Un libro explica las claves art¨ªsticas y personales del cineasta Stanley Kubrick El cr¨ªtico franc¨¦s Michel Ciment publica en Espa?a una extensa obra sobre el director
De la relaci¨®n entre el cr¨ªtico e historiador de cine Michel Ciment y el director Stanley Kubrick surgi¨® un libro cl¨¢sico que ha tenido tres reediciones en Francia y que acaba de publicar en Espa?a la editorial Akal. Aquella relaci¨®n fue peculiar, como casi todas las que mantuvo el creador de obras maestras como Senderos de gloria, Espartaco, La naranja mec¨¢nica o 2001, una odisea del espacio, un personaje al que le gustaba esconderse de las miradas, incluso de las de sus amigos. La edici¨®n espa?ola del libro Kubrick fue actualizada despu¨¦s del fallecimiento del cineasta.
El cr¨ªtico de cine y profesor franc¨¦s Michel Ciment asegura que conoci¨® "mucho" a Stanley Kubrick, aunque r¨¢pidamente se?ala: "Bueno, dentro de lo que alguien pod¨ªa llegar realmente a conocerle. Por lo menos mantuve el contacto con ¨¦l a lo largo de 30 a?os". Kubrick llamaba muy a menudo al director de la revista Positif para hablar de cine, de las pel¨ªculas que hab¨ªa visto en los festivales (y que el realizador de Espartaco se hac¨ªa proyectar en su casa) o simplemente para consultarle sobre un buen lugar en Par¨ªs donde poner las vallas publicitarias para la promoci¨®n de una determinada pel¨ªcula. No obstante, en persona s¨®lo se vieron en cinco ocasiones.La obra Kubrick, considerada ya un cl¨¢sico sobre uno de los directores de cine m¨¢s importantes, acaba de llegar a las librer¨ªas espa?olas, editada por Akal. "Es un libro profusamente ilustrado, en total tiene 430 fotos", asegura desde Par¨ªs en una conversaci¨®n telef¨®nica Michel Ciment, autor de numerosos ensayos cinematogr¨¢ficos y uno de los cr¨ªticos m¨¢s conocidos de Francia. "Pero era la ¨²nica forma de convencer al lector, m¨¢s all¨¢ del texto, de que realmente existen muchos m¨¢s puntos en com¨²n en el cine de Kubrick de lo que puede parecer a primera vista".
Pel¨ªculas y entrevistas
El libro traza un recorrido por la vida y la obra del realizador, nacido en Nueva York el 26 de julio de 1926 y fallecido en el Reino Unido el 7 de marzo de 1999. Adem¨¢s del an¨¢lisis de sus pel¨ªculas y entrevistas con varios de sus colaboradores -que van desde el escritor Michael Herr hasta los actores Malcolm McDowell, Marisa Berenson y Jack Nicholson, el libro re¨²ne tres conversaciones con Stanley Kubrick, aunque, como confiesa Ciment, "cuanto m¨¢s lo conoc¨ªa, menos quer¨ªa hablar; es m¨¢s, creo que hubiese llegado al silencio total".
Historiador y cr¨ªtico de cine, Michel Ciment es profesor de Civilizaci¨®n Americana en la Universidad de Par¨ªs VII, as¨ª como miembro del comit¨¦ de redacci¨®n de Positif. Ciment es autor de varios libros sobre cine, entre los que destacan Kazan per Kazan, Passeport pour Hollywood o Theo Angelopoulos. Su libro sobre Kubrick ha sido traducido al ingl¨¦s, al alem¨¢n, al italiano y al japon¨¦s, entre otros idiomas, antes de aparecer en su versi¨®n espa?ola.
Cuando estren¨® La chaqueta met¨¢lica no quiso ser entrevistado y prefiri¨® responder por fax a un cuestionario en el que ofrece una serie de extraordinarios aforismos. "No hay que hacer pel¨ªculas de Frank Capra para mostrar que se ama a la gente", escribe el cineasta en una frase que resume la gran obsesi¨®n que ha marcado su cine. "Kubrick", comenta Michel Ciment, "era un libertario, pero tambi¨¦n un pesimista profundo. Cre¨ªa en el hombre, pero estaba convencido de que la sociedad no iba a mejorarle mucho, m¨¢s bien todo lo contrario. En sus pel¨ªculas, vemos que el hombre est¨¢ siempre en estado de guerra. Pensaba que quiz¨¢s se pod¨ªa curar al ser humano como individuo, pero no hacerlo mejor de manera permanente. Esto, de todos modos, no imped¨ªa que sintiese una enorme compasi¨®n por todos sus personajes, que fuese capaz de transmitir en sus pel¨ªculas el sufrimiento de los seres humanos".
En otra de las respuestas a Ciment, Kubrick escribi¨®: "El perfeccionismo: los periodistas utilizan esta palabra para agredirme y me parece injusta. Si se intenta hacer algo, procura que resulte lo mejor posible. Nunca desperdicio ni mi tiempo ni mi dinero, sino que trato de hacer bien las cosas".
Una cabeza libre
"Era un hombre que ten¨ªa un sue?o del cine, y en sus pel¨ªculas siempre hab¨ªa una parte de c¨¢lculo. Fue la persona con la cabeza m¨¢s libre que he conocido, alguien que se mov¨ªa siempre fuera de las ideas preconcebidas. Su formaci¨®n de fot¨®grafo le llev¨® a ser un gran investigador de la realidad. Documentaba sus pel¨ªculas de forma extraordinaria, era un visionario y, como tal, ten¨ªa que dominar ante todo lo que ve¨ªa", puntualiza Michel Ciment, que asegura que Stanley Kubrick siempre intent¨® rodearse de los mejores profesionales, ya que pensaba que la libertad s¨®lo se consegu¨ªa desde el dominio de la t¨¦cnica, salvo en el caso de los guionistas.
"Siempre escog¨ªa a guionistas que no eran profesionales, como Michael Herr . Le horrorizaban los especialistas del gui¨®n, porque ¨¦l siempre quer¨ªa saltarse las normas. En cambio adoraba a los actores. Para Stanley Kubrick, la profesionalidad no era un l¨ªmite, sino un impulso".
Ciment mantiene que Kubrick no fue alguien que desde?ase totalmente el ¨¦xito comercial de sus pel¨ªculas, y asegura que era un creador que ten¨ªa muy claro el sentido del espect¨¢culo, algo que aprendi¨® en Hollywood, sobre todo durante el rodaje de Espartaco, que fue la ¨²ltima pel¨ªcula que realiz¨® bajo el sistema de los estudios, antes de exiliarse al Reino Unido.
"Siempre le he comparado con Orson Welles. El autor de Ciudadano Kane perdi¨® su libertad a lo largo de su carrera. A Stanley Kubrick, en cambio, le ocurri¨® todo lo contrario: se construy¨® su libertad, ya que comprendi¨® bastante r¨¢pidamente que la independencia econ¨®mica y la libertad creativa iban de la mano. Supo utilizar la industria en vez de ponerse a su servicio".
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