La selecci¨®n supera el tope de fatiga que establecen los especialistas

Ra¨²l llega a la selecci¨®n con 5.823 minutos de juego a sus espaldas. Y eso sin contar los amistosos con su equipo. El goleador del Madrid es el m¨¢s claro exponente de un mal que afecta a todo el conjunto espa?ol: la sobrecarga de partidos. Muchos de los convocados por Camacho han superado la cifra de 4.000 minutos por temporada (aunque la media del equipo sea de 3.537) en la que los especialistas sit¨²an el l¨ªmite de m¨¢ximo rendimiento de un jugador. Superado ese n¨²mero, las prestaciones se reducen dr¨¢sticamente. Fran, con 1.885 minutos acumulados, es el menos saturado.

"Un futbolista s¨®lo puede rendir al m¨¢ximo nivel si no arrastra m¨¢s de 4.000 minutos de juego. A partir de esa cifra el rendimiento decae. Si en ocasiones normales, Ra¨²l puede generar diez ocasiones de gol dentro del ¨¢rea, ahora s¨®lo podr¨¢ crear cinco; ¨¦sa es la referencia". La teor¨ªa la defienden Roberto Sassi y Vincenzo Pincolini, dos de los preparadores f¨ªsicos que han trabajado ¨²ltimamente en el f¨²tbol espa?ol, a las ¨®rdenes, respectivamente, de Claudio Ranieri y Arrigo Sacchi. Seg¨²n dicha tesis, la selecci¨®n espa?ola llega a la Eurocopa con la dificultad de no poder disfrutar de sus futbolistas al m¨¢ximo nivel. En el mejor de los casos, Espa?a disputar¨¢ seis partidos en la Eurocopa. Ocho, contando los dos amistosos previos ante Suecia y Luxemburgo. Una cantidad que a ojos de los jugadores parecen una serie interminable. Como dijo ayer Alfonso: "Lo que nos pesa no es el calendario que nos espera, con descansos de hasta cinco d¨ªas entre partido y partido, sino la acumulaci¨®n de todos los minutos que hemos jugado en el a?o".

El preparador f¨ªsico de la selecci¨®n, Carlos Lorenzana, analiza con naturalidad el estado f¨ªsico de los futbolistas de media Europa y los de su propio equipo: "Est¨¢n cansados no s¨®lo por el esfuerzo de los partidos. Son jugadores que se pasan concentrados todo el a?o. Juegan domingo y mi¨¦rcoles y consumen la mitad de su tiempo lejos de su familia, en viajes, aeropuertos y hoteles. Son situaciones estresantes que fatigan. Esto s¨®lo queda contrarrestado por la ilusi¨®n que les hace a los jugadores ganar una Eurocopa".

En medio del recorrido de un ejercicio de resistencia f¨ªsica, a lo largo de un circuito de conos y ca?as, Fernando Hierro pas¨® junto a Lorenzana, y balbuce¨®, hace dos d¨ªas: "?Cu¨¢ntas veces hay que repetir esto?". Estaba exhausto. Hierro lleva m¨¢s de dos meses en los que ha jugado s¨®lo diez minutos de partidos oficiales. En toda la temporada acumula 3.226. Est¨¢ fuera de ritmo pero, en contra de lo que podr¨ªa pensarse, es un privilegiado en la plantilla de los 22 seleccionados por Camacho. "Gente que estuvo lesionada, como Hierro, Sergi o Velasco, tienen una ventaja porque van a estar m¨¢s descansados que los jugadores que han disputado todos los minutos". La desventaja de Hierro es que viene de una lesi¨®n de rodilla. La de su compa?ero Ra¨²l es la de venir de disputar 5.823 minutos. Tres veces m¨¢s que Fran, el que menos carga de minutos trae (1.885).

El m¨¦dico de la selecci¨®n, Genaro Borr¨¢s, explica con resignaci¨®n los problemas que tiene que reparar: "Si ahora le hacemos una resonancia magn¨¦tica a cualquier jugador de primer nivel en Europa, encontrar¨ªamos que los m¨²sculos tienen todo tipo de se?ales, de secuelas que denotan una irregularidad, una inflamaci¨®n, una contractura... Y les duele, l¨®gicamente sienten dolor, pero es que son profesionales y el umbral de dolor con el que est¨¢n acostumbrados a trabajar es muy superior al de una persona normal".

Los 22 miembros de la plantilla fueron sometidos el martes a un an¨¢lisis de sangre rutinario que siempre, a estas alturas de la temporada, da como resultado una falta de hierro generalizada. Para resolverlo, los jugadores toman complementos minerales, vitaminas, y muchos hidratos de carbono en las comidas. Lorenzana, un especialista en la preparaci¨®n f¨ªsica acoplada a la t¨¢ctica y a la t¨¦cnica, que trabaj¨® con la selecci¨®n de Yugoslavia durante el Mundial de Francia, no se sorprende por el estado de los futbolistas: "Una cosa es lo que tu planificas a priori y otra la aplicaci¨®n pr¨¢ctica de ese plan previsto. El jugador va asimilando unas cargas de trabajo y su organismo va respondiendo de una manera determinada. La planificaci¨®n es el¨¢stica, pero el equipo viene con lo que preve¨ªamos. Con una acumulaci¨®n de partidos y de minutos jugados muy grande. Con mucho desgaste, con mucho estr¨¦s y mucha tensi¨®n, porque ha habido jugadores compitiendo hasta el final. Con tres equipos metidos en Copa de Europa hasta hace dos semanas. Con una final de Copa del Rey hace cuatro d¨ªas. Y con jugadores que pelearon por la Liga hasta el ¨²ltimo partido. Este desgaste lo contrarrestamos haciendo entrenamientos de recuperaci¨®n, siempre con bal¨®n, para que los jugadores se sientan a gusto y para que la preparaci¨®n f¨ªsica no se aparte de la actividad propia del juego. Dentro de unas condiciones que se aproximen lo m¨¢ximo a un partido: correr, saltar, esprintar, cambiar de direcci¨®n y golpear el bal¨®n".