La oposici¨®n coincide al denunciar el car¨¢cter "franquista" de la ley de ¨¢reas metropolitanas

El proyecto de ley de ¨¢reas metropolitanas que el Consell ha remitido a las corporaciones locales implicadas en las zonas urbanas en torno a Valencia, Alicante y Elche ha sido acogido por el PSPV, Esquerra Unida y el Bloc Nacionalista Valenci¨¤ como un atentado a la autonom¨ªa municipal, un "bodrio t¨¦cnico y conceptual" y reflejo de una concepci¨®n "franquista" de la realidad social. Portavoces de los tres partidos denuncian, adem¨¢s, que ofrecer diez d¨ªas para presentar alegaciones a un texto no es precisamente lo que se entiende por "consensuar" una ley.

Los representantes del PSPV, EU y BNV en todos los ayuntamientos afectados por el proyecto de ley presentar¨¢n mociones contra la redacci¨®n de un texto que consideran viciado por defectos t¨¦cnicos y que pone de manifiesto una concepci¨®n autoritaria y presidencialista de la relaci¨®n entre corporaciones locales. Los tres partidos claman por una inmediata retirada del proyecto y fundamentan sus exigencias en reflexiones coincidentes.La norma prev¨¦ la constituci¨®n de dos "entidades monofuncionales" que asumir¨¢n la gesti¨®n de las basuras y el suministro de agua potable a las zonas metropolitanas, que formalmente ser¨¢n consideradas entidades locales con competencias similares a las de cualquier ayuntamiento. Sin embar+go, la propia norma apunta que la "Generalitat establecer¨¢ los objetivos de las entidades monofuncionales". Tal redacci¨®n constituye una evidente violaci¨®n de la autonom¨ªa municipal que consagra la Constituci¨®n, denuncian representantes de los tres partidos.

La asamblea que representar¨¢ a las entidades locales implicadas responde a un dise?o destinado a coartar la voz de las minor¨ªas, seg¨²n coinciden en se?alar los portavoces de EU y BNV. La representaci¨®n de cada Ayuntamiento recaer¨¢ en la persona del alcalde, una f¨®rmula que prima a las mayor¨ªas. La ponderaci¨®n del voto de cada Ayuntamiento se cifra por n¨²mero de habitantes. Cada 10.000 habitantes se traducir¨¢n en un voto.

As¨ª, el ¨¢rea metropolitana de Valencia sumar¨¢ en conjunto 165 votos. El Ayuntamiento de Valenica dispondr¨¢ de 81, pero, adem¨¢s, la norma fija una prima de siete votos para los ayuntamientos capitales de provincia. De esa manera, Valencia se garantiza el control de la asamblea correspondiente a su ¨¢rea metropolitana.

Por la misma raz¨®n, el alcalde de Elche, el socialista Diego Maci¨¤ ha reiterado que la nueva norma constituye un "opa hostil" de Alicante contra su ciudad. El caso es tan flagrante que el grupo municipal del PP de Elche se ha sumado al rechazo a la norma elaborada cuando Seraf¨ªn Castellano ocupaba la Consejer¨ªa de Administraci¨®n P¨²blica.

La norma alude indistintamente a "conurbanciones" y "zonas metropolitanas", nociones que no son identificables, por lo que merece el calificativo de "bodr¨ªo t¨¦cnico y conceptual", en palabras de Enric Carbonell, del BNV. Pero adem¨¢s establece unos criterios para definir las ¨¢reas metropolitanas que restringen los beneficios de la cooperaci¨®n municipal a la ciudad de Valencia y al eje entre Alicante y Elche. La ciudad de Castell¨®n o algunas zonas de gran densidad de poblaci¨®n dispersa en municipios intermedios nunca podr¨¢n beneficiarse de los servicios compartidos que contiene la norma.

Joan Rib¨®, coordinador general de EU, sugiri¨® que tales condiciones atentan contra una concepci¨®n comarcal de la Comunidad Valenciana, una hist¨®rica aspiraci¨®n que nunca ha prosperado en las Cortes Valencianas.

El texto no incluye una memoria econ¨®mica que garantice la financiaci¨®n de las entidades dedicadas a gestionar las basuras o el suministro de agua potable, pero tampoco hace ninguna menci¨®n al destino del patrimonio del extinto Consell Metropolit¨¤ de L'Horta, o de las empresas Emarsa y Fervasa que prestaban los servicios en el ¨¢rea metropolitana de Valencia.

Otra protesta generalizada corresponde al proceso de elaboraci¨®n de la norma. Castellano reiter¨® que el proyecto de ley ser¨ªa consensuado con todos los ayuntamientos implicados. Sin embargo, el Consell se ha limitado a distribuir una redacci¨®n de la norma y ha ofrecido un plazo de diez d¨ªas para presentar alegaciones al texto. Portavoces de todos los partidos de la oposici¨®n han bromeado sobre la curiosa concepci¨®n que parece tener el PP sobre la noci¨®n de consenso.

Jos¨¦ D¨ªez, diputado auton¨®mico del PP, sali¨® al paso del aluvi¨®n de cr¨ªticas al "anteproyecto" que, dijo, persigue la "desburocratizaci¨®n, descentralizaci¨®n, eficacia y agilidad de mediante f¨®rmulas operativas que optimicen el rendimiento de los servicios p¨²blicos y minoren su coste".

D¨ªez recurri¨® al discurso oficial cuando a?adi¨®: "Es sospechoso que, por norma, siempre que se anuncia la presentaci¨®n de un proyecto de ley, los portavoces de la oposici¨®n salgan a hacer declaraciones radicalmente opuestas al contenido de su texto".