El PP europeo celebra el 20? aniversario de Solidaridad ante la indiferencia de los polacos
El Partido Popular Europeo (PPE) se ha apoderado en Gdansk de los actos conmemorativos del 20? aniversario del final de la huelga del B¨¢ltico, de la que surgi¨® Solidaridad, el primer sindicato independiente en un r¨¦gimen comunista. Los obreros brillaron por su ausencia. En los astilleros de Gdansk apenas trabajan hoy 3.000 obreros, frente a los 20.000 de los d¨ªas de la huelga. El legendario l¨ªder de Solidaridad, Lech Walesa, asisti¨® al acto y ocup¨® un lugar enfrente de los dirigentes del PPE. Faltaron varios de los l¨ªderes destacados de la huelga de hace 20 a?os.
No estaba, por ejemplo, la conductora de gr¨²a Anna Walentynowicz, cuyo despido del astillero Lenin fue la chispa que provoc¨® la huelga. El presidente del Gobierno espa?ol, Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar, se proclam¨® ayer, junto con los populares europeos, heredero del sindicato Solidaridad, porque, dijo, "representamos el esp¨ªritu de lucha por la libertad a trav¨¦s del di¨¢logo, el consenso y el respeto a la persona".Con la presencia de unas 300 personas, se celebr¨® ayer en Gdansk una ceremonia fr¨ªa, que no consigui¨® transmitir ni un ¨¢pice de la emoci¨®n acumulada en aquel lugar hist¨®rico, primer eslab¨®n de la ca¨ªda del comunismo en la Europa del Este. No se advert¨ªa ni rastro de presencia obrera. Nada que ver con las masas de huelguistas, vestidos con sus monos azules de trabajo en los d¨ªas de la huelga.
"No hay m¨¢s que gente de traje y corbata", se lamentaba ayer a la agencia France Presse Tadeusz Korzinski, de 45 a?os, un veterano de la huelga de hace 20 a?os. Al intentar acercarse al acto, un guardia de seguridad le increp¨®: "?Qu¨¦ haces aqu¨ª con esa ropa?". Korzinski se lamentaba lleno de amargura: "No queda nada de Solidaridad. S¨®lo el nombre. El sindicato ha perdido su alma. Nos han traicionado y olvidado". En el centro de Gdansk, en la plaza del Ayuntamiento, una pantalla enorme recordaba ayer las im¨¢genes del d¨ªa de la huelga y de la represi¨®n durante la ley marcial. Desde los altavoces se emit¨ªa el sonido original de las negociaciones en el astillero. Apenas un centenar de transe¨²ntes se deten¨ªa a escuchar o contemplar las im¨¢genes en la pantalla.
Regusto amargo
La celebraci¨®n deja un regusto amargo. No aparec¨ªan por all¨ª algunas de las figuras hist¨®ricas de los d¨ªas de la huelga. Otros lo hac¨ªan para capitalizar en votos su presencia ante las inminentes elecciones en Polonia. Lech Walesa se presenta como candidato, sin la menor posibilidad de ¨¦xito, a las presidenciales del pr¨®ximo 8 de octubre. Las encuestas le dan menos de un 5% al legendario l¨ªder de agosto de 1980. Algo mejor lo tiene el actual presidente del partido Acci¨®n Social Solidaridad (AWS), Marian Krzlaewski, tambi¨¦n candidato presidencial, quien estaba ayer en primera fila para la foto, aunque los sondeos tampoco le auguran nada bueno para el pr¨®ximo 8 de octubre.El actual presidente de Polonia, Aleksander Kwasniewski, tiene casi asegurada la reelecci¨®n, con casi dos tercios del electorado a su favor, seg¨²n las encuestas.
Kwasniewski falt¨® ayer en Gdansk, porque no le invitaron. Por aquellos d¨ªas de la huelga de agosto de 1980 Kwasniewski ocupaba cargos dirigentes en el Partido Obrero Unificado Polaco (POUP, comunista) que pronto puso de manifiesto que ni ten¨ªa obreros, porque se fueron con Solidaridad; ni estaba unificado, sino dividido en varias facciones y, al final, hasta exist¨ªan serias dudas de que fuese polaco, dada su obediencia a Mosc¨².
Ahora, Kwasniewski se ha descolgado con una declaraci¨®n de que pens¨® hace 20 a?os entrar en Solidaridad, pero le retuvo contemplar la "estampida" de todos por unirse al sindicato independiente. Krzlaewski aprovech¨® la ocasi¨®n para acusar a Kwasniewski por emplear una palabra tan inadecuada como estampida.
En uno de los actos matutinos de ayer, la inauguraci¨®n de una exposici¨®n llamada Caminos de la libertad, estaba presente el alcalde de Berl¨ªn, el democristiano Eberhard Diepgen, que aport¨® un pedazo de muro. Explic¨® Diepgen a los all¨ª reunidos que la ca¨ªda del muro no habr¨ªa sido posible sin la huelga de Solidaridad. En t¨¦rminos similares se expres¨® el alcalde de Gdansk, Pawel Adamovic, cuando dijo: "Sin el agosto polaco, no habr¨ªa habido la primavera europea de los pueblos el a?o 1989. El camino polaco de paz hacia la libertad abri¨® las v¨ªas a una Europa unida y libre".
Walesa esper¨® la llegada de la delegaci¨®n del Partido Popular Europeo, con Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar y su colega polaco Jerzy Buzek al frente, al lado de Tadeusz Fiszbach, que en agosto de 1980 era el jefe del partido comunista de Gdansk. Luego se les sum¨® Tadeusz Mazowiecki, asesor cat¨®lico de Solidaridad, enviado por el primado de Polonia, el cardenal Stefan Wyszynski, y que lleg¨® a primer ministro.
En su discurso de ayer, Lech Walesa dio las gracias en primer lugar a los corresponsales extranjeros que entonces cubr¨ªan lo que suced¨ªa en Gdansk, porque sin su presencia "la huelga habr¨ªa sido muy f¨¢cil de aplastar". Despu¨¦s Walesa dio las gracias "a los que apoyaron la huelga y a los sacerdotes que aportaban su auxilio espiritual", "a los que nos apoyaron con sus acciones e imprim¨ªan para los boletines de huelga" y, para concluir, a los que, tras la firma de los acuerdos de Gdansk "se lanzaron al trabajo organizativo en todo el pa¨ªs".
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