Mejor que Grecia, mucho peor que Francia
"Mejor que Grecia, pero mucho peor que Francia". ?sa es la valoraci¨®n sobre la libertad religiosa en Espa?a que hace el profesor de Derecho Eclesi¨¢stico del Estado en la Universidad Complutense de Madrid, Dionisio Llamazares, director general de Asuntos Religiosos entre 1991 a 1993, en la etapa socialista. Su sucesor en el cargo con los Gobiernos del PP, Alberto de la Hera, cree que la Ley Org¨¢nica de Libertad Religiosa de 1980 "resulta uno de los cap¨ªtulos m¨¢s brillantes de la historia espa?ola de las libertades".Pero De la Hera, despu¨¦s de escuchar a decenas de juristas o dirigentes religiosos, concluye que, en este vig¨¦simo aniversario de la ley, se detectan "fallos y dificultades en algunos aspectos, en los que su aplicaci¨®n, o la de sus normas de desarrollo, se ha mostrado muy dificultosa".
Llamazares acaba de fundar, junto a otros profesores de Derecho Eclesi¨¢stico, la Asociaci¨®n Derecho, Laicidad y Libertades, de car¨¢cter cient¨ªfico, pero con la finalidad de ayudar a que "Espa?a termine seculariz¨¢ndose de verdad". "Mientras el Estado no sea neutral, la libertad estar¨¢ siempre amenazada", dice, preocupado por la actual situaci¨®n. Y antes de repasar el estado de la cuesti¨®n en cada uno de los pa¨ªses de la Uni¨®n Europea, Llamazares concluye que, en Espa?a, "la sociedad est¨¢ m¨¢s secularizada que el Estado y el derecho". "Hay un claro movimiento hacia la laicidad en toda la UE porque ¨¦se va a ser, en definitiva, uno de sus puntos de convergencia".
Laico es la palabra. El nuevo l¨ªder del PSOE, Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero, dice que el partido debe ser "laico"; la Real Academia Espa?ola estudia la revisi¨®n de algunas de las definiciones del Diccionario de la Lengua para ajustarlas a la laicidad del Estado (por ejemplo, anuncia que suprimir¨¢ la expresi¨®n "religi¨®n del Estado" en la definici¨®n de la palabra "tolerancia de cultos"), y en muchos pa¨ªses de la UE se impone la tendencia a separar de manera formal lo que est¨¢ separado en la realidad.
Acaba de ocurrir en Suecia, el pasado 1 de enero, y suceder¨¢ pronto en Dinamarca. Pero en Espa?a, el camino est¨¢ siendo lento. El pluralismo religioso de Espa?a en la Edad Media, cuando convivieron tres religiones en el m¨¢s natural de los respetos, arrumbado despu¨¦s por los Reyes Cat¨®licos y su Inquisici¨®n al decidir que todos sus s¨²bditos deb¨ªan ser cristianos (el terrible principio cuius regio eius religio), se practica ya en la realidad social y en las costumbres, pero no desde el Estado y gran parte de los medios de comunicaci¨®n. Un ejemplo: en Espa?a, decir Iglesia es entender que hablamos de la Iglesia cat¨®lica.
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