Los embustes de los se?ores... de Chile

La ¨²nica vez que el general Augusto Pinochet Ugarte compareci¨® ante un tribunal penal como acusado, el 11 de diciembre de 1998, en Belmarsh, en el Reino Unido, dijo que solo reconoc¨ªa la jurisdicci¨®n de los tribunales de Chile para juzgarle y denunci¨® "los embustes de los se?ores de Espa?a" que hab¨ªan conseguido arrestarle.Ayer, el ex dictador no hizo declaraciones, pero a tenor de las manifestaciones de su familia, su opini¨®n va por el mismo camino. S¨®lo que a partir de ayer, el general, cada vez m¨¢s cerca del banquillo, ataca los embustes de los se?ores... de Chile.

El fallo difundido ayer por el cual se ha resuelto despojar a Pinochet de su fuero de senador vitalicio por existir fundadas sospechas de que actu¨® como "autor, c¨®mplice o encubridor" en el asesinato de 75 personas en octubre de 1973 en las provincias del Norte y Sur de Chile, por parte de la llamada caravana de la muerte al mando de su lugarteniente "delegado", el general Sergio Arellano Stark, tambi¨¦n procesado, ha acogido todos los razonamientos jur¨ªdicos de las acusaciones. Y ha rechazado todos los argumentos procesales de la defensa del ex dictador, dirigidos sobre todo a bloquear el procedimiento.

Resulta parad¨®jico que el "coordinador" de la preparaci¨®n del fallo de la mayor¨ªa aplastante de 14 votos a favor del desafuero y seis en contra haya sido uno de los miembros de la minor¨ªa, el ministro (magistrado) Humberto Espejo. Porque los argumentos utilizados, el manejo de los hechos y la tipificaci¨®n jur¨ªdico-penal, a decir de algunos juristas y abogados consultados ayer, revelan la pluma de penalistas con acreditada experiencia.

Si ya el n¨²mero de votos, 14 a favor del desafuero, es abrumador, la lectura de los razonamientos y las pruebas indiciarias consideradas hacen del fallo anunciado ayer un acontecimiento excepcional en la transici¨®n pol¨ªtica y en la historia de Chile.

Ayer, tras conocerse el fallo, los familiares de las v¨ªctimas, encabezadas por la autora de la querella contra Pinochet, la abogada y viuda (de la caravana de la muerte) Carmen Hertz, ex directora jur¨ªdica de la Canciller¨ªa chilena durante la etapa del ministro Jos¨¦ Miguel Insulza, e Isabel Allende, hija del presidente Salvador Allende, se dirigieron desde el palacio de los Tribunales hasta el flamante monumento a Allende, en la Plaza de la Constituci¨®n frente al palacio de La Moneda.

All¨ª rindieron un homenaje a Allende, pero tambi¨¦n al juez espa?ol Baltasar Garz¨®n y al abogado valenciano Joan Garc¨¦s, quienes impulsaron la causa en Espa?a y llevaron adelante la batalla legal en favor de la extradici¨®n del ex general en la capital brit¨¢nica.

El fallo recuerda que el desafuero no es un juicio como tal. Simplemente se trata de una fase procesal en la cual para poder acusar a una persona aforada, en este caso al senador vitalicio Pinochet, el juez, en este caso el chileno Juan Guzman, ha de obtener la anulaci¨®n del fuero. Seg¨²n los magistrados, existen m¨²ltiples indicios en la causa para anular ese fuero.

El general Arellano Stark actu¨® en la caravana de la muerte como "oficial delegado" del comandante en Jefe del Ej¨¦rcito, Augusto Pinochet. Tras citas ampliamente los testimonios y diligencias de careo en la causa sobre las ejecuciones y asesinatos y la participaci¨®n oficial del general Arellano Stark, el fallo establece la amplitud de los hechos imputados al ex dictador. "En consecuencia, se encuentran acreditados hechos que presentar¨ªan caracteres de delito de secuestro y homicidios y como ellos habr¨ªan sido ejecutados por un grupo militar, bajo un mando superior y que en el caso de haber habido homicidio los cad¨¢veres no han sido encontrados, estos hechos tambi¨¦n presentar¨ªan caracter¨ªsticas de asociaci¨®n il¨ªcita e inhumaciones ilegales".

En otras palabras, que seg¨²n la Corte Suprema de Justicia de Chile, la causa, instru¨ªda en base a la figura de "secuestro calificado" de 19 personas por no aparecer nunca los cuerpos, y considerada por ello fuera de la ley de Amnist¨ªa autoimpuesta por Pinochet en 1978, se refiere al conjunto de los asesinatos provocados por aquella comitiva militar al mando del general Arellano Stark, es decir, 75 personas.

El fallo matiza "que es conocida la gran importancia que tiene en una instituci¨®n armada de la Rep¨²blica la verticalidad del mando y la obligaci¨®n del inferior de cumplir estrictamente las ¨®rdenes del superior, lo que de no hacer, puede significarle medidas disciplinarias, juicios militares, la destituci¨®n u otras m¨¢s grave, cuando ocurren en tiempos de guerra".

La resoluci¨®n a?ade que "es un hecho de la causa que no obstante que el comandante en jefe de la Primera Divisi¨®n de Ej¨¦rcito con sede en Antofagasta se aperson¨® en el aeropuerto de dicha ciudad cuando aterriz¨® el avi¨®n que conduc¨ªa al entonces en comandante en jefe, y hoy senador , y le represent¨® los graves sucesos cometidos por la comitiva dirigida por el general Arellano en la jurisdicci¨®n que comandaba, aquel en definitiva no tom¨® medidas de ning¨²n tipo en contra de los responsables y por el contrario, a uno lo nombr¨® poco despu¨¦s comandante en jefe de la divisi¨®n m¨¢s importante del pa¨ªs... Por el contrario, aquellos oficiales superiores que se opusieron y denunciaron los hechos fueron, en su mayor¨ªa, posteriormente llamados a retiro".

Los magistrados del Tribunal Supremo chileno, no sin cierto sarcasmo, se?alan adem¨¢s que Pinochet "ten¨ªa claro el concepto de lo que es el mando militar" y citan para ello el panfleto escrito por el ex dictador Pol¨ªtica, Politiquer¨ªa y Demagogia, publicado en 1983. All¨ª, seg¨²n cita el fallo, se dec¨ªa: "En la vida militar se vive, quiz¨¢ con mayor claridad formal que en otra parte en la permanente din¨¢mica de mandar y obedecer. En la organizaci¨®n militar, qui¨¦n no sepa mandar, no sirve. Y quien no sepa obedecer, tampoco sirve. Por lo dem¨¢s, y aunque resulta un tanto dr¨¢stico decirlo as¨ª, en la vida la persona que resulta m¨¢s in¨²til es aquella que no sabe mandar ni obedecer".

El fallo ha resuelto (igual que el Tribunal de Apelaciones) que la salud de Pinochet no requiere ninguna consideraci¨®n por parte del tribunal y que ser¨¢ el juez instructor, Juan Guzm¨¢n, de acuerdo con la ley, quien deber¨¢ considerar el asunto. Ayer, los querellantes se aprestaban a proponer, en el d¨ªa de hoy, que el juez Guzm¨¢n cite a Pinochet para que preste declaraci¨®n como inculpado.

No se descarta que en aplicaci¨®n de la ley, que prev¨¦ ex¨¢menes m¨¦dicos para las personas mayores de 70 a?os, el juez ordene examinar al ex dictador, que tiene 84.