Los editores arremeten contra el Gobierno y piden medidas de fomento de la lectura

"La batalla por el precio fijo de los libros continuar¨¢", advirti¨® ayer Jorge Herralde, de Anagrama. Seg¨²n el editor, no se puede aceptar la actitud "de a m¨ª que me registren" que exhiben en el Encuentro de Editores de Santander los representantes de Educaci¨®n y Cultura. "Ni tampoco la de una diputada que nos dice que las cosas son como son y que no vale la pena lamentarse. Y nosotros, ?qu¨¦?, calladitos y tumefactos". Tumefactos, quiz¨¢; calladitos, nada. El director general del Libro, Fernando de Lanzas, aguant¨® estoicamente el chaparr¨®n.

El XVI Encuentro sobre Editores, dedicado al tema La cultura del libro ante los desaf¨ªos del siglo XXI, que ha dirigido el ex ministro de Cultura Jorge Sempr¨²n, se cerr¨® ayer con gran cordialidad, aunque un momento hubo en que pareci¨® que acabar¨ªa como el rosario de la aurora. Muchos de los editores que han participado en estas jornadas que acoge la Universidad Men¨¦ndez Pelayo no estaban demasiado conformes con la reconciliaci¨®n p¨²blica que ofrecieron el jueves el presidente en funciones de la Federaci¨®n de Gremios de Editores, Josep Llu¨ªs Monreal, y el director general del Libro, Fernando de Lanzas, y se dedicaron a cargar pilas.Los tres editores que intervinieron ayer en la ¨²ltima sesi¨®n, La oferta orientada a la creaci¨®n de lectores, sin ponerse de acuerdo, cada uno por su lado, atacaron en la misma direcci¨®n: los editores editan y buscan lecturas, pero es responsabilidad primordial de la Administraci¨®n la promoci¨®n de la lectura. Abri¨® el fuego Luis Su?¨¦n, director de Alianza. "En las pol¨ªticas culturales y de la educaci¨®n, el Gobierno tiende a la trivializaci¨®n". M¨¢s duro fue Leopoldo Blume, director de Blume: "La escuela no ha conseguido atraer el inter¨¦s por la lectura y el Gobierno no se toma en serio la iniciaci¨®n a la cultura a trav¨¦s de la lectura. Es el Gobierno quien tiene la responsabilidad ¨²ltima en la promoci¨®n de la lectura". Y remach¨® Herralde: "La creaci¨®n de lectores corresponde al Ministerio de Educaci¨®n, tambi¨¦n a las familias", y cit¨® el caso "pavoroso" de los poderes p¨²blicos catalanes que han permitido hasta hace poco que se "pudiera acceder a la Universidad sin haber estudiado literatura".

Herralde habl¨® tambi¨¦n de las obligaciones del editor: hacer cat¨¢logos coherentes y atractivos que fidelicen al lector. "El editor tiene que saber lo que desean antes de que ellos mismos lo sepan, y es su obligaci¨®n hacer libros contagiosos". "Tenemos que combatir la falacia de que los libros son caros", pas¨® al ataque, "y nosotros intentaremos defender a los lectores existentes de la agresi¨®n del poder. De la agresi¨®n que ha iniciado el Gobierno contra el precio fijo de los libros, que primero afectar¨¢ a las librer¨ªas, despu¨¦s a los editores y m¨¢s tarde a los lectores".

Blume calific¨® el decreto ley de liberalizaci¨®n de los descuentos en el precio de los libros de texto de "fuerte estocada" del Gobierno.

Seg¨²n datos facilitados en el reciente congreso de Bilbao, el 40,6% de los lectores prefiere comprar los libros en librer¨ªas, y s¨®lo el 5,8% en las grandes superficies, "que son las ¨²nicas que han protestado por el precio fijo, y a quienes el Gobierno ha dado la raz¨®n". "El gran capital no puede dar el jaque mate definitivo a las librer¨ªas y el Gobierno es poco consciente de la situaci¨®n real del sector. Hay que legislar, s¨ª, pero no hacer la ley de la selva". Blume, el m¨¢s joven de los ponentes, arranc¨® entusiastas aplausos de sus veteranos colegas cuando recurri¨® al diccionario para explicar la pol¨ªtica de liberalizaci¨®n del libro. "Liberal: indulgente y tolerante; libertino: desenfrenado en la conducta".