido en harina. Otra clave es que muchos nadadores tienen contratos con determinadas casas que no coinciden con los de sus federaciones. Por ejemplo, Ian Thorpe, el ¨²ltimo gran fen¨®meno australiano, que viste Adidas y ha batido con su modelo completo la mayor¨ªa de sus r¨¦cords mundiales. Ha accedido a hacer una prueba con el nuevo ba?ador de Speedo, que patrocina al equipo nacional de Australia.
Hay cr¨ªticas ya al desfile de modelos, pero lo mismo que ha ocurrido en otras innovaciones del deporte, si se confirma la ganancia de tiempo y la FINA no lo proh¨ªbe, dif¨ªcilmente dejar¨¢n de disfrazarse los cl¨¢sicos.
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