Pek¨ªn conmina al nuevo l¨ªder de Taiwan a aceptar "una sola China"

La nueva clave estrat¨¦gica del estrecho de Formosa tras la elecci¨®n en Taiwan del nuevo presidente, Chen Shui-bian, de antecedentes independentistas, se decantar¨¢ durante los pr¨®ximos d¨ªas. Las autoridades de Taipei decidieron ayer levantar el actual nivel de alerta (el llamado reforzado) del Ej¨¦rcito taiwan¨¦s, que ya hab¨ªa quedado suspendido la v¨ªspera. Al mismo tiempo, un diario de Hong Kong anunciaba la visita del ministro chino de Defensa, el general Chi Haotian, a la provincia de Fujian (en la costa sureste, frente a Taiwan), donde estar¨ªa concentrado un n¨²mero inhabitual de unidades del Ej¨¦rcito de Liberaci¨®n del Pueblo.Este aparente nerviosismo de los dispositivos militares a ambas orillas del estrecho no debe, sin embargo, llevar a enga?o. En la fase en que se encuentra el gran desbarajuste taiwan¨¦s, que actualmente se resume en una alternancia de equipos m¨¢s que en una ruptura pol¨ªtica, es prematuro concluir que el choque frontal es inevitable a corto plazo. Pek¨ªn deber¨ªa mantener durante algunas semanas m¨¢s una altanera pol¨ªtica de espera, plazo durante el cual las m¨¢s m¨ªnimas acciones y gestos de Chen Shui-bian ser¨¢n examinados con lupa. Desde este punto de vista, el periodo de transici¨®n hasta el 20 de mayo, fecha de la investidura oficial del segundo presidente de la "Rep¨²blica de China" -denominaci¨®n oficial de Taiwan-, va a ser crucial.

Punto de partida

Ambas partes aseguran que est¨¢n preparadas para dialogar. La gran dificultad est¨¢ en identificar el punto de partida de la discusi¨®n. Desde el lunes, las posiciones son aparentemente divergentes. Chen Shui-bian afirma querer discutir de todo, incluida la cuesti¨®n de "una sola China" a condici¨®n de que la aceptaci¨®n de este principio no constituya un requisito previo. Sin embargo, el presidente chino, Jiang Zemin, le ha respondido afirmando lo contrario: "Una sola China" debe ser el punto de partida de cualquier discusi¨®n.

Aunque el r¨¦gimen chino no tiene ninguna confianza en Chen Shui-bian, a pesar de que ya ha renunciado a la proclamaci¨®n formal de la independencia, no deber¨ªa arriesgarse a una ruptura sin haber antes sondeado los verdaderos m¨®viles pol¨ªticos del nuevo presidente taiwan¨¦s, que de momento permanecen confusos. Las pr¨®ximas semanas pueden ser aprovechadas para comprobarlos. Pek¨ªn podr¨ªa, por ejemplo, emprender un hostigamiento verbal gradual por medio de su propaganda o sus "expertos" en estos servicios para evaluar el grado de resistencia de Chen. ?Conservar¨¢ su sangre fr¨ªa? ?Responder¨¢ en un tono conflictivo? ?Cu¨¢les ser¨¢n las relaciones de fuerza que se dise?ar¨¢n en esta ocasi¨®n desde su propio campo? El r¨¦gimen continental necesita todas estas informaciones antes de dar el siguiente paso.

? Le Monde/EL PA?S