Reno trata de convencer personalmente a los parientes de Miami para que entreguen a Eli¨¢n

Janet Reno, titular de la cartera de Justicia de Estados Unidos, lleg¨® anoche a Miami para entrevistarse con los parientes exiliados que cuidan de Eli¨¢n Gonz¨¢lez desde noviembre e intentar desatascar el caso del ni?o balsero. Reno se traslad¨® en avi¨®n desde Washington a Miami, y, una vez all¨ª, a la casa de la monja Jeanne O'Laughlin, donde horas antes se hab¨ªan refugiado con Eli¨¢n su t¨ªo abuelo, L¨¢zaro Gonz¨¢lez, y su prima y madre adoptiva Marisleysis. Con su valiente y dram¨¢tico gesto, Reno pretend¨ªa convencer a L¨¢zaro y Marisleysis de que no tienen otro remedio que entregar a Eli¨¢n a su padre, Juan Miguel Gonz¨¢lez.

De fracasar las conversaciones que anoche se desarrollaban en casa de la monja, el Departamento de Justicia no descartaba culminar la jornada con el env¨ªo de una carta con un ultim¨¢tum para los parientes de Miami. Seg¨²n el borrador de esa carta, L¨¢zaro y Marisleysis deber¨ªan entregar el chaval a las autoridades norteamericanas en la ma?ana de hoy, en el aeropuerto de Opa Locka, en las cercan¨ªas de Miami. Un gran desconcierto y el sentimiento de un desenlace inminente dominaron el cap¨ªtulo escrito ayer en el caso Eli¨¢n. En Washington y Miami las noticias se sucedieron a ritmo febril y de modo contradictorio. De la confusi¨®n emerg¨ªa la idea de que Juan Miguel Gonz¨¢lez va a reunirse con su hijo muy pronto, quiz¨¢ hoy mismo. As¨ª lo reconoci¨® en la capital norteamericana Jorge Mas Canosa, l¨ªder de la Fundaci¨®n Cubano-Americana, que intentaba conseguir una reuni¨®n entre Juan Miguel y sus parientes exiliados en Miami para una transferencia no traum¨¢tica de la custodia del ni?o balsero.

Pero esa reuni¨®n familiar, que tambi¨¦n defend¨ªa el Departamento de Justicia de EEUU, no estaba garantizada. Mas Canosa hab¨ªa estado a punto de conseguirlo la noche anterior. El presidente de la poderosa organizaci¨®n del exilio cubano anunci¨® que ayer se celebrar¨ªa una reuni¨®n en Washington entre Juan Miguel Gonz¨¢lez y sus parientes de Miami, acompa?ados por Eli¨¢n.

Ese encuentro, seg¨²n Mas Canosa, se celebrar¨ªa en un "lugar neutral", probablemente la nunciatura del Vaticano en la capital norteamericana. Pero poco despu¨¦s, L¨¢zaro Gonz¨¢lez compareci¨® en las puertas de su casa en la Peque?a Habana para anunciar que ¨¦l y los suyos no viajar¨ªan con el ni?o a Washington. "Eli¨¢n no quiere ver a su padre", fue la raz¨®n invocada por L¨¢zaro, la persona que ejerce la tutor¨ªa del peque?o desde que fue rescatado del oc¨¦ano en noviembre, tras presenciar la muerte en naufragio de su madre, que intentaba escapar de Cuba.

Tras desautorizar a Mas Canosa, L¨¢zaro y Marisleysis se llevaron ayer a Eli¨¢n al domicilio en Miami Beach de la monja Jeanne O'Laughlin, que en enero acogi¨® la expedici¨®n de las dos abuelas de Eli¨¢n. A ra¨ªz de su encuentro con las abuelas, llegadas de Cuba, la religiosa se declar¨® partidaria de que el ni?o se quede en Miami. L¨¢zaro declar¨® que buscaba "paz" para el peque?o en casa de la monja. Todas las partes se declaraban muy preocupadas por los da?os psicol¨®gicos que estas peripecias pueden causarle al ni?o balsero. Incluso el tr¨ªo de psiquiatras y psic¨®logos destinados al caso por Justicia insist¨ªa en que un reencuentro amistoso entre el padre y sus parientes de Miami ser¨ªa el mejor marco para Eli¨¢n.

Evitar un trauma

La preocupaci¨®n por el trauma que puede sufrir el peque?o si es arrancado por la fuerza de los brazos de L¨¢zaro y Marisleysis es lo que llev¨® a Reno a intentar conseguir anoche en Miami que cedan de una vez y acepten la para ellos dolorosa idea de que el ni?o va a regresar con su padre, que se lo llevar¨¢ a Cuba. La carta con el ultim¨¢tum de Justicia a L¨¢zaro Gonz¨¢lez segu¨ªa en el limbo a primera hora de la madrugada de hoy. Pero pod¨ªa ser enviada en cualquier momento, estableciendo que hoy debe cerrarse el caso, con la entrega de Eli¨¢n a su padre en el aeropuerto de Opa Locka.

Juan Miguel Gonz¨¢lez esperaba en los suburbios de Washington y se declaraba exasperado. Todo segu¨ªa abierto, pero parec¨ªa que, aunque nadie sab¨ªa c¨®mo, cu¨¢ndo y d¨®nde, Eli¨¢n saldr¨ªa de Miami antes del final de la semana.