Veranada
Hoy, el d¨ªa m¨¢s largo, la noche m¨¢s corta, comienza el verano. A la 1.47 con el sol en C¨¢ncer (el cangrejo enviado por Juno contra H¨¦rcules en su combate con la hidra Lerna), regido por la Luna, de cuyas fases era patrona la hermana y esposa de J¨²piter, Juno, ama de este mes de junio, madrina de las bodas y protectora de las casadas y los partos (C¨¢ncer, la constelaci¨®n, fue considerada por Plat¨®n la star gate, la puerta oscura del cielo por donde entraban las almas para encarnarse en el instante de la pre?ez), ayudando a los reci¨¦n nacidos, bonics com un sol, a ver la luz del sol.El Sol plet¨®rico -Sol d'estiu cou com caliu- llega con el solsticio, el verano -del lat¨ªn ver, primavera, el de la antigua veranada ganadera y del arca¨ªsmo ver, utilizado por Vilanova, en ivern e en ver, y Llull, en ver es fa la renovaci¨® de fruits-, la primera parte de una estaci¨®n, cuya segunda, el est¨ªo -de aestuo, hervir- enjuga las fuentes. Ese inicio de la plenitud del dios luminoso, que da vida a todo lo creado bajo la capa del Sol, se cristianiz¨® bajo el manto de la Pascua Granada del Esp¨ªritu Santo iluminador y de san Juan, un nombre tan cercano a Janus, dios de principios y fines, que, como Bautista, abre el verano y como Evangelista, el invierno.
Pero, hoy es san Luis -del germ¨¢nico hluot-wig, combate glorioso, pas¨® a Clodovicus y, de ah¨ª, a Ludovicus; ?por qu¨¦ lo usaron tantos conversos valencianos (Vives, Alcany¨ªs, Sant¨¤ngel)?-, hijo del marqu¨¦s Gonzaga, beatet de cuna: no mamar¨ªa los viernes a fin de ayunar y no pecar con las turgencias de sus nodrizas. A los cinco a?os ya hac¨ªa la guerra con mini coraza, espadita y casquete con plumas; a los diez ya filosofaba y, claro, hizo voto de virginidad perpetua; a los catorce se enrol¨® en la Compa?¨ªa; tanta precocidad le hizo morir a los 23 a?os, sol post, faena acabada.
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