Molinuevo destaca el potencial del espa?ol como lengua de pensamiento
El fil¨®sofo pronuncia una conferencia en el Instituto Cervantes de Chicago
El pensamiento espa?ol est¨¢ a punto de encontrar en la lengua propia una forma de expresi¨®n original acomodada a los desaf¨ªos de la ciencia y a las necesidades de una sociedad en febril tr¨¢nsito del viejo siglo XX al hipertecnol¨®gico siglo XXI, seg¨²n Jos¨¦ Luis Molinuevo, fil¨®sofo y catedr¨¢tico de Est¨¦tica de la Universidad de Salamanca. Molinuevo expuso el s¨¢bado su tesis de que el espa?ol tiene un extraordinario potencial como lengua de pensamiento en el Instituto Cervantes de Chicago, en una conferencia enmarcada en el congreso de la American Library Association (ALA, Asociaci¨®n Estadounidense de Bibliotecarios).
Molinuevo cree que lo caracter¨ªstico del cada vez m¨¢s seguro de s¨ª mismo pensamiento en espa?ol es la conciencia de ser un pensamiento latino enraizado en un pensamiento en im¨¢genes y en sinton¨ªa con las nuevas tecnolog¨ªas. El espa?ol ha sido tradicionalmente concebido como una lengua literaria. Considerarlo como lengua de pensamiento era una excentricidad que ni al m¨¢s ido de los fil¨®sofos se le pasaba por la cabeza. El director del Centro de Estudios Orteguianos de la Fundaci¨®n Ortega y Gasset, de formaci¨®n germana, mantiene que no hay correspondencia entre el indudable ¨¦xito del espa?ol como lengua de comunicaci¨®n y el espa?ol como lengua de pensamiento. "La raz¨®n es que todav¨ªa somos un pensamiento ajeno, no pensamos en nuestra lengua. Producimos textos mestizos, en los que constantemente ponemos entre par¨¦ntesis expresiones y conceptos de otras lenguas", dice. "No dejamos que nuestra lengua piense por nosotros" debido a que "todav¨ªa hay un profundo complejo de inferioridad en los pensadores espa?oles". Esa frustraci¨®n procede de la asumida creencia de que Espa?a no ha tenido modernidad. "Hace falta enterrar ese t¨®pico. Hay que entender que no ha habido modernidad, sino modernidades, y que lo que ha pasado por ser una ¨¦poca de raz¨®n fue sobre todo una ¨¦poca de imaginaci¨®n".
Humanismo y tecnolog¨ªa
Molinuevo encuentra una pl¨¦yade (F¨¦lix de Az¨²a, Rafael Argullol, Tr¨ªas, Javier Echeverr¨ªa, Rubert de Vent¨®s, Savater...) de pensadores que buscan respuestas originales a los retos de un tiempo en el que la mayor parte de los conceptos proceden de una sociedad que ya no existe. "Han aparecido problemas que antes no exist¨ªan y hemos pasado de la t¨¦cnica a las nuevas tecnolog¨ªas", subraya. Internet y las nuevas tecnolog¨ªas han creado una realidad que permite avanzar al pensamiento espa?ol entroncando en una tradici¨®n original propia, que ve el aspecto humanista de la tecnolog¨ªa, como puso de manifiesto la meditaci¨®n de la t¨¦cnica de Ortega.Molinuevo percibe que en el pensamiento espa?ol hay un cruce de filosof¨ªa y literatura que busca una modernidad alternativa de car¨¢cter latino basada en un humanismo tecnol¨®gico. El pensamiento en espa?ol, que se beneficia, seg¨²n el catedr¨¢tico salmantino, del agotamiento de otras filosof¨ªas m¨¢s acreditadas y del nuevo universo que crean las nuevas tecnolog¨ªas, debe ser un pensamiento en im¨¢genes, definido como "un pensamiento sint¨¦tico, que suma, como lo latino".
Thomas Mermall, profesor de Literatura Espa?ola de la Universidad de Nueva York y estudioso de los fil¨®sofos espa?oles, quien disert¨® sobre el ensayo espa?ol, replic¨® a Molinuevo que "la imagen anula el pensamiento y crea un estado idiotizado" en la mente.
En el congreso de la ALA participaron ayer Violeta Demonte, Olimpia Andr¨¦s y Emilio Casares, que presentaron su gram¨¢tica y diccionarios. Demonte, coautora de la Gram¨¢tica descriptiva de la lengua espa?ola, mantiene que este trabajo "ofrece a los no nativos una informaci¨®n mucho m¨¢s rica de la lengua que les ayuda en la investigaci¨®n y en la ense?anza". Andr¨¦s, coautora del Diccionario del espa?ol actual, resalta el car¨¢cter de nueva planta de la obra. Casares introdujo el magno Diccionario de la m¨²sica espa?ola e hispanoamericana, la respuesta de nuestra cultura a las dos grandes obras de referencia (anglosajona y germana).
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.