A pan y agua

Cuando Alejandro Font de Mora subi¨® al estrado para solicitar a Eduardo Zaplana con su cabecita de Madelman y su voz enharinada una explicaci¨®n sobre las pol¨ªticas de empleo, a gran parte de los diputados del Grupo Socialista les pareci¨® un asunto microsc¨®pico, comparado con la designaci¨®n de Javier Paniagua como miembro de la gestora del PSOE y la consiguiente dimisi¨®n de Diego Maci¨¤. Por eso, mientras Zaplana sub¨ªa con sus zapatos de borla y explicaba la grandeza del milagro, en los bancos socialistas se intensificaron los corros, los braceos y las llamadas de m¨®vil.Ante esta panor¨¢mica, hasta Jos¨¦ Emilio Cervera se permiti¨® bajar del ¨¢rbol y asistir a la comparecencia tumbado en el banco azul, con la convicci¨®n de que desde los escombros nadie le iba a morder, puesto que las mand¨ªbulas se iban a emplear en otros menesteres. Luego sali¨® Antonio Moreno tratando de recomponer su entereza del d¨ªa anterior para peguntar por el quebranto del Ivex, pero desde los bancos populares se lo recordaron enseguida: "?Te van a poner a pan y agua!".

Moreno ya hab¨ªa puesto a disposici¨®n el cargo de portavoz, por lo que Zaplana no necesit¨® ni salir al borde del ¨¢rea para arriesgar en su proverbial regate corto. Le bast¨® con vestirse de Ca?izares y desviar balones muy debilitados con lucimiento atl¨¦tico. El agujero insondable del Ivex se perd¨ªa una vez m¨¢s entre las ensanchadas grietas del principal partido de la oposici¨®n, entre las cuales pasaban con holgura "Julio Iglesias, El Soro y otros amiguetes de correr¨ªas del caso Naseiro".